Capitulo 16

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Manos huesudas se aferran a mi cuerpo intentando destrozarme, pero hay algo más y es que no las siento, no siento como van desarmandome.

Rozan contra mi cuerpo sombras oscuras como una leve briza sobre mi. Destellos blancos ciegan mis ojos permitiéndome observar algo a través de la oscuridad, pero solo llego a ver a una persona y esa soy yo.

Frente a mi esta una persona idéntica a mi como el reflejo de un espejo, solo que ella no esta rodeada de sombras ni manos huesudas dejando arañazos sobre su piel. Ella no esta cubierta de sangre. 

Palabras no logran salir de mi boca, ni tan solo un balbuceo, solo silencio. Solo se escucha el sonidos de mi piel despedazándose. Empiezo a moverme intentando deshacerme de las cosas a mi al rededor.

Intento liberarme pero las sombras solo se aferran más, escucho risas provenientes de la persona frente a mi, veo como me mira con una tenebrosa sonrisa en su rostro.

Empiezo a gritar queriendo pedirle ayuda, queriendo que dejen de tocarme esas manos, que dejen de lastimarme. Pero solo logro que sus carcajadas se hagan más fuertes, que más sombras me rodeen. Hasta que lo único que veo es oscuridad.

Miro hacia arriba viendo la profundidad del negro de la sombras, escucho las carcajadas de la mujer demasiado parecida a la mía, grito por ayuda hasta volverme afónica, hasta que no sale nada de mi garganta como era desde el principio.

Fuertes golpes se escuchan a mi al rededor, fuertes manos mueven mi cuerpo de un lado al otro mientras gritan mi nombre, pero solo quiero deshacerme de esas manos, solo quiero liberarme y quedarme en la tranquilidad.

-Y esto solo es el comienzo-Susurran en mi oído antes de que logre reaccionar y abrir mis ojos para darme cuenta que fue solo una pesadilla.

-Carajo, Akira-Hablan a mi derecha sobresaltándome. Mis ojos observan el alrededor buscando las sombras pero lo único que encuentro es a cinco pares de ojos mirándome.

-¿Que..-Mi voz se escucha débil como cuando vas a un concierto y te dejas la voz ahí.

-Niña casi nos matas de un susto-Susurra el padre de los hermanos mirándome con los ojos muy abiertos.

-Akira ¿Estas bien? ¿Qué sucedió?-La voz de Diego llega a mi derecha haciendo que gire a verlo.

-Agua-Es lo único que logro decir sin que mi voz quiebre.

-Toma-Viene entrando Catriel con un vaso conteniendo lo pedido pero creo que necesitare una jarra entera para poder mejorarme.

-¿Que fue todo eso?-Mariot me observa con sus ojos entrecerrados.

¿Y esta que?

-Que fue ¿Qué?-Susurro aun con la garganta adolorida, tomo un poco de agua queriendo mejorarla.

-Estabas gritando y lo suficientemente fuerte como para preocupar a todos-Habla mientra junta sus manos delante de su cadera.

-Yo...no lo se..solo tuve una pesadilla-Dejo entrar un poco más de agua en mi boca y sigo-Fue extraña, me refiero a más de lo que normalmente son-Cierro mis ojos tomando respiraciones lentas.

-Madre mia niña, todo ese griterio solo por una pesadilla-Las cejas de la mujer se arrugan.

-Mariot-Le responde su marido en tono de advertencia.

-Muy bien, como veo que nadie va a morir, me ire a dormir, descansen-Se retira con el hombre siguiendola no sin antes darme una sonrisa de apoyo.

-Lo siento por nuestra madre, suele ser bastante inentendible a veces-Esta vez Catriel es el que se deja caer levemente sobre la superficie suave.

Ella y Ellos [+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora