CAPITULO 2

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Despierto con la alarma de mi celular sonando arriba de mi mesita de luz.

Lo apago y estiro todo mi cuerpo haciendo sonidos raros que me hacen soltar una leve risita

Miro donde duerme mi novio y le doy un beso en el cachete antes de irme al baño para empezar mi día.

-¡Buenos días Akira!-Me saluda el niño del diario, como lo llama el pueblo. Cada mañana anda en su bicicleta ganándose la vida vendiendo diarios.

-¡Tomi! ¿Tienes algo para mi?-Me acerco cuando cierro la puerta con llave de mi casa.

-Diarios con políticos aburridos-Veo como agarra uno mostrándomelo- Pero los chistes de la parte de atrás son buenos-Va hasta la ultima hoja y me los muestra.

Veo como sonrie mientras lee la historieta de la ultima hoja.

-De acuerdo, dame dos ¿Cuánto es?-No me interesa realmente lo que haya dentro de ellos, pero me gusta ayudar a tomi, un niño con solo 12 años, sus padres lo abandonaron en la carretera y el caminó hasta llegar a este pueblo.

-50 pesos-Veo como sus ojos brillan cuando le doy la plata-¡Gracias Akira, ten un buen día!-Se marcha pedaleando.

Guardo los diarios en mi bolso y camino hasta mi trabajo saludando a la gente ya conocida en mi recorrido.

Este es un pueblo alejado de toda la sociedad, no hay edificios, ni nada muy extrovertido. Solo casas hogareñas, una escuela pequeña pero hermosa, supermercados con lo necesario y un parque en el que se suelen hacer ferias americanas, donde la gente vende para ganar dinero.

En este pueblo nos conocemos todos, si hay alguien nuevo lo reconocemos al instante. Como dicen: Pueblo chico, grandes secretos.

Y nuestro secreto es un bosque por el cual lastimosamente tengo que pasar, pero nunca entrar, solo es pasar al costado de su entrada.
Muchos rumores y teorías hay sobre este.

Dicen que el que entra ahí, nunca vuelve a ser visto, es como si la naturaleza se los tragara. Solo hay un señor que puede entrar y salir de ese bosque y ese es el alcalde. Él solo tiene permitido entrar.

Nadie sabe que hace ahí o que hay, pero todos conocemos los rumores y ya sean verdaderos o falsos, nadie se anima a comprobarlo.

Llego a una tienda donde siempre compro cosas para comer ya que no desayuno en la casa. Me hace recordar cuando hacíamos eso con mi familia y no es algo que quiera recordar desde que ellos fallecieron en un choque automovilístico.

Entro a la tienda saludando a la cajera.

Voy por el pasillo ya conocido para mi, agarro dos barritas de cereal y una botella de jugo de naranja.

Hago la fila esperando mi turno para pagar.

-Mérida ¿Cómo estas?-Saludo a la mujer de atrás y cuando miro hacia abajo, veo su estomago con ya 6 meses de embarazo-¿Como esta el bebe?-

-Bien niña, aunque bastantes golpecitos recibo de su parte, creo que le va a gustar el futbol-Toca su estomago sobresaliente debajo de su blusa.

Suelto una risita viendo como ya es mi turno.

-Espero que todo vaya bien, te cuidas y cualquier cosa que necesites me llamas-Le digo y coloco mis cosas en la cinta.

Le entrego la plata a la chica poniendo las cosas en una bolsa esperando que me de el cambio.

-Adiós-Me retiro abriendo la primera barrita de chocolate, cuando me detengo sintiendo que me esta siguiendo, miro atrás viendo a una señora tratando de bajar un escalón que hay al salir del supermercado.

Me acerco guardando mi barrita-Disculpe señora ¿Necesita ayuda?-Trato de no irle de golpe o agarrarla para no asustarla.

Veo como su extenso pelo gris lacio le tapa su rostro y tiene puesto un vestido muy ancho con mangas largas, toda su vestimenta, incluido sus zapatos estan en tonos marrones claros.

En su mano derecha tiene una bolsa con un baston y su mano izquierda esta libre.

-Si, por favor, que amable-Me agarra de la mano y noto como esta, además de tener muchas arrugas y exceso de piel que eso es normal en algunas personas de mayor edad, son las cicatrices las que me llaman la atención, están por todas sus manos sobresalientes.

Se tensa cuando me toca la mano haciéndome verla, encontrándome con sus ojos completamente blancos con algo de tono celeste en el medio, como si su pupila fuera esa.

-Ellos tenían razón, eres tu-Susurra tan leve que casi no la escucho.

-¿Disculpe?-Le digo viendo como no deja de verme.

Coloco una mano en su espalda y la ayudo a bajar el escalón.

-Nada niña, nada. Gracias por ayudarme-Se coloca unos anteojos de sol, que no tengo idea de donde los saco y camina algo encorvada apoyándose con su baston

Justo toca la parte en la que se tiene que pasar al lado del comienzo del bosque por lo cual me coloco a su lado.

-Nunca la había visto ¿Es nueva?-Le hablo mientras siento la briza fría, proveniente del bosque, acariciar mi nuca.

Escucho una risa leve de su parte-Seguramente tengo más años que este pueblo-Susurra nuevamente sin dejar de caminar, dando pasos lentos pero seguros.

-Pero nunca la había visto-Escucho ruidos como ramas romperse haciéndome recordar al sueño que tuve.

-No todo lo que vemos puede ser la realidad-Esta vez lo dice claro, pero me deja más confundida.

Su bolsa se cae y yo me agacho rápidamente a juntarle las cosas.
Solo me toma 5 segundos juntar sus cosas para darme cuenta que cuando me doy vuelta la señora ya no esta.

¿Que carajo?

Ay no se, ya me agarro miedo

-¿Señora?-Hablo en voz alta viendo para todos lados, noto movimientos al lado justo donde esta la entrada del bosque.

Veo hacia allí viendo toda las ramas y arbustos que hay, como si estuviera protegiendo al bosque, con arboles altos.

Ya corre perra, no quiero morir hoy.

Abro la bolsa encontrandome con chocolates y gomitas.

Yo digo que nos la quedemos.

Yo no

Dejo la bolsa al lado de un arbol que esta en el principio del bosque asi que prácticamente no estoy dentro de este.

Me doy vuelta tratando de olvidarme el suceso extraño y camino, pero escucho algo que me deja quieta en el lugar.

No te des vuelta maldita.

Mi curiosidad es más fuerte.

Me doy vuelta lentamente viendo como la bolsa ya no esta en su lugar.

Me acerco sin entrar mucho en el lugar buscando entre los arbustos, pero no la encuentro.

Ahora si corre maldita perra.

Si, señora.

Camino rápido viendo de lejos ya mi puesto de trabajo.

°°°°
Hola hermosuras ¿Cómo estan? Espero que bien y si no, les mando muchos besitos.

¿Quien era esa señora? Y lo más importante ¿Quien se llevo esa bolsa con esos deliciosos chocolates y esas coloridas gomitas?

LOS AMO HERMOSURASSSA

CHAUUU

Ella y Ellos [+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora