Ethan Zanetti.
Aquí me encontraba lavándole el cabello a Keira pues todavía tenía algunos pedazos de los cupcakes que le tiraron, Yannick trajo el blower de mi madre para poder secarle el cabello pero se fue de una vez para que Keira no lo viera, le pongo la toalla sobre los hombros comenzando a secarle el cabello de lado al lado, ella me mira como si fuera la primera vez que me vez, con curiosidad.
—Tuve un sueño extraño —anuncia abrazando su peluche.
—¿Ah, si? —indagó ocasionando que esta asintiera—. ¿Que clase de sueño princesa? —interpeló secando sus oídos.
—Estaba en una habitación pero estaba muy oscuro y muy frio, mi piel se comenzó a hinchar y comencé a ver borroso, había alguien ahí conmigo —menciona mientras tomo un hisopo para limpiarle los oídos.
—¿Quien era princesa?
—Era ella —comenta sería
—¿Ella? ¿Quien es ella? —pregunto pero ya sabía quien era
—Ella, la mujer que me abandonó, aunque parecía triste y lloraba mucho al verme, parecía como si se preocupara por mi pero no es posible ¿Verdad? Ella me abandonó —asegura mirándome fijamente.
Dejo de limpiar su oído para mirarla—. Princesa, las personas hacemos cosas que creemos es lo correcto, por ejemplo yo me comí el sándwich de Ava porque tenía hambre ¿Está eso correcto? —interrogó poniendo un ejemplo bobo.
—No realmente pero tenías hambre así que sería correcto para ti no para ella —responde haciendo que yo asintiera.
—Así es, tal vez ella pensó que era lo correcto y no digo que lo sea pero debió tener sus razones, yo te comprendo no estoy de su lado, yo ni la conozco —diciendo una mentira—. Pero no sabemos cuáles eran las razones por la cual lo hizo ¿Recuerdas tú vida con ella?
—No, pero Bea dijo que era porque estaba muy chiquita.
—¿Bea?
—Si la señorita agradable del orfanato —inquiere pestañando varias veces.
—Bueno ahí está tu respuesta entonces, no sabes cuáles eran sus razones así que no debemos juzgarla hasta saberlo pero también es comprensible si no quieres averiguarlo, lo que decidas yo te apoyo —aseveró dándole una sonrisa la cual me corresponde.
—Gracias Ethan, eres una gran persona —opina levantándose y rodeando mi cuello con sus brazos.
—Cariño no hay de que, siempre estaré aquí si me necesitas —afirmó acariciando su espalda.
ESTÁS LEYENDO
Mi bad boy preferido
RomanceElla solo queria paz mental, no queria verse involucrada en problemas, queria pasar desapercibida pero ¿Que sucede cuando el grupo de porritas decide intimidar a la nueva estudiante? La siguiente al trono decide intervenir por su noble y amable cora...