UN CUERPO SIN VIDA

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No tuvieron elección y decidieron atacar. Jessy lo notaba que era un demonio espiritual de rango "B", y al tener como rehén el cuerpo de una niña muerta, le da cierta ventaja. Jessica comenzó arrojándole energía, pero la niña la capturó para devolverla con más potencia, mezclando su energía con la de Jessica. De esa forma la lanzó contra Johan que se acercaba desde otro ángulo quien la recibió con toda fuerza, derribándolo y cayendo hasta el suelo, donde fue a dar contra los cadáveres de los padres de la poseída niña. Ella se abalanzó contra Jessica que estaba en camino y comenzaron a intercambiar golpes en el aire, no se lograba ver quien de las dos recibía mas daño debido a la velocidad con la que hacían dicho intercambio. Jessy observaba desde abajo en el asfalto la batalla entre ambas, hasta que algo le hizo reaccionar, algo impactó con su rostro, y al revisar que fue se percató que era sangre lo que cayó, tuvo un mal presentimiento, volvió la vista hacia arriba y notaba que caía sangre de quien probablemente era de Jessica, debido a que su enemigo tiene enormes y afiladas garras.

— ¡Jessy, despierta! — Escucha un grito, y al voltear hacia el origen del grito, vio que era Johan.

— ¡No te quedes ahí mirando, vayamos a ayudarla pronto, esta siendo herida por los ataques de ese demonio! —

Despertó, y junto con Johan se elevaron para auxiliar a Jessica. Ella, en uno de sus movimientos, apartó al demonio con una patada enviándolo lejos para inmediatamente atacar a sus aliados arrojándoles energía, quienes la esquivaron.

— ¿¡Qué demonios haces Jessica!? — Grita Jessy sorprendida por lo que hizo su amiga.

— Este demonio es mío, así que no se entrometan. — Responde ella.

En eso, Jessy notó rasgaduras en la blusa, y cortes por todo el cuerpo de Jessica.

— ¡Mírate! Estás herida, ese demonio te está dañando, si continuas así puedes perder sangre peligrosamente. — Le dice Johan.

— En primer lugar Johan, ¡Apártate de ahí! Puedo darme cuenta que me estas mirando las bragas, y en segundo lugar, debes dejarme porque tengo mucha ira acumulada por haber recordado a ese hijo de puta que yo tenía como padre, y debo liberarla desquitándome con éste ser. —

Johan de inmediato bajó la mirada apenado.

— Está bien, pero prométeme que no sucumbirás en la batalla. —

— Te lo prometo Johan. — Responde ella.

— Jessica... ¿Por qué de nuevo? — Pensó Jessy.

El demonio volvió para continuar la batalla, en eso, Jessica rápidamente se recogió el cabello para sujetarlo, lográndolo justo antes de que llegara el primer ataque, y continuaron. Ella tuvo mas cuidado durante el intercambio de golpes, logrando dañar al enemigo, más que éste a ella.

— No es solo por eso que no quiere que nosotros intervengamos en la batalla Jessy. — Dice Johan. — Puedo notar orgullo en ella debido a sus poderes ¿Es la mas fuerte del grupo? — Le pregunta a Jessy, quien responde.

— Si, siempre lo ha sido, cuando practicamos han sido muy pocas las veces que le he podido ganar. Espero algún día alcanzar su fuerza. Y por cierto Johan, ¿Eres un pervertido? — Le pregunta repentinamente.

— ¿Pero que demonios estás diciendo Jessy? ¿Por qué preguntas eso? — Le pregunta él.

— A mi tampoco me engañas, si le estabas mirando las bragas a mi amiga. —

— Cierra la boca niña, y por cierto ¿Qué sucedió con Sandler? Siento su energía pero no se acerca. —

— Debe estarse reponiendo del ataque que recibió. No me gusta decirlo pero él es muy débil, sus poderes quedaron estancados, ya no pueden incrementar desde hace tiempo, eso lo hace el miembro más vulnerable del grupo, y eso es malo, porque mira. — Le dice a Johan señalando la batalla. — Jessica tiene que llevar la carga de que ninguno de nosotros es tan fuerte y las últimas batallas las ha finiquitado ella, porque tanto Sandler como yo, no damos el ancho. Yo puedo soportar mucho y he sido de ayuda, pero Sandler es el que siempre termina herido y en ocasiones debemos protegerlo. — Baja la mano y la mirada al suelo para concluir. — Quiero irme porque siento que estamos perdiendo tiempo en él, pero Jessica opina lo contrario. Le tiene fe, yo quiero seguir con la búsqueda de los arcángeles y dejar a Sandler a su suerte, además, yo... —

GÉNESIS: DESPUÉS DE LA OSCURIDADDonde viven las historias. Descúbrelo ahora