Capítulo 24

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Aterrizamos en el aeropuerto de las Bahamas, cosa que me alivió bastante porque Hades me había contado cómo llegaron hasta Italia y yo me mareo en los barcos.

Cogimos nuestro equipaje y Júpiter se unió a nosotros en cuanto pudimos.

- Gracias por traerme. - nos dijo con una sonrisa.

- No hay de qué ¿tus padres están de acuerdo, no?

- Sí, ellos están de vacaciones en la nieve, me iba a tener que quedar en el internado igualmente, así que me dijeron que podía venir.

- Vale.

No estaba demás asegurarse de que no estábamos secuestrando a una menor.

- Hola, soy Júpiter, nos conocimos en el avión de ida a Roma.

Esa niña siempre me hacía sonreír, no entendía como podía ser tan extrovertida, ojalá yo. Siempre estaba contenta y si no, dramatizaba cualquier situación, pero ese era parte de su encanto.

Le tendió la mano a todos los demás presentándose a formalmente. Se paró en Andy y no le soltó la mano, si no que le preguntó:

- ¿Tienes novia o novio?

Todos nos reímos y Andy se quedó bastante quieto dónde estaba.

- Vamos Andy, contestale.

- Eh... Tengo casi cuatro años más que tú.

- Solo es un número, ¿tienes diecinueve?

- Casi ¿tú dieciséis?

- Casi.

Júpiter le sonrió coqueta, era la primera vez que podía decir que la veía como una adulta, cuando estaba ligando con alguien. La verdad es que tampoco se llevaban tantos años entre ellos, pero yo veía a Júpiter como una niña aún.

- Pues entonces, si redondeamos, solo nos llevamos dos años.

- Olvídalo.

- Me pedirás de rodillas que sea tuya. - soltó entonces.

- ¡Andy la niña te tiene pillado! - se burló Levin.

- Cállate. - le dijo él.

- No soy una niña. - repuso Júpiter.

- Yo te veo así - dijo encogiendose de hombros Levin.

- Tengo casi dieciséis, no soy una niña, solo sé lo que quiero.

Se puso a la defensiva y lo entendía, a mi también me daba rabia que los adultos me llamasen o tratasen como una niña. Los dieciséis es una edad muy complicada, eres mayor para algunas cosas, pero muy pequeña para otras.

- Bueeno, será mejor que dejemos el tema, Júpiter no es una niña, lo confirma la ciéncia. - dice Lydia.

Se pone detrás de Júpiter y coge su pelo en una coleta para ponerla a un lado. La hacemos caminar hasta la salida, donde nuestros compañeros están allí aparcados. Hades me agarra de la mano con fuerza mientras vigila nuestro alrededor, sé que está vigilando a Júpiter, que está con Lydia y a las personas de nuestro alrededor, un poco más complicado por la oscuridad.

- ¡Aquí! - chilla Levin.

Nos acercamos a un coche tipo furgoneta y vamos entrando. Zack está al volante y JJ está de copiloto.

- Sube. - me dice Hades sin mirarme.

Él es el último en subir y cuando la puerta se cierra, Hades habla.

- Gracias por venir chicos.

- No las des, qué pedazo de hijo de puta está hecho Matt. - soltó Zack.

20cm InolvidablesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora