Capítulo 32.

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MALIK

—¿Qué mierda haces acá?— le repito mirándolo fijamente.

—Tú sabes perfectamente que hago aquí hermanito— sonríe de lado.

—Yo no soy tu maldito hermano— escupo con rabia y me parece ver un destello de dolor en sus orbes azules.

Está por responderme cuando un grito resuena por el lugar, me doy la vuelta y veo al idiota de Cold mirándonos con los ojos muy abiertos… al igual que Kayra y su amiga.

—¡Juro que no tome ninguna droga de mierda antes de venir, pero estoy viendo doble!— grita y se restriega los ojos, luego se acerca a Skyler—. 

¿Dime que tú también los ves por favor?

—¿Quién mierda eres y qué haces aquí?— la voz de Nicola irrumpe en el lugar y veo que está detrás de Derek apuntando con un arma— Date la vuelta y pon las manos en alto.

—No creí que lo tuyo era dartelas de policía Smirnov— comenta con burla, Nicola nos mira en Shock— Vaya, al parecer mi belleza está encandilado a todo el mundo.

Siento como aprietan mi mano, volteo y veo a Kayra que me da una pequeña sonrisa, una que no soy capaz de devolver.

—Pero si es mi cuñada— dice mirando de arriba abajo a mi novia.

—Ni se te ocurra mirarla pedazo de mierda— espeto, luego me giro a los demás o bueno a Kayra— Nos vemos en casa.

—Pero Malik…

—Ahora no— niego saliendo del lugar.

—Que humorcito te cargas— dice Derek abriendo su auto.

—¿A qué mierda volviste a NY?— pregunto de nuevo.

—No te queda hacerte el desentendido— ríe empezando a conducir— Pero bueno, vi que las cosas se estaban poniendo feas y decidí que era mi momento.

—¿Tú momento para que?

—Lo que dije la última vez que vine era verdad, Dominik— me mira de reojo— Vine a recuperar a mi herma...

—¡Mi maldito nombre es Malik! ¡Malik Wilson y no soy tu puto hermano!— grito con furia— Dejé de ser Dominik Koch desde el momento en que me dejaron en la maldita calle como a un perro, en realidad nunca fui parte de tu familia, tú más que nadie debería saberlo.

Aprieta con fuerza la mandíbula y sus nudillos se vuelven blancos, de pronto aparca en medio de la nada y yo bajo enseguida porque si no estoy seguro de que esto terminará mal.

—¿Crees que no me arrepiento de lo que hice?— dice enojado detrás de mi— ¿Acaso crees que no me atormenta cada puto día de mi vida lo miserable que te hacía sentir?

—¿De verdad quieres que responda a eso?— rió irónico.

—Pues si— espeta parándose enfrente de mí— Cada maldita noche te recordaba Do… Malik. No hay día en que no me arrepienta de lo que te hice… de todo el daño que te cause.

—¿Por qué ahora?— pregunto, él me miró confundido— Porque después de tantos años apareces ahora.

—¿Crees que eras el único al que padre… Anton amenazaba? Pues si es así déjame decirte que eres muy ingenuo.

—¿Te amenazaba?— inquiero burlón— Creí que eras su hijo predilecto, intenta algo mejor.

—Descubrí la verdad de los Rinaldi y los Koch— dice de pronto.

—¿Qué?

—De verdad no te miento cuando te digo que me arrepentí de todo lo que te hice Malik— suspira cansado— Cuando te fuiste vi todo con otros ojos, aunque no lo creas yo siempre tuve envidia de ti.

Quiéreme Por Quien Soy Donde viven las historias. Descúbrelo ahora