Dandelion

26

─Debes estar emocionado. ─comenzó la plática Taeil─. Tener la mente despejada es esencial cuando eres el mejor. Tendrás mas motivación.

─No soy el mejor. ─dijo Mark con la mirada en su celular mientras su padre se encontraba a su lado manejando hacia la escuela─. Solo me esfuerzo.

─Para mi lo eres. Estoy tan orgulloso de ti.

Mark se decido a asentir y no tomo sus palabras en serio, seguía enfocado en su celular. Twitter era más interesante que una plática con su padre.

─Deberías juntarte más con Jisung.

Seguía mirando su celular pero puso atención a sus palabras, se sentía raro escuchar ese nombre salir de los labios de su padre como si fuera un conocido para él.

─ ¿Por qué? ─pregunto. Le había contado pocas veces acerca de Jisung, como cuando fue su primer día de escuela y que fueron al parque de atracciones. No le contó mucho pero si lo suficiente para que lo ubicará.

─Su padre y yo. ─golpeo ligeramente el volante con sus dedos dándole la idea─. Nos llevamos.

─No sabía. ¿Desde cuándo? ─pregunto desconcertado.

─Hace algunos años, estos meses nos hemos acercado más por algunos asuntos.

─Me preocupa Jisung. ─admitió Mark. No le agradaba que este cambiara su actitud repentinamente cuando algo se relacionaba con su padre, parecía tenerle miedo.

─No deberías, solo mantente en donde estas y sigue siendo su amigo. Es tan divertido ver la cara del idiota de Johnny cuando su hijo se mete en problemas.

Mark suavizo su expresión hasta volverse seria, casi molesta. Ya sabia a donde llevaría esta conversación.

─No veo a Jisung como un rival, es mi amigo. ─le aclaro comenzando a rascarse su muñeca lentamente, como un inicio de su incomodidad.

─Nadie en esta vida es tu amigo, ya te lo había dicho. Todos son tus contrincantes y deberías quitarlos del camino, como lo haces con Jisung ahora. Si no fuera útil entonces ni siquiera te deberías juntar con él, usa a la gente a tu favor.

─ ¿Por qué debería de hacer eso? Jisung fue el primero que se acercó conmigo sin otras intenciones.

─ ¿Cómo estas tan seguro? ─pregunto su padre deteniéndose en una luz roja─. ¿Pensaras lo mismo cuando Jisung te quite tu puesto? No bajes la guardia.

─No estoy entendiendo.

─Nadie en esta vida te aprecia de la manera que tu piensas, todos ellos solo se llevan contigo para saber tus debilidades y usarlas en tu contra. ─Taeil tomo la mano derecha de su hijo y la alejo para que dejara de rascarse ya que sus pequeñas cicatrices se harían más notorias─. Así ellos podrán ser mejores y quitarle del camino, Jisung no sera la excepción. Todos lo hacen contigo, ¿no te quedo claro cuando estuviste en el extranjero? te arruinaste completamente, si no fuera por mi estarías en la cárcel.

La voz de su padre se tornó severa y brusca, regañandolo. Mark se sintió mal, como si hubiera hecho algo terrible.

─Tenía grandes planes para ti cuando estuviste en Canadá pero arruinaste todo. ─apretó la muñeca de Mark con fuerza hasta que sus nudillos se tornaran rojos y este se aguantó el dolor─. No arruines nada esta vez.

(...)

El recorrido de la escuela hasta el campamento duro unas cuantas horas que para Jisung fueron segundos. En todo el camino estuvo sentado junto a Mark. Los dos se quedaron mirando películas que el mayor descargo mientras que Jisung había traído algunos bocadillos para disfrutar. No pudieron terminarlas ya que a media película Mark quedo dormido en el hombro de su amigo.