El Rey (Saga Médicos Parte 3)

Capítulo 29

Andre

Después del fin de semana en  Escocia, de disfrutar a su familia y de tener una pequeña reconciliacion con Rose por el bien de su bebé, claro que buscó a London, ¿Cómo no hacerlo si se fue de esa manera tan repentina?

¿Y si alguien en el castillo la trato mal y si sus hermanas le jugaron una mala broma?

Acepta dentro de todo que lo haya rechazado, pero necesita saber que le sucedió para irse de esa forma, porqué no contesta sus llamadas y tampoco a ido al hospital.

¿Porqué se fue corriendo así?

Así que Andre miró su celular una última vez antes de ir a trabajar, observó esa foto de Rose y su bebé, cerró su casillero del hospital y se puso su bata color blanco antes de salir a trabajar en lo que soñó desde niño.

Se paso las manos por el cabello, le sonrió a algunas enfermeras y comenzó a caminar por los pasillos para llegar a su zona de trabajo, hasta se detuvo un momento para firmar unos papeles, pero de reojo vio a una rubia corriendo por los pasillos, solo fue un instante, pero conoce ese rico perfume que siempre la aconpaña, dejó los papeles a un lado y corrió detras de ella.

Esquivo a doctores, casi choca con camillas y si su madre lo viera así lo pondría a limpiar vómitos, pero eso poco le importo, corrió tanto que alcanzó a detenerla en el área trasera del hospital, precisamente en el estacionamiento, ella su cubrió el rostro de la lluvia y abrió la puerta de un auto negro que la espera.  

Pero cuándo le habló, se detuvo y London lo miro por primera vez en hace días.

— London, espera, necesitó hablar contigo — Dijo hablando en voz alta para que pueda escucharlo, quiso alcanzarla pero mejor se detuvo — ¿Porqué te fuiste corriendo de Escocia? Los choferes podrían haberte llevado al aeropuerto, te llamó y no contestas, te buscó y tu madre no me deja verte ¿Qué te sucede? Dime porque la duda me esta matando  —

London cerró la puerta del auto con molestia y caminó hasta él, llena de confianza por un momento pensó que lo abrazaria como antes, pero sólo se cruzó de brazos, lo miró de soslayo y se alejó de él lo más que pudo.

— No me interesa saber ya nada de ti, me fui porque en ese castillo no había nada para mi — Contestó con rapidez, London abrió mucho los ojos algo molesta — Mi cita me esta esperando ¿Ya me puedo ir? —

Andre tomó una respiración y se pasó las manos por el cabello con desesperación

— No, no te puedes ir, puedes decirle a tu cita qué te espere — Dijo ocultando la molestia en su voz ¿Que maldito hombre la estará esperando? — ¡¿Porqué te fuiste así?! ¡¿Te hicimos algo, te trate mal?! ¡Dime algo! —

Él rostro de London se puso rojo, no sabe si son ganas de llorar o es coraje, porqué sus ojos se llenaron de lágrimas, sus manos se hicieron puños y sus labios tiemblan.

— ¡No me hiciste nada, pero no puedo y no quiero casarme contigo! No quiero eso para mi, no quiero ser mamá otra vez en este momento — Dijo frustada — Estoy mal, aun no supero la muerte de mi bebe y tú quieres una madre para tu hija, la adoro, pero yo no soy su mamá —

— No, eso no es cierto, nunca te pedí tal cosa, nadie remplazará a la madre de mi hija, jamás, yo te quería para mi — Aseguro seguro de sí — Pero perdóname, prometo no volver a molestarte

London se paso las manos por el cabello frustrada cuando el hombre del auto le habló para poder irse, soltó una amplia respiración y lo miró como si fuera una basura.