Capitulo 18

9.7K 731 76
                                    

Maratón 1/3

Un golpe solido hace que despierte de mi cómodo y profundo sueño. Al parecer estar rodeada por tres hombres grandes y sobrenaturales me tiene en calma, pero no cuando uno me tapa la boca haciendo un movimiento con su cabeza diciéndome que no hable.

¿Qué mierda?

Catriel me ayuda a levantarme del sillón y retirar la cubierta que me protegía del frio. Toma mi mano mientras observa a su al rededor al igual que sus otros dos hermanos.

¿De que me perdí?

A mi no me preguntes.

Marco es el que esta a unos pasos extendidos de nosotros con Diego detrás protegiéndole la espalda.

Otro golpe suena, aun más fuerte que el anterior, alertándome de que ninguno de nosotros fue y no creo que sus padres sean de jugar a las escondidas.

Ajusto más mi mano contra la de Catriel pero el lo único que observa es a nuestro al rededor sin moverse en ningún momento. Los ojos de él al igual que el de los demás, brilla como la luna entre la oscuridad.

La mano de Marco se eleva dejándola a la vista de nosotros para luego señalarnos con dos dedos y luego a la escalera.

Catriel asiente y con un apretón en mi mano el cual supongo que debería ser reconfortador pero lo único que logra es que el temor llegue a mi cuerpo al ver que parece ser serio.

Estoy a punto de decir que no pienso dejar a ellos dos abajo pero parece como si Marco me hubiera leído la mente porque me mira con una seriedad en sus ojos que no me deja ni soltar un tembloroso suspiro.

Pero lo que mis oídos logran captar me deja quieta en mi lugar lo que hace que Catriel me mire como si estuviera loca y Marco como si fuera a matarme él mismo si no subo esa escalera.

Mis ojos los miran con atención al ver que ellos no captan lo que estoy escuchando. Los pasos en la planta de arriba me alertan haciendo que ponga a Catriel detrás mío en un segundo. Miro hacia arriba intentando ver algo pero mis ojos humanos no logran diferenciar nada.

Hasta que escucho el sonido de algo pasar lo suficiente rápido para generar un ruido antes de ver la punta de una flecha frente a mis ojos apuntando directamente a mi estomago. Y hubiera logrado herirme si no fuera porque una mano la había agarrado.

Veo a mi lado a Diego observar en la dirección donde antes estaba dirigida mi atención-Malum-Un gruñido sale de lo profundo de su garganta haciendo que los otros dos le sigan al escuchar lo que dijo.

Oh, esto se va a poner feo.

Dos cuerpo se tiran desde al balcón de la escalera hasta caer en dos patas sobre el primer piso dejándonos ver unos seres completamente asqueroso con un hedor putrefacto. De pronto seis más bajan por la escalera haciendo que los dos hermanos frente a mi me pongan detrás de ellos.

-¿Oigan se olvidan la parte en la que le rompí la nariz a uno?-Cuestiono alejando el misterioso silencio que se había generado.

-De lo cual estoy muy orgulloso, caramelito-Creo que no hace falta nombrar quien fue el que lo dijo-Pero esta raza es diferente, ellos están ascendidos-Murmura lo ultimo con cierta furia en su tono como si odiara la idea de que estos seres estuvieran invadiendo su casa.

-¿O sea que si le rompo la nariz a unos de ellos me dejaran pelear y no me querrán alejar de la pelea?-Demando intentando que me sigan el juego.

Catriel y Diego arrugan las cejas tratando de no quitarle la mirada a los tres de enfrente. Pero su rostro demuestra confusión al oír mis preguntas en situaciones como esta.

Vamos chicos, son listos

-No lo creo, ellos no son tan fuertes. Podrías destruirlos al instante- El significado de sus palabras me hace saber que fue el único que entendió a lo que me refería.

Miro a Marcos con un puchero-¿Entonces podrías terminar con esto rápido? Su aroma me esta causando nauseas- Lo ultimo cumple su función al notar como su olor se hace mucho más fuerte haciendo que no sea difícil que su esencia llegue a los padres de ellos.

Se que podrían matarlos, pero prefiero evitar eso, no quiero que ninguno de los chicos tengan ni un solo rasguño en su cuerpo.

¿Cómo se que que estos seres cuando se enojan, su hedor se hace más fuerte al igual que su presencia? Oh fácil. Uno de los libros que contenía la biblioteca se trataba de ellos y leí una parte rápida de sus debilidades antes de dejarlo de nuevo en su lugar.

Antes de que ellos reaccionen diez lobos se movilizan lentamente rodeándolos a ellos.

-¡Como se atreven a entrar en nuestras tierras y derribar a nuestros soldados!-La voz del señor Marcelo Blagden llega a mis oídos haciendo que salte en el lugar debido al tono de su voz. 

En el poco tiempo que lo conozco, pensé que era un hombre tranquilo y que su mujer era todo lo contrario. Pero al parecer me confundí al ver como Mariot aparece por la puerta mostrándose tan amenazante como su esposo. Se complementan divinamente.

-No fue tan difícil, al parecer colocan a los más débiles a cuidar sus tierras o tienen un pésimo entrenador- El Malum muestra una sonrisa de dientes afilados y amarillos haciendo que haga una mueca con mis labios.

Pero al parecer Marco fue el más afectado con su comentario ya que sus manos se vuelven puños soltando un vigoroso gruñido haciendo que se me pongan los pelos de punta y ahora que lo recuerdo, él es el que entrena a los guardias.

Oh. Ya entendí.

Se coloca frente al ser de ojos amarillos y lo mira desde arriba ya que Marco lo supera en altura-Yo solo puedo insultar a mis alumnos, nadie más- Sus palabras a pesar de no ser tan lindas, resultan reconfortadoras para los lobos que se colocan detrás de él.

El malum frente a él traga ruidosamente mientras que no deja de mirarlo como si eso le quitara el temblor de sus piernas.

Marco sonríe mostrando sus perfectos dientes con dos colmillos sobresaliendo de ellos. El primero golpe que empieza la pelea es de el ojos negros contra el de ojos amarillos.

Mariot y Marcelo también participan en la pelea, trabajando como pareja, protegiendo la espalda del otro.

-¿Querías mostrarnos como le rompes la nariz a uno de estos?- La voz de Diego llega a mis oídos mientras yo observo toda la habitación y la lucha que se esta generando- Demuéstranos que tan caliente eres haciéndolo-Esas son sus ultimas palabras antes de darme una sonrisa y guiñarme un ojo de forma coqueta.

Sonríe mientras niego con mi cabeza pero mi acción es interrumpida por una mano que agarra mi antebrazo y tira de el colocándome de frente a uno de ellos.

-Hola princesa ¿Quieres jugar?-El aliento nauseabundo llega a mi haciendo que haga una mueca.

......

Buenasssss

Aqui les traigo el primer capítulo del maratón. Espero que les guste hermosuras.

Los amooo<3

Chauuuu

Ella y Ellos [+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora