Luego de una larga junta las Naciones se toman un descanso. México ha vigilado en todo momento al alemán. Desde una esquina ella ve como el chico va hacia el patio. Chile aparece en las espaldas de la mexicana.
Chile: México, vengo a evitar que hagas una locura o peor, qué te rompan el corazón. Alemania no ha tenido una conversación de más de cuatro palabras con nadie, ni si quiera con Rusia.
Mex: Seguro solo es reservado. Además, no hay peor lucha qué la qué no se libra.
Chile: Pero México
Chile: Mira, ya va hacia su lugar de siempre. Deséame suerte.- da unas palladitas en el hombro y corre hacia el jardín.
Chile: ¿Suerte? Te deseo cerebro. Tonta- Mira como la silueta de la chica se aleja -Suerte.
México estaba decidida. Se arregló el cabello, se alzó el escote, sacudió su pantalón y playera. Comenzó a caminar de la manera más sensual qué pudo hacia el tricolor europeo. Este con siempre que se encontraba leyendo un libro.
Mex: Hola Alemania- saluda con una sonrisa. Pero el chico tenía su mirada en el papel.
Ale: Hallo Mexiko/ Hola México - saluda en respuesta sin levantar la mirada.
Mex: ¿Me puedo sentar?
El alemán solo asintió. Ok, era hora de empezar con el ataque.
Mex: ¿Sabías que me gusta el color verde? ¿Tus ojos son verdes, cierto?-decía al momento de sentarse. No le despega la vista del rostro, espera alguna reacción, pero nada.
Ale: Aha/ Aja.
Mex: Cruzaba los dedos para cruzarme contigo.
Ale: Aha/ Aja
Mex: Lo que yo vi en ti, no lo ves ni tú.
Ale: im Ernst? / ¿En serio?
Mex: Tantos juguetes para jugar y la gente prefiere jugar con los sentimientos.
Ale: nun denn/ Vaya
Y se dio cuenta que no le ponía atención en absoluto. Da un suspiro largo. Ve el libro es Orgullo y Perjuicio de Jane Austen.
Desvía su rostro en dirección contraria al chico.Mex: Si sus sentimientos siguen siendo los mismos, dígamelo. Mi afecto y mis deseos no han cambiado, pero una sola palabra suya me silenciará para siempre -murmura.
Vuelve su vista pero Alemania al parecer no le ha escuchado. Suspira.
Mex: Ese es un buen libro. Bueno, me acorde que no le puse agua a los frijoles, nos vemos.
Ale: Pass auf dich auf/ Cuídate
México se levantó, Chile le dio alcance mientras camina.
Chile: ¿Y bien?
Mex: Nada, marcador Mex-0 Ale-1
Chile: Bueno al menos hablo más de seis palabras contigo. - la conforta con unas palmaditas en la espalda.
Ambos latinos se alejan.
Unos minutos después Alemania reacciona levantando su mirada viendo a México ya a la distancia.
Ale: Esa es mi frase favorita. ¿A ella también le gusta leer?
ESTÁS LEYENDO
Amorometro Alemex
AcakPorque el amor también se puede medir. Una mexicana que frutas vendia, a perense asi no era. México, la latina mas alegre de América, se enamora de Alemania. Y dice: Lo quiero pa'mi.