Las piezas restantes

32

(Narra Kyouko Kirigiri)

Llegue a la oficina de mi padre y lo primero que vi fue a una chica de pelo plateado intentaba golpear a un chico de pelo rosa y a mi padre agarrando a la chica.

—Uhh... creo que llego en mal momento—Murmuré.

—SEÑORITA PEKOYAMA, CALMESE!—Exclamó mi padre agarrando a Pekoyama con todas sus fuerzas.

—Suélteme director—Dijo Pekoyama con odio intentando golpear a el chico de pelo rosa.

—Creo que es mejor si yo...—Murmuré jugando con la pieza de tipo normal haciendo que unos cuantos Furret aparecieran en la ventana de la oficina.—Adelante...—Murmuré haciendo que los Furret empezaran a entrar en la oficina agarrando a Pekoyama impidiendo que pudiera atacar.

—EH? QUE ES ESTO?—Grito Pekoyama asustada mientras los Furret la empezaban a agarrar.

—Kyouko?—Preguntó mi padre viendo como jugaba con la pieza.

—Hola...

—MI SALVADORA!—Grito el chico de pelo rosa saltando hacia mi.

—Ja, no...—Riolu saltó y de un golpe tiro al chico de pelo rosa al piso.

—Tu me caes bien—Dijo Pekoyama.

—Kyouko, necesitas algo?—Me preguntó mi padre algo confundido.

—Sí, necesito hablar contigo sobre algo.

—Ah, umh, Crawdawnt, sácalos de aquí.—Ordenó mi padre sacando a su Crawdanwnt absurdamente grande de su pokeball.

—Craw!—El Crawdawnt de mi padre escoltó a Pekoyama y al chico de pelo rosa fuera.

—Toma asiento, dime Kyouko, en que te puedo ayudar?—Dijo mi padre sentándose en su silla.

—Necesito que me ayudes en algo.—Saqué el mapa que me dio Rowan y lo puse en la mesa.

—Qué es esto?

—Es un mapa que marca la ubicación del guardián de la pieza ígnea, sí quiero cumplir con mi objetivo necesito todas las piezas. Necesito tu ayuda para encontrar a los demás guardianes, me avergüenza pedirte ayuda pero no tengo de ot- Jin?—Mire a mi padre confundida, el tenia la sonrisa más grande que hay, que lo tiene tan feliz?

—Pensé que nunca me pedirías nada, claro que te voy a ayudar Kyouko, dime, por donde empezamos?

—Necesitare que me ayudes a encontrar al guardián, tengo el mapa pero no la ubicación exacta.

—Perfecto, pero, no has pensado en pedirle ayuda a tus compañeros de clase? No te vendría mal más ayuda y ellos están dispuestos a ayudarte.

—Supongo que debería pero después de casi haber golpeado a Yamada no se si debería.

—Debes de intentarlo, discúlpate con Yamada y pídele ayuda a tu clase, mañana temprano iremos a atrapar pokemon para que tus compañeros se puedan defender y pasado mañana iremos a por el guardián.

—Entiendo... gracias papá, por todo—Me levante y me prepare para salir pero antes de que pudiera abrir la puerta mi padre me abrazo con fuerza.

—Te extrañe mucho, no dejare que te quiten tu felicidad.

—Gracias papá—Abrace a mi padre y con una sonrisa me despedí.

—Salió todo bien, eso es bueno—Dijo Eevee alegre.

—Estoy emocionada por conocer a nuestros futuros compañeros, que hay de ti Eevee?

—La verdad es que me va costar acostumbrarme a no ser la favorita.