London
— ¡¿Hey chica que haces aquí en medio del camino?! —
London al escuchar aquella voz y el ruido de llantas al detenerse, levantó la mirada para ver aquella vieja camioneta casi desbaratada frente a ella, ese anciano de larga barba blanca lleva varias vacas en la parte de atrás y es incluso más viejo que su abuela, pero en horas, a sido la única camioneta que ha pasado por aquel abandonado lugar después de que su taxi la dejará en el inició del pueblo.
¿Pero que pueblo?
Aquí no hay casas, no es un pueblo, no hay nada más que mucho aire, truenos horribles, clima de lluvia, acantilados y el sonidos de las olas, todo acompañado de paisajes escoceces
London paso la mirada asustada de estar sola en medio de la naturaleza escocesa y apretó su maleta cerca de ella, a la vez que se acomodó el abrigo y miró con extrañeza a ese anciano.
Es la última vez que sigue las locuras de su madre.
— Estoy esperando un taxi —Contestó con rapidez, fingiendo no estar asustada.
¿Dijo algo mal?
Porqué ese anciano se partió de la risa mientras sus vacas hacen extraños sonidos, quizá debería de regresarse a Francia, por lo menos allá estaba en plena comodidad con su madre y sus hermanas.
— ¡Aquí no hay taxis niña de la ciudad, aquí no hay nada! Yo soy el único con camioneta y reparto leche de vaca — Dijo señalando un lugar a su lado en la camioneta— Si quieres sube y te llevo al hotel mas cercano —
London negó con la cabeza al recordar las películas de terror que veía de pequeña con su madre, cuándo ambas se levantaban en la madrugada, se hacían un ovillo en los brazos de su padre y veían películas hasta el amanecer.
— No gracias — Dijo tratando de ser educada — Prefiero quedarme aquí —
Aquel anciano frunció el ceño confundido.
— ¿Si sabes que está a punto de anochecer? — Le dijo mirando el oscuro cielo — Lloverá pronto, las olas son muy fuertes y te asustaras —
— No, esperaré a que alguien pueda llevarme a la casa de verano de los reyes —
Aquel ancino volvió a burlarse de ella con mucho entusiasmo.
— Definitivamente eres una joven rica y terca — Dijo sin dejar de mirarla — Ningun auto va a la casa de los reyes, está prohibido, lo hacen para que la familia real disfrute de sus vacaciones, los sirvientes apenas y salen una vez a la semana, pero podría llevarte lo más cerca que pueda, súbete, las vacas no muerden —
London lo pensó mucho antes de subir a la camioneta destartalada, pero al final jalo su pesada maleta y entró en ese lugar que huele a caca de vaca y qué ni siquiera tiene cinturon.
El camino fue largo, demasiado para haber caminado, pero cuándo los árboles comenzaron a bordear el camino y al final de la colina vio una impresionante casa, supo que había llegado al lugar correcto, sólo que la camioneta se detuvo de repente.
— Hasta aquí llegamos — Dijo aquel anciano al verla salir de la camioneta — Suerte señorita, espero que no la confundan con una periodista o los guardias no la dejarán entrar —London movio su pierna nerviosa al quedarse sola en medio de la nada, pero al levantar la mirada vio aquella casa y comenzó a arrastrar su pesada maleta por el lodo, está cansada, sus zapatos la estan matando y para acabar peor, cayó de cara al lodo, la lluvis le arruino su ropa y la corriente de agua que baja por los pastizales escoceses no la deja caminar, sin mencionar que el aire amenaza con volar su abrigo.
¿Y está es la belleza por la cual todos la familia Real viene?
Es horrible, parece un clima de terror, dónde estan esas casas en medio de acantilados, London estaba a punto de darse por vencida, de irse con su depresión de nuevo a Londres y llorar la muerte de su bebé hasta que sus ojos se sequen, pero a lo lejos un hombre de largas botas para caminar entre el lodo y los pastizales se acerco con una sonrisa en el rostro.
— Déjame decirte querida que hasta con excremento de vaca, con lodo en toda la cara y arruinada por la lluvia, te vez preciosa — Andre soltó una fuerte carcajada, la tomó de la barbilla y le quitó un poco de lodo de las mejillas antes de besarla — Ven aquí London —
Nota de la autora
Awwwwwww, Andre me derrite de amor.
¿O sera el intenso calor?
JAJAJAJA Ya sabia yo, que ese par de tortolos se estaban esperando con ansias.
Jajajajaja Ya quiero escribir las locuras de London en la familia real.
JAJAJAJA
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El Rey (Saga Médicos Parte 3)
Roman d'amourDesde pequeño Andre siempre ha tenido claro que quiere ser él mejor médico de Londres, incluso más que su madre, la reina de Inglaterra, pero su obstáculo no es la cantidad de trabajo en el hospital o sus pacientes, sino que es un príncipe sumido...