"Flor Pasajera"

CAPÍTULO 17

- Si, disculpa – emití una sonrisa que no reflejaba una emoción tranquila – solo estaba pensando en algo – preferí ignorar el tema, quizás sea lo más apropiado en estos instantes, ya después tendré tiempo de hablarlo con él aparte de pensarlo de forma coherente, no quiero que se moleste el día de hoy, esperaré algún tiempo.

- ¿Pensando en algo? ¿No me piensas decir? – me siguió cuando volteé mi cuerpo para dirigirme a las gradas que se encontraban detrás de nosotros, quería descansar un momento, tantos pensamientos y preocupaciones me causan estrés - ¿Entonces? Estoy esperando tu respuesta, dime que paso – me senté en la grada inferior en donde acto seguido Milo imitó mi acción, a veces considero que es demasiado insistente, incluso para mí, pobre de Shaka al tener que soportarlo, de seguro se aburrió de su constante parloteo y lo alejó, por eso regresó más rápido de lo planeado.

- No pasó nada, solo que estaba pensando en.........lo que me dijiste sobre mi hermano, me sigue preocupando – mentí, pero no del todo, mis palabras contenían algo de verdad en ellas, aunque fue lo único que se me ocurrió para evitar sus berrinches, espero que me halla creído. Volteé mi mirada hacia él un poco desconfiado por su reacción, se mostraba serio lo cual no era común además de que me generaba nervios, me niego a decirle la verdad por más que insista, sentencié mentalmente. Lo observé lentamente y analizando sus muecas mientras intentaba ser firme, en donde al final en todo su rostro se reflejó una sonrisa que me hizo suspirar tranquilo, sé que ya no hay necesidad de preocuparse.

- Como te dije no deberías hacerlo – mencionó a la par que posaba una mano en mi cabello y lo revolvía, odio aquellos hábitos.

- Pero lo hago – busqué con la vista a mi hermano encontrándolo en un segundo, se le ve tan contento practicando con Saga, debo recordar también que ellos merecen un tiempo para desechar por completo viejas rivalidades, tienen una nueva oportunidad de vida y sería hermoso si terminan perdonándose, tengo conocimiento de que mi hermano ha estado pensando sobre ello durante mucho tiempo.

- Que exagerado eres, aunque no voy a decir nada más respecto a eso – tenía que preguntarle a Milo si lo habían botado, aunque lo más probable es que lo niegue en su totalidad, aun así, hay que hacer el intento, al final terminará por decir la verdad al verse atrapado en sus propias mentiras para salvarse de mis burlas.

- Por cierto, ¿Cómo te fue con Shaka? – lo mencioné con un tono burlón mientras lo veía encogerse un poco en su lugar a tal grado de parecer un niño como en los viejos tiempos, me producía cierta ternura ya que desde hace mucho no lo observaba con aquellos gestos tan naturales en cada uno de sus movimientos, todo por causarle una buena impresión a Camus, para que este pueda identificar en él madurez, como siempre solía decir que le hacía falta en cada una de sus decisiones y acciones, llegando a distanciarlo por un momento de mí, debido a una discusión para nada interesante.

FLASHBACK

- No puedo creerlo Milo ¿Enserio piensas cambiar tu actitud solo para complacer a tu querido Camus? Si en verdad te quisiera, al menos un poco, te aceptaría tal cual eres y no cambiaría lo que forma parte de tu esencia – expresé molesto mientras me levantaba de uno de los cómodos sillones que se encontraban en la casa de Escorpio, había tenido la amabilidad de subir para conversar un rato con Milo, más jamás imaginé que llegaríamos a este punto solo por un comentario que emití, lo cual al parecer desató un instinto sobreprotector en mi amigo cuando en realidad no tenía por qué hacerlo, si como él dijo no son nada por el momento. Aunque podría jurar que esta relación para nada saludable no llegará a algo positivo al fin de cuentas, sus actitudes son tan opuestas que no encajarían por más que lo intentaran, hay la cierta creencia que afirma que los polos opuesto se atraen, más eso lo considero una absurdidad impuesta por los antepasados que no poseen una minina pizca de verdad, es una estúpida forma de querer dar respuesta a relaciones inexplicables, en donde sus protagonