Mew Suppasit es un empresario de 29 años tiene un hijo de 5 años llamado Alexander, es papá soltero.
Gulf Kanawut es un joven de 22 años es huérfano, no pudo continuar con sus estudios, debe trabajar para mantenerse así mismo.
Esta historia no es m...
Hemos llegado ha Maldivas, quede sin palabras cuando llegamos al hotel que reservo Mew.
Entramos al hotel puedo darme cuenta que es enorme y lujoso, fuimos directo a nuestra habitación.
Cuando entramos a la habitación me quede aún más sorprendió por la belleza que se puede ver a través de la puerta corrediza, se puede apreciar un hermoso mar.
En el centro de la habitación se puede ver una cama King size. Junto a la enorme cama hay un sofá blanco en forma de L.
Corrí hacia la puerta y salí al balcón, inhale el aire fresco.
Levante mis brazos mientras cerraba los ojos, respiro el aire fresco. El mar esta tranquilo, esta brillando debido al sol.
Me estremecí cuando mi esposo me abrazo, envolvió sus brazos alrededor de mi cintura. Baje mis brazos, coloque mis manos sobre las suyas que descansaban en mi estómago.
Voltee la cabeza hacia el, esta mirando fijamente el mar. La brisa le sopla el cabello.
Después de nos segundos el volteó a verme, nos miramos el uno al otro por unos segundo, beso mi mejilla.
—¿Te gusta la vista amor?. —dijo Mew, me abrazo con más fuerza.
—¡Si! En realidad me encanta. Gracias!! —me volteó hacia el, le dí un suave beso en los labios.
—¿Estas feliz de casarte con un hombre como yo?. —de repente me pregunto Mew, froto su nariz contra la mía.
Sonreí, acarició su nuca, el aún me sigue abrazando.
—Sería un tonto si digo que no. ¡Por supuesto que soy feliz!! Más que eso, mucho más!. —lo ví sonreír ampliamente.
Me acercó más a su cuerpo, jadeé cuando me beso, chupo mi labio inferior.
—Estoy tan feliz de haberte conocido, estoy feliz de que seas tú con quien me casé. Tu y Alex son los que están completando mi vida además de mis padres, ustedes son lo más importante para mi. —me dijo mientras me miraba a los ojos.
No podría pedirle más a Dios, ya me dio todo, estoy feliz con todo esto que tengo.
—Aprovechemos al máximo nuestra Luna de miel cariño. Vamos!. —dijo para después tomar mi mano.
Deje que me guiará, no se a donde vamos.
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