27

476 105 23
                                    

Jisung corrió por todo el campamento hasta llegar a una pequeña parte del bosque en donde Taeyong y Doyoung se encontraban lanzando rocas al lago.

─ ¿Se están escondiendo? ─pregunto Jisung al verlos, bajo con cuidado una pequeña colina hasta llegar con ellos─. No los he visto desde que llegue, creí que en realidad no vinieron.

─Te queríamos dar tu espacio. ─respondió Taeyong tomando una roca del suelo para dedicarse a su lanzamiento torpe.

─Estaba con mi amigo.

─No nos has dicho quién es tu amigo. ─dijo Doyoung siendo su turno. Lanzo la roca al lago con fuerza, esta reboto tres veces para hundirse completamente. Se sintió orgulloso al ir ganandole─. ¿Va en tu salón?

─Ah, algún día se los presentare.

─Me alegra que hayas hecho un amigo, era un sufrimiento verte solo.

─ ¿Dicen que estaban conmigo desde que nací, verdad? ─pregunto Jisung y los dos asintieron─. ¿Entonces eso significa que también vieron mis peores momentos?

Volvieron a asentir y Jisung soltó un suspiro de vergüenza.

─Si, fue horrible para nosotros no ser de gran ayuda. Pero aparecimos en el momento correcto.

─Espera, ¿no deberías estar en la actividad mañanera? ─pregunto Taeyong mirándolo y Jisung abrió la boca sorprendido.

─Es cierto, lo había olvidado. ─se apresuró a regresarse antes de que alguien se diera cuenta de su desaparición─. ¡Nos vemos mas tarde!

Taeyong se aseguró que estuvieran solos para seguir la plática con Doyoung. Que ahora este se encontraba sentando en un tronco de un árbol caído y mirando el lago.

─ ¿Sabes que me preocupa? ─pregunto Taeyong.

─ ¿Qué?

─Que firmaras el permiso.

─ ¿Por qué si se entera el director estaremos en problema? ─pregunto Doyoung soltando una risa de burla.

─No, porque el padre de Jisung irá a quejarse una vez que se entere.

La pequeña sonrisa de Doyoung despareció lentamente hasta que su expresión en el rostro se tornó neutral.

─ ¿Querías...verlo de nuevo, no es así? ─preguntó Taeyong dudando en lanzar la otra roca que tomo. La dejo caer─. Sabías que si firmabas esa hoja él iría a ti.

Doyoung asintió lentamente dándole la razón.

─ ¿Por qué? ¿Quieres que se repita todo?

─No. ─contesto sintiendo un nudo en su garganta─. Nada se va a repetir, es imposible.

─No dejes que tus sentimientos interfieran en esto. ─le dijo Taeyong con los recuerdos que volvieron sigilosamente a su mente─. No hice nada esta vez porque quería hacer feliz a Jisung con todo esto pero sigo preocupado.

─No te preocupes por mí, yo me haré cargo.

─Se eso, pero no quiero que vuelvas a terminar herido. Tienes que tener cuidado con alguien como Johnny, no dejes que tus sentimientos te ganen.

─No pasará, se mis límites.

(...)

─Antes de que entre. ─lo detuvo su asistente Dasol tomándolo del brazo antes de que siguiera. Johnny alzo una ceja por esa interrupción─. Cuide sus palabras, Moon puede malinterpretar algo.

─Eso es lo divertido. ─le dijo con una sonrisa egocéntrica para quitarse el agarre─. No vuelva a tocarme.

─Lo siento. ─se disculpó apenada.

Los dos guardias abrieron la puerta del costoso restaurante privado y Johnny entro con una caminaba segura hasta encontrarse con el CEO Moon Taeil, sentado con la carta del restaurante en mano. Lo miro en cuanto escucho los pasos acercándose y de inmediato se puso de pie.

─Un gusto volver a vernos. ─saludo Taeil extendiendo su mano y Johnny la acepto.

