El doble pecado del Ángel [PAUSADA]

16

Lisa no pudo pegar ojo durante toda la noche, los nervios estaban carcomiéndole la mente por el próximo encuentro, debía adaptarse a la presencia de la castaña con la mayor rapidez posible o sus sentimientos interrumpirían cualquier intento de cercanía. Era demasiado tarde para reconsiderar el plan de Evangeline, había enviado un mensaje en la mañana reconfirmando su encuentro y ahora estaba paralizada frente a la lujosa casa pensando si tocar o no el timbre.

-Demonios Lisa, ¿Qué haces aquí?.- dijo para si misma sintiendo como era apoderaba por el temor-no puedo volver o Evangeline me mataría por cobarde.- suspiro -al diablo.- aumentando su determinación toco el timbre de una vez.

Una voz sonó de un intercomunicador al lado de la puerta -¿Quién es y para que a venido?.-

-Soy Lalisa, la pintora, la señorita kim me dio autorización de venir a verla a su casa.-

-Déjala pasar Woozi.-diferencio la voz de Jennie al fondo, parecía que estaba esperando su llegara.

No hubo otras palabras desde el aparato, en cambio escucho el seguro del portón principal abrirse dándole la oportunidad de empujar para ingresar. La casa era bastante grande, la recibía unas escaleras de piedra que cruzaban un lindo jardín con diversidad de flores, mientras más avanzaba sentía como el camino se modificaba dando a mostrar que la casa estaba en terreno alto. Llego al último escalón dándole oportunidad de ver la casa en si, era muy moderna con una alberca enfrente para pasar el rato, la puerta principal se abrió dejando ver a la chica que irrumpía su sueño y tranquilidad.

-Me alegra que no te retractaras de tus palabras, hubiese sido penoso que mostrarás una faceta poco profesional.- sonrió.

-Nunca vera algo así provenir de mi señorita Kim.-

-Dime Jennie, somos casi de la misma edad así que trátame informalmente.- abrió más la puerta dándole paso.

-Soy años más vieja que tu.- dijo en voz baja.

-¿Qué dijiste?.-

-Qué me parece mejor tratarte así.- sonrió fingiendo inocencia, para su suerte Jennie no escucho lo anterior -así que dime, ¿en que debo trabajar?.-

-Es casi hora de almuerzo, pedi preparar comida para ti también, ¿te parece si hablamos en la mesa?.- el que pensara en su alimentación la tomo por sorpresa.

-No me ...-

-No digas que eres molestia porque estoy cansada de escuchar lo mismo, se que tienes hambre así que pasa y ahórrate los modales.- hablo con un tono amigable pero también un poco determinante mientras comenzó a caminando hacia su cocina.

Lisa estaba curiosa por la actitud de la mas baja, supuso que al ser una familia con modales clásicos muchos le habían dicho lo mismo durante años, así que era notorio el porque le aburría esa frase, rio bajamente y la siguió observando los detalles del hogar.

-¿Eres vegetariana o la carne no es de tu agrado?, es que el cocinero hizo eso.- hablo la castaña.

-Adoro la carne.- sonrió levemente.

-Oh es la primera vez que veo tu sonrisa, deberías hacerlo seguido es un bello adorno en el rostro de las personas.-

-Lamento mi comportamiento anterior, soy alguien con pocas amistades y un tanto retraída.- se sincero.

-Eres un gran misterio pero no te culpare por ello, eres una artista reconocida por lo que evitas amistarte con muchos debido a eso me imagino.-

-Me gusta ser anónima, mi privacidad se mantiene intacta.- un plato de carne fue puesto frente a ella.