10:Juicio No Culminado

128 17 3
                                    

Capitulo 10

— despierta, vinieron por ti.

Abrí los ojos, Himalaya estaba del otro lado de la habitación, lucía igual que antes, solo que ahora parecía estar cansada.

  Me levanté, y lentamente me acerqué a las rejas de la celda, de el otro lado estaba un joven con armadura blanca, su cabello era naranja y sus ojos de color gris, tenia un aspecto rudo; éste abrió la celda con una llave extraña y habló.

—ven — hizo una seña rara para que lo siguiera, di dos pasos al frente, y el joven tomó mis brazos y los esposó. Las esposas tenían un aspecto bastante peculiar, eran de color blanco, irradiaban luz, y una pequeña cadena de color dorado unía ambos lados de las esposas — mantente callado y evita decir estupideces si quieres salir de aquí — finalizó.

  El joven guardia me llevó hasta un pasillo bastante amplio, y paró justo en frente de una puerta gigantesca, esta se abrió.

—pasa, tus amigos te están esperando, te vas a preparar para el juicio, tienes veinte minutos,  deberías aprovecharlos.

—James — gritó Elena — gracias a al cielo que estas bien — me abrazó — tenemos que asegurarnos de que todo salga bien, de otro modo podrías quedarte aquí por mucho tiempo... — hizo una pausa — bien, queremos que digas todo tal y cual como ha pasado, no evites ningún detalle...

—el rey dice que uso mi magia desde pequeño,—solté —eso no es cierto, no sabia nada...

—lo sabemos James, lo que dijo el rey es cierto, tu informe dice que usas tus poderes desde que eres solo un bebé...

—no es cierto, no...

—los hechiceros usan magia desde edades muy tempranas sin darse cuenta, no es tu culpa, pero el rey hará lo posible para convencer a todos de que eres una amenaza.

—¿por que? — pregunté.

—porque es el trabajo de un rey mantener a su reino seguro, y técnicamente, si eres una amenaza, tus habilidades serian peligrosas en manos de un malefista.

—Elena solo faltan catorce minutos — dijo Anaiah.

—es verdad, debes vestir apropiadamente para el juicio — dijo Elena.

—tienen una manera de vestir para cada cosa, deben gastar mucho dinero en ropa — dije en un tono divertido.

Anaiah me dio un traje parecido al que usaba el rey, solo que este no tenia capa, luego me quitó las esposas, sin pensarlo me dirigí a cambiar de ropa lo mas rápido que pude.

— ¿listo? — esta vez fue Anabelle quien me hablaba, esta estaba en la puerta de el pequeño vestidor.

—no, la verdad no quiero ni siquiera salir... Por cierto, ¿cuanto tiempo llevas ahí parada?.

—tranquilo no te vi desnudo.

—¿si me hubieras visto desnudo, me lo habrías dicho?

—no — sonrió, entró y se acercó a mi y acomodó el cuello de el traje — te queda muy bien, luces... Fantástico.

—gracias — ella me miraba fijamente a los ojos, y no pude evitar ponerme un tanto nervioso, traté de evitarlo y pude escupir un par de palabras — si logro salir de esta, no se si quiera volver a casa...

—¿por que lo dices? — preguntó Anabelle.

CAPLUM!!!

  Sonaron las puertas de golpe, y entraron los guardias...

EDEN Donde viven las historias. Descúbrelo ahora