─Estos días nuestras salidas han sido más seguidas, debe significar algo a este punto.

─Me gusta ser cercano con personas que vayan por el mismo camino que yo. ¿Pero cómo se encuentra? ─pregunto acomodándose en el asiento─. Escuche que tu nuevo proyecto salió de maravilla.

─Así es, pero no creo que me haya contactado solo para felicitarme. ─dijo Johnny con una sonrisa falsa.

─Me atrapaste. ─Taeil soltó una risa forzada. Ninguno de los dos estaba ahí por gusto─. Tu sabes perfectamente que nuestra reputación es importante.

─ ¿Cuál es tu punto?

─Mi compañía deberá estar de pie aunque mi muerte llegue. Podría tener setenta años y mi empresa tendría que seguir con la popularidad de ahora. La tuya...bueno, me gustaría decir lo mismo pero honestamente me preocupa.

─ ¿Te preocupa? ─pregunto Johnny notando su hipocresía a centímetros.

─Me preocupa el futuro de mi hijo, también deberíamos considerar el futuro de nuestros hijos, ¿no crees? ─pregunto Taeil─. No vivimos en este mundo solos. Mark me ha contado mucho de ese amigo nuevo que hizo, casualmente tu hijo.

─Me entere hace poco de esa amistad.

─ ¿No sería agradable que ellos dos sean los sucesivos a dar continuidad a nuestras empresas? ─pregunto─. Piénsalo, ellos dos podrían terminar juntos y nuestras dos empresas volverse una, tendríamos muchísimo más ingresos de lo que pensamos. Nuestro futuro y el de ellos estará hecho, no tendríamos que preocuparnos.

─ ¿Estás diciendo un noviazgo? ¿Es lo que tratas de decir?

─No malinterpretes mis palabras, Suh. ─dijo este negando con la cabeza─. Si hacemos que los dos hijos de las compañías más importantes de Corea se junten eso llamara la atención de todos. Y si llegamos a más entonces sería una locura que nos beneficiaria.

─Ya entendí. ─Johnny soltó una pequeña risa al saber a dónde iba todo─. Estas hablando de un matrimonio forzado.

─Todos estarán sorprendidos de que dos chicos se casen...y más si son dos hombres. ─dio el punto sin descaro─. La noticia será mundial y nosotros dos salimos ganando.

─Dame tiempo para pensarlo. Tengo que admitir que siempre tienes las ideas un tanto extravagantes.

La sonrisa de Taeil apareció al saber que lo había convencido.

─ ¿Deberíamos empezar a comer?

─No, creo que hablamos lo suficiente. ─se puso de pie acomodándose su corbata─. Por cierto, agradezco la ayuda de su hijo con el tutor de nivel elite. No vuelvas a dar ese tipo de regalos, ya entendí tu punto.

─ ¿Qué regalo? ¿Cuál tutor? ─preguntó Taeil sin comprender─. ¿No será que hables del campamento?

─ ¿Qué? ─pregunto Johnny ahora siendo el confundido.

─Ya veo de que hablas. Solo hice caso a los caprichos de mi adorado Mark, había escuchado que tu hijo Jisung lo ayudo desde que regreso de Canadá. ─dijo recargándose en el asiento─. Deben de estar divirtiéndose en el campamento escolar. Decidí darle el permiso a mi hijo, más como un regalo por ser un buen alumno.

Johnny tenso su cuerpo sintiendo el enojo. De nuevo estaba presumiendo.

─Supongo que ellos dos no saben sobre lo cercanos que somos. ─soltó Taeil apuntándose a si mismo y a Johnny─. Pero sobre el tutor elite...desconozco porque estas enterado, es privado. No lo tomes mal, el profesor solo acepta alumnos de alto nivel como mi hijo.

─Me contactare contigo cuando mi decisión este hecha. ─finalizo Johnny aguantando ese sentimiento que lo estaba quemando por dentro.

DandelionDonde viven las historias. Descúbrelo ahora