Varios días después de que Yeonjun y mi madre se conocieran me fui a dormir con una extraña sensación. Ambos habían estado muy raros, casi distantes conmigo, aún cuando me trataban con tanto cariño como siempre. Mis sospechas solo incrementaron en casa ocasión en que Yeonjun llamó a casa para hablar con ella. Mi madre siempre me pedía que buscara algo en el sótano o preparara algo para merendar para que así yo no pudiera escucharla contestar.
Por otra parte, Yeonjun me hizo una pregunta estando en la estación. Eso no debería de ser raro a estas alturas de nuestra intima relación, pero lo fue.
Él preguntó si yo me sentía muy incomodo en lugares abarrotados de gente. Yo le respondí que nunca había estado en un lugar abarrotado de gente, que lo más parecido a eso fueron los festivales escolares, de los que siempre me retiré temprano porque de todas formas no tenía amigos para disfrutarlo.
A parte de estas cosas, todo en nuestra vida siguió su curso normal. Mi peliazul se veía menos triste por lo ocurrido con sus padres y volvió por completo a su faceta optimista.
Yo podía volver a dormir con tranquilidad por las noches.
Lo más extraño ocurrió cuando justo el día que quité mi alarma para poder dormir hasta tarde, algo me despertó abruptamente.
Un sonido agudo como el de los micrófonos afinandose al encenderse me taladró los oídos a las ocho de la mañana. Fue insólitamente fuerte, como si afuera de mi habitación hubieran cientos de altavoces engrandeciendo el sonido.
Me incorporé y con dos de mis almohadas tapé mis orejas con vehemencia, conteniendo dentro de mi garganta un grito desesperado.
El ruido fue mitigandose, afinándose hasta que prácticamente desapareció. Yo exhale con alivio y trague saliva, preparado para levantarme de la cama y descubrir qué rayos había sido eso cuando empezaron a sonar los acordes de una guitarra. Tan dulces, que mi cerebro a penas pudo procesar el cambio tan repentino.
Abrí la puerta de mi habitación y empezaron los acordes de piano de una canción que yo reconocía muy bien, porque...
Chiquitita tell me whats wrong
You're enchained by your own sorrow...
In your eyes there is no hope for tomorrow.Porque era la canción que mi madre solía cantarme de pequeño cuando llegaba a casa después de las visitas al psicólogo. Una balada, casi una canción de cuna del mítico ABBA.
How I hate to see you like this
There is no way you can deny it
I can see that you're so sad so quiet...En pijama caminé por el pasillo del segundo piso arrastrando los pies y sosteniéndome de la pared hasta llegar a las escaleras.
Chiquitita tell me the truth
I'm a shoulder you can cry on
Your best friend
I'm the one you must rely onBajé los escalones con la inquietud de mi niñez aglomerándose en mi pecho, y la necesidad de encontrar a mi madre y llorar en su hombro volvieron después de tantos años.
Cuanto el coro empezó la mujer a la que estaba buscando salió del umbral de la cocina, sonriendo y abriendo sus brazos para mi.
—Chiquitita you and I know, how the heartaches come and they go and the scars they're leaving~ —cantó con dulzura— You'll be dancing once again and the pain will end. You will have no time for grieving~
Corrí a abrazarla, dejando que ella cantara el resto de la letra para mi mientras sus dedos peinaban la hebras de mi cabello y besaba de vez en cuando mi frente.
![](https://img.wattpad.com/cover/255156877-288-k19445.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Amado silencio. | yeongyu
FanfictionBeomgyu se hace pasar por mudo. Todo bien, hasta que conoce a alguien que lo incentiva a hablar. ➳ Romance soft ➳ Yeonjun + Beomgyu ➳ Capítulos cortos? ➳ Sin corregir ➳ Portada realizada por @tddiih ♡ ➳ NO se aceptan adaptaciones