- A dónde vamos?
- Si te digo no va a ser sorpresa.
- MAYA! Por favooor. Suplicó Carina haciendo su mirada de perrito triste.
- Lo siento, ni esa mirada me va a convencer. Dijo Maya seriamente, mientras se concentraba de nuevo en el camino.
- La próxima vez yo planearé la cita y no te diré nada.
- Ni siquiera hemos tenido la primera cita y ya estás convencida de que habrá una segunda. Dijo Maya acompañada de una risita. – Tienes mucha confianza en ti misma Carina.
- Que puedo decir, sé lo que quiero Maya y estoy cien por ciento segura de que van a haber muchas citas más.El resto del camino se basó en lo mismo, una ansiosa Carina suplicando por pistas sobre en dónde sería la cita y Maya haciendo lo posible para desviar el tema y mantener a la italiana entretenida.
- Llegamos. Dijo Maya mientras daba la vuelta para abrir la puerta del automóvil y tomaba la mano de Carina para ayudarla a bajar.Las dos caminaron de la mano por unos segundos hasta llegar a un pequeño restaurante italiano. El lugar tenía una pequeña terraza, rodeada de luces y flores. Las chicas se sentaron en una mesa que tenía una vista espectacular. El dulce sonido de un violín que interpretaba melodías italianas acompañaba esa increíble velada y Carina no pudo evitar sonreír al recordar su amada Italia y lo mucho que extrañaba su antiguo hogar.
- ¿Te gusta? Preguntó Maya al ver la sonrisa de Carina.
- Es perfecto. Respondió Carina tomando la mano de la rubia sobre la mesa y moviendo suavemente su pulgar.
- Ciao, ¿puedo tomar su orden? Preguntó un mesero amablemente. Carina sonrió al escuchar su acento italiano.
- Ciao, sí grazie mille. Respondió Carina con una sonrisa.
- Oh! Sono italiani? Preguntó el chico imitando la sonrisa.
- Sì, vengo dalla Sicilia. Ma lei è americana. (Sí, yo soy de Sicilia. Pero ella es americana). Dijo Carina señalando ligeramente a Maya.
- Bene, è un piacere conoscerti, spero che ti piaccia il tuo cibo e questa meravigliosa notte. (Bueno, es un placer conocerlas, espero disfruten de su comida y de esta maravillosa noche). Añadió el chico y luego tomó la orden de ambas chicas.
Cuando el mesero se alejó de la mesa, Carina notó que Maya la observaba fijamente con una pequeña sonrisa en el rostro.
- ¿Qué pasa? ¿Acaso tengo algo en el rostro? Preguntó la italiana, sonrojándose ante la mirada de la rubia.
- Nada, es solo que te ves muy sexy hablando italiano. Dijo la rubia, provocando que Carina soltara una carcajada.
- ¿Así? Te puedo enseñar si quieres. Comentó Carina con una sonrisa pícara.
- ¿En serio? ¿Lo harías? Preguntó Maya.
- Por supuesto. Jamás me perdería la oportunidad de ver a Maya Bishop luchando por aprender italiano.
- ¿Quién dice que me va a costar? Soy bastante buena en todo lo que hago, creí que ya te lo había dicho.
- Bueno, tendré que averiguarlo. Comentó Carina con una mirada provocadora.
- Cuando quieras. Dijo Maya en un tono engreído, mientras levantaba una ceja.
Tiempo después de haber finalizado con la cena se acercó de nuevo el mesero. – Spero che tu e la tua fidanzata abbiate apprezzato il cibo (Espero que tú y tu novia hayan disfrutado de la comida). Dijo con una sonrisa mientras les entregaba la cuenta.
- Oh! Non è la mia fidanzata, ma spero che lo sia molto presto. (¡Oh! Ella no es mi novia, pero espero que lo sea muy pronto). Dijo Carina con una enorme sonrisa, mientras veía que Maya la observaba con cara de confusión.
- Oh scusa! (¡Oh perdón!) Buena suerte con eso. Dijo el mesero mientras le guiñaba un ojo a Carina. – Buona notte! Añadió antes de retirarse de la mesa.
- ¿Qué fue eso? Preguntó Maya rápidamente al ver al chico alejarse.
- ¿Qué cosa? Preguntó Carina inocentemente.
- Toda esa plática en italiano y el guiño. Dijo Maya tratando de ocultar sus celos.
- Oh eso! No es nada importante Maya. Dijo Carina sin querer darle mucha importancia al asunto.
- ¿Nada importante? Estoy segura de que él estaba coqueteando contigo Carina. Dijo Maya seriamente.
- ¿Coqueteando conmigo? ¿Qué te hizo pensar eso?
- El guiñó y por qué tuvo que hablarte en italiano, él sabía que yo no entendería nada.
- Él solo estaba siendo amable Maya. ¿Quieres saber qué me dijo? Preguntó Carina levantando ligeramente una ceja. Maya simplemente asintió. – Dijo: "Espero que tú y tu fidanzata hayan disfrutado de la comida". Añadió Carina, viendo como Maya fruncía el ceño.
- Espera, ¿qué significa fidanzata? Preguntó rápidamente Maya.- Fidanzata, significa novia. Novia en italiano. Dijo Carina con una sonrisa tímida.
- Oh! Exclamó Maya sonrojándose un poco. – ¿Y qué le dijiste?
- La verdad, que no somos novias, pero... Carina se quedó en silencio no quería asustar a Maya pues habían quedado en tomar las cosas con calma.
- Pero ¿qué? Interrumpió Maya desesperada.
- Pero espero que lo seamos muy pronto. Soltó Carina, sonrojándose inmediatamente.
- Ok. Dijo Maya.- Ok? ¿Eso es todo? Preguntó Carina confundida.
- Sí. Quiero decir... yo también espero que lo seamos muy pronto. Añadió Maya con una sonrisa tímida.
- Bueno, tendremos que ver como termina la cita y luego ya veremos. Dijo Carina en un tono retador.
- Espero que estés lista para la segunda parte de la cita entonces. Comentó Maya.
- ¿Segunda parte?
- Sí, te prometo que te va a encantar. Dijo Maya con una sonrisa pícara mientras se levantaba y tomaba a Carina de la mano para llevarla a la siguiente parte de la cita.
Perdón por tardarme tanto en actualizar.
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My brother's roommate
Fanfiction¿Qué pasa cuando descubres que la compañera de cuarto de tu hermano no es lo que esperabas?