29: Advertencias

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Capítulo 29

-lindo collar -dijo Anaiah señalando la espeda en versión miniatura que había colgado de una cadena en mi cuello- gran idea.

-gracias -ella lucia agotada, triste y vacía- ¿te encuentras bien?

-me siento de maravilla, no existe nada más bonito que ser noqueada por un demonio.

-parece que no soy el único sarcástico aquí -ambos reímos.

-¿Que fue exactamente lo que te dijo Sareeth? -soltó la chica después de un rato.

-dijo perdonará a los hechiceros si dejó que use mis poderes para encontrar su preciado magra evem...

-aj... Podrías no decir las palabras ¿si?, hasta escucharlas es complicado.

-lo lamento, okay, ya no lo diré más.

-si el consigue el libro, podrá romper las barreras que separan Menha, Hucle y Edron... Almas demonios y humanos, todos en un mismo plano -Anaiah se estremeció- sería una verdadera catástrofe.

-y, no es todo, si consigue el libro, también podrá tener el control de las dimensiones, no entiendo por qué quiere hacer eso.

-dinero, fama, poder... placeres mundanos, cuando se tiene un poco de estos, siempre se busca más, James.

-tu lado serio me da miedo, Anaiah -dije en tono burlón.

-relaja las ubres, ese lado no lo verás muy seguido -Anaiah se levantó del suelo, ambos estábamos sentados en el jardín de mi casa, que en ese momento seguía destrozada.

-okay -reí un poco, me levanté del suelo y caminé hacía donde se encontraba Jonis y Anabelle, mientras que Anaiah se dirigió al extremo opuesto de la calle, allí estaba Carol y Yasper, me preguntaba que era lo que pasaba con Carol, parecía estar molesta.

Al parecer, ninguno de mis vecinos habían notado que la casa estaba destrozada, al parecer era un pequeño encantamiento de camuflaje o algo de ese estilo. La mujer de cabello y ojos rojos, que en varias ocasiones había visto ya, se dirigió a Jonis y le hablo en un idioma raro, y mi amigo respondió un par de palabras confusas también, ¿que idioma era ese? Después se lo preguntaría.

-Elena está hablando con los hechiceros mayores -dijo Jonis después de qué la pelirroja se marchara.

-¿sobre la batalla? -quiso saber Anabelle.

-si, parece que están convencidos de tu poder, James.

-osea que es oficial, ¿no? -hablé

-no del todo, Elena quiere asegurarse de que todo saldrá bien, por eso ha hablado con vampiros y hadas, entre más seamos, mejor... Los hechiceros mayores convencerán a los licántropos y elfos.

-y, ¿no es posible llamar... Ángeles? -pregunté.

-¿Ángeles? -Jonis y Anabelle preguntaron al mismo tiempo.

-si, ángeles, ¿no es posible que nos acompañen en la batalla?

-no, digo, creo que no es posible -dijo Jonis.

-¿se puede hablar con los ángeles? -preguntó Anabelle.

-yo lo he hecho -en ese momento, Anabelle y Jonis me observaron con gran asombro, casi con miedo.

-¡¿que, tu hiciste qué?! -preguntó Jonis, su rostro expresaba asombro, felicidad, y terror. Sí, es raro que demostrará todo eso al mismo tiempo.

-he hablado con un ángel.

-es Holenerry, el ángel de la leyenda ¿verdad? -dijo Anabelle.

-¿el de las alas negras? -Jonis preguntó.

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