¿Y POR QUÉ TÚ?

CAPÍTULO 11

-Os estoy diciendo que no quiero.- Le decía a las gemelas, Nicky y Lucy.

-Si quieres ganar la apuesta tienes que hacerlo.- Dijo Lucy, resoplé resignada. El timbre de vuelta a clase había tocado así que me salve de responder.

-Después hablamos, de esta no te salvas, Rubita.- Dijo Nicky, ese apodo me hizo recordar a Max y sin querer estaba sonriendo como boba.

Bueno mejor os explico de que va la apuesta que me han propuesto las gemelas, pues veréis se trata de ir por toda una calle cantando a todo pulmón no seque canción y si pierdo tendría una cita con el capitán de fútbol, lo se una tontería de apuesta pero así son ellas, y bueno lo de la cita, ¡NO QUE ASCO! Ese tío es un asco, se cree el mejor pero es todo lo contrario. Además no me van los capitanes de fútbol que se creen un dios y después resultan ser unos mierdas, los que me van son como el tipo de Max... Ala si que estoy mal, me pegué un zape en toda la frente para haber si así me despierto, como me pegué tan fuerte me hizo daño pero lo peor es que todos se me quedaron viendo raro y se rieron, me sonrojé e hice una cortina con mi pelo para que no me vieran.

*

-¿Al final lo vas hacer?

-Nop.- Dije negando con la cabeza.

-Tienes que hacerlo, o ¿querrás arruinar ese rollo que tienes con tu chico?- Si, les había dicho lo de Max.

-Es que voy hacer el ridículo.- Dije, pero después pensé.- Esta bien lo hago.- Dije resignada.

-Lo mejor que haces, yo tampoco saldría con Derek.- Dijo Nicky mientras saliamos de la puerta principal del instituto.

A lo lejos pude divisar el ¿cuerpo de Max? Si era él porque todas las chicas que pasaban por su lado se le quedaban viendo. No se que me hizo correr hasta donde él estaba, pero en menos de medio minuto ya estaba a su lado.

-¿Qué haces aquí?- Le pregunté.

-Nada, me he pasado por aquí para verte un rato. Ya que en mi instituto se termina antes.- Dijo, rascándose la nuca. Que mono a venido a verme.- ¿Vamos a tomar algo por ahí?

-¡Sí! ¡Helado!- Grité de la emoción.

*

-Quiero el helado de chocolate, vainilla, limón, fresa y nata.- Nombre cada sabor con mis dedos.

-Vaya, ¿estas con la regla?- Tenía razón si que la tenía. Asentí con la cabeza y me sonrojé.- Yo quiero lo mismo.

Después de que nos dieran la copa de helado más grande que había visto, nos sentamos en una mesa un tanto apartada de las demás mesas.

-Dile a tu hermana que este finde se queda con Beth en mi casa.- Le dije interrumpiendo el silencio que había entre ambos.

-Vale.- Y volvimos al silencio.

Cuando terminamos nuestros helados salimos y caminábamos sin un rumbo fijo. Noté como Max entrelazada su mano con la mía, yo no hice nada para impedirlo.

No lo vi venir, tenía los labios de Max moviéndose sobre los míos así que le correspondí. Nos separamos lentamente a tal punto donde nuestras frentes se juntaron.

-Mamá, ¿ yo tendré un chico igual que ese?- Preguntó una niña, la cual hizo que me girará, vi que señalaba hacia donde estábamos.

-Eso depende de ti, Mia.- Contestó lo que supongo que era la madre, yo sin querer me reí.

-¿De qué te ríes?

-Nada.

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Hola, se que es corto pero en fin... he tenido nada excursión, estoy cansada y esto es lo que he podido escribir.

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Besitos ♥♡