Capítulo #3.5

57 8 0
                                    

Carolina

Me había encontrado con Malek en varias ocasiones porque tenemos conocidos en común. Es difícil olvidar una cara linda, especialmente esos impresionantes ojos heterocromáticos. Me tomé la libertad de presentarlos puesto que no se han dejado de follar con la mirada.

Cuando llegó hasta donde está la castaña después de bailar con mis amigos, llame la atención del rubio levantando una mano para destacar entre las demás personas. El se percata de mi presencia y camina hacia nosotras.

—¡Hola! —salude con un beso en la mejilla al rubio cuando ya está frente a nosotras— Ella es mi mejor amiga, ¡Reyna Mayor!

El hombre sonríe en dirección a la castaña:

—Malek Águila —se presenta el mismo.

Entre ellos comparten miradas silenciosas y yo lo tomo como una señal para largarme de ahí. Creo que no tendré que preocuparme de cómo Reyna volverá a su casa.

Me dirijo nuevamente a la pista de baile moviendo mis caderas al compás de la música y me detengo por un momento cuando veo a una morena pegada a Joan como un chicle.

Ajá.

Hoy no, amiga.

Vuelvo a caminar con seguridad hacia donde está la parejita y atraigo al pelirrojo hacia mí agarrándolo de su nuca. Me coloqué de espaldas para que mi amiga no nos viera y junto sus labios con los míos en un beso demandante sin importarme las demás personas que nos rodeaban.

Cuando me separo del hombre, la morena ya no se encuentra por ninguna parte.

—Carol, Carol —Joan me llama por mi sobrenombre— ¿Celosa?

Nos pegamos más el uno al otro para no chocar con las personas que estaban bailando. Mis manos se enredan en su cuello y sus manos se posan en mi cadera.

—¿Algún problema si lo estoy? —respondo bruscamente sin importarme un carajo que nuestra relación no sea oficial— Hoy estás conmigo, con nadie más.

Joan echa su cabeza hacia atrás mientras se ríe sonoramente. Cuando se calma mira mis ojos azules con una intensidad que me hace perder la fuerza de mis piernas por un momento.

—Hoy estoy contigo —repite el pelirrojo—. ¿Pero qué va a pasar mañana y los días que le siguen?

Le sonrió mostrando mi perfecta dentadura y el me devuelve la sonrisa. Vuelvo a juntar nuestros labios en un beso más lento pero profundo e intenso. La música y las personas a nuestro alrededor pasan a estar en un segundo plano cuando él intensifica el beso metiendo su lengua y comenzando una guerra de poder. El hijo de puta sabe besar. Nos separamos en un hilo de saliva que pasamos por alto al estar de lleno en la mirada del otro.

Le respondo la pregunta mientras mis dedos se enredan en sus rizos rojizos cuando le peino un poco su pelo.

—Eso depende de ti.

Joan no es ningún santo. Desde que comenzamos con esta relación de "amigos con derechos" él me dejó muy claro que nuestra relación no subiría a más y yo estaba de acuerdo. Lo conozco desde la escuela superior. No recuerdo que alguna vez el pelirrojo haya estado en una relación seria con ninguna persona.

Admito que no está bien que nos involucremos sexualmente pero ya había empezado a caer en la tentación desde hace un tiempo y fue difícil resistirse ante tremendo bombón azucarado andante. Se que incluso Reyna babea cuando lo vemos entrenar en el gimnasio cuando vamos en ocasiones a su trabajo. El chico se cuida bien.

Claro, a diferencia de Reyna, yo no puedo ver a Joan como un hermano. Si ese fuera el caso, la situación no sería tan complicada. Pero uno no elige de quién enamorarse, y yo lo hice de quien no debía.

Obviamente no lo admitiría en voz alta hasta que tenga bien en claro lo que quiero.

Capítulos especiales en donde conocemos a los demás personajes. ¿Les gustaría eso? 

¡No caer en la tentación!.. de nuevo//HotDonde viven las historias. Descúbrelo ahora