Capitulo 26

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Cinco habia llegado a dicha cafeteria, la cual le traia recuerdos no muy agradables, como un hombre con un cuchillo encajado sobre una de las mesas, y mas cuerpos sin vida por todo el local, sacudio su cabeza para borrar dicho acontecimiento y sentarse en la barra.

-Buenas tardes muchacho -saludo Agnes, con una sonrisa de boca cerrada, la cual Cinco copio por inercia- ¿Que va a querer?

-Un cafe negro, sin azucar, por favor -pidio lo mas amable posible.

La amable anciana asintiendo, entro a la cocina.

Minutos despues llego dicho pedido, el chico tomo un sorvo y se hizo la pregunta que habia evitado dias atras ¿Que le sucedia con Katherine?.

Digo, no puedo negar que es linda -hablo para sus adentros, y al darse cuenta de lo que habia dicho fruncio el ceño- no, o bueno, si, lo es, pero no creo que me guste ¿o si?. Tampoco puedo negar, que cuando estoy con ella, todo es distinto, mas facil, y no me importa que no sea esta mi linea temporal, me quedaria si ella me lo pidiera, siempre tiene una sonrisa irritantemente contagiosa, -penso recordando la sonrisa que le dio al abrazarlo hace unas horas, gracias a aquel pensamiento, el chico volvio a sonreir, y al darse cuenta, borro ese gesto- y sin dudas adoro sus abrazos y cariños hacia mi, y mas porque no tengo que pedirlos.

-¿Cual es tu dilema? -pregunto Agnes desde la puerta de la cocina, al ver la confusion en la cara del joven hablo nuevamente- lo vi fruncir el seño, sonreir y borrar esa sonrisa, supongo que esta teniendo un gran debate ¿no es asi?

-O simplemente estoy mal de la cabeza -solto Cinco haciendo que la anciana soltara una risa nerviosa.

-Si, pero no creo que sea eso, soy anciana pero no tonta

-Bueno, hay una chica, con la cual me siento bien todo el tiempo, pero... -dijo haciendo una pausa para buscarlas palabras adecuadas- me ire pronto, y no se que hacer.

-¿Y te atre esta chica? -pregunto Agnes acercandose al chico

-Es lo complicado el asunto, no lo se, sucedio... -no le iba a decir a una anciana que justo hoy habia dado su primer beso, y eso lo tenia confundido.- algo, entre nosotros, y no se como sentirme al respecto.

-Bueno te aconsejo que primero lo hables contigo mismo, no sabes lo que la chica siente, y no creo que quieras confundirla, rechazarla o aceptarla, sin antes tu saber que sientes.

Agnes le dio una sonrisa de boca cerrada, le sirvio mas cafe en la taza semi-vacia del muchacho y se retiro.

Las horas pasaron, clientes entraban y salian, pero el chico se mantenia en la barra, sin prestarle atencion a nada ni nadie.

No entiendo porque esto es tan dificil -se dijo a si mismo

Es porque muy en el fondo, Kathe te gusta ya aceptalo -hablo su voz interna-

Claro que no... Solo es cuestion de dejar la situacion a un lado, se que cuando menos lo espere, volveremos a ser el equipo de siempre, sin complicaciones y sin problemas de amor inexistentes

Cinco llamo con la mano a la anciana quien con la misma sonrisa de siempre se acerco a el.

-¿Todo bien? -pregunto esta una ves se encontraba frente al castaño

-Si, ¿tiene donas de azucar? -pregunto Cinco y al ver que la mujer asentia agrego- una para llevar y la cuenta.

Usaria esa dona para iniciar una conversacion casual con la chica, Klaus tendria que encontrar otra forma de disculparse con ella.

La mesera se alejo y volvio con una pequeña bolsa de papel y la cuenta del menor.

Este sin ver cuanto debia pagar dejo un billete de 20 dolares, tomo la bolsa y muy decidido separo y camino hacia la puerta.

-Espero que todo salga lo mejor posible -hablo Agnes desde la barra viendo como el chico salia de su local.

El trayecto a la Academia le resulto mas corto de lo que el chico recordaba, cuando menos lo penso se encontraba tocando la puerta del cuarto de la chica, al no oir respuesta paso.

Cuando entro se dio cuenta que el cuarto estaba vacio, dejo la dona sobre uno de los muebles de la habitacion y salio a su busqueda, la cual no le llevo tanto tiempo puesto que escucho su risa en uno de los cuartos de sus hermanos.

Cuando se acerco, se dio cuenta que si era su risa, la cual le parecia inconfundible, sin pedir permiso para pasar, entro en la habitacion encontrandose a Klaus y Kathe tirados en el piso en un intento de recuperar el aire, ademas de que habian unas tres botellas tiradas en el piso y la habitacion olia a tabaco.

-¿Que carajos paso aqui? -pregunto Cinco llamando la atencion de los dos, haciendo que estos se quedaran serios al verlo, luego verse mutuamente y volver a reir de manera estrepitosa.

-Hermanito -exclamo Klaus una ves que habia recuperado el aire eh intentando ponerse de pie. Cuando lo consiguio camino tambaleante hacia su hermano- ¿Porque no te unes a la fiesta? -pregunto haciendo manos de jazz, haciendo que el castaño se diera cuenta que este llevaba un cigarrillo entre los dedos.

-Dime que no le diste esto a Kathy -hablo Cinco apretando los dientes.

-Oh, no, claro que no, aun en mi peor estado no haria algo tan irresponsable como esto -dijo haciendo que el chico se tranquilizara un poco.

Cuando volvio su vista a la castaña se dio cuenta que estaba por tomar de un vaso, sin pensarlo dos veces se teletrasporto y arrebato antes de que esta tomara de aquel liquido ambar.

-¿Cuanto has tomado? -pregunto, alejando el vaso el cual desprendia un fuerte hedor.

-Bueno... todo empezo con dos shots de vodka, luego fue otro, y otro.

-¡Yo la acompañe con los shots! -hablo Klaus alzando la mano con orgullo ante sucomentario

-Luego recuerdo que Klaus dijo que deberiamos mezclar vodka con whisky -dijo intentando alcanzar el vaso que estaba en la mano del chico, cuando este se dio cuenta de lo que planeaba la alejo con bastante cuidado.

-¿Como la dejaste tomar? -pregunto Cinco hacia Klaus el cual se encontraba recargado en la puerta abierta de la habitacion a nada de dormirse.

-Bueno... queria hablar contigo, el vodka era para que tomara confianza, ya sabes, aqui entre nos, yo solo queria tomar, y mira, ¡lo logre! ¡yei! -hablo festejando, haciendo que Kathe tambien se le uniera con una sonrisa perdida.

-Se acabo, tu -dijo viendo a Klaus- ve a bañarte, apestas a tabaco, y no del bueno.

-Es que no eh podido contactar con mi distribuidor de confianza, resulta que la droga es algo ''ilegal'' -dijo haciendo las comillas y rodando los ojos con molestia.

Cinco solo rodo los ojos y continuo- y tu, vendras conmigo -dijo viendo a Kathe quien seguia intentando alcanzar su vaso de las manos del chico.

Sin esperar respuesta de la chica la llevo casi arrastrando a su habitacion.

Cuando entraron a esta, Cinco cerro la puerta y cuando volvio su vista a la chica la encontro sentada en el piso recargada en la pared.

¿Academia Umbrella? No existeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora