La luz de el sol que se filtraba por la ventana, producía un brillo en el cuarto, el cuál despertó a (T/N).
El Santo dorado parpadeó múltiples veces para poder abrir correctamente los ojos, y lo primero que notó, fue que no estaba sólo en la cama, bajó su mirada y se encontró a Rias abrazada de él, mientras usaba su camiseta, la cuál le quedaba grande, y parecía un camisón cuando Rias lo usaba.
(T/N) acarició su rostro mientras sonreía de forma radiante, y el mimo despertó a Rias, quién se despertó con los ojos mayormente cerrados, y estaba completamente desorientada, pues solamente levantó su cabeza, pero el resto de su cuerpo estaba en la cama.
Al verla a su lado, y estando consciente de que la noche anterior realmente había ocurrido, a (T/N) lo invadió una felicidad que se esparció en su pecho, y lo hacía incapaz de parar de sonreír.
-Buenos días.- la saludó con una suavidad en su rostro que el no había conocido que hubiera salido de su boca antes.
Rias se talló los ojos mientras bostezaba, y cuando abrió sus ojos azul verdoso, estos parecían brillar.
Rias puso su cabeza en su pecho, y suspiró.
-Buenos días.-
(T/N) estaba fascinado con ella, y su belleza lo enloquecía.
El chico comenzó a jugar con un mechón de su cabello, y Rias lo notó, y bufó mientras que una sonrisa se escapaba de su rostro.
- Tenemos que irnos ahora.- dijo Rias mientras arrugaba su nariz de forma adorable.-Mi hermano nos espera abajo.-
-Que siga esperando.-
La pelirroja rió en los brazos de (T/N).
- Tenemos que ir.- insistió, e intentó separarse de el chico, pero (T/N) la sostuvo, necio a separarse.
-Lo único que tengo que hacer, es estar aquí, ahora, contigo.-
Rias sonrió y se colocó sobre (T/N) en un movimiento gracil, y comenzó a besarlo con rapidez.
(T/N) bajó sus manos por el cuerpo de Rias, y sintió la suavidad de su cuerpo bajo sus manos nuevamente.
-Rias-ojou-sama.-
La voz de Grayfia dentro de la habitación los sobresaltó a los dos, lo que obligó a qué Rias saltara de (T/N), y se cubriera con las sábanas asustada.
-¡Grayfia!.- exclamaron ambos al unísono.
A pesar de estar asustados, Grayfia permanecía imperturbable, tanto que a ese punto, a ambos les parecía aterradora.
-Todos los esperan abajo.- dijo ella de forma parca.-Regresamos a la residencia Gremory.-
Al recibir esa información, tanto (T/N) cómo Rias se miraron a los ojos, estando claramente sorprendidos.
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La residencia Gremory era igual de elegante y tranquila cómo (T/N) la recordaba, especialmente su área de comidas, dónde el clan Gremory incluida Irina, el equipo de Vali, Sirzechs, Grayfia, Azazel, Serafall, y Ajuka Belzeebub se encontraban desayunando.
Todo el mundo había notado que el Santo y Rias habían regresado más sonrientes que de costumbre, así que el ánimo de más de una de las chicas estaba por el suelo, a excepción de Akeno, quién mantenía su sonrisa juguetona mientras estaba en el desayuno.
Todos usaban ropas comunes, y Rias seguía usando la camiseta de (T/N), sólo que la había fajado en su pantalón, haciendo que se viera sorprendentemente bien, mientras que (T/N) usaba ropas algo formales, con ropa de vestir, aunque de forma desarreglada, aún así, tenía un atractivo innegable.
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Héroe DxD: Santo de Santos (Lector x DxD)
Fantasy¿Escuela? Fácil ¿Novias? Nada para preocuparse ¿Salvar todos los mundos? Eso puede ser un problema (Tú en DxD) El protagonista se volverá más poderoso con el paso de las temporadas (OP)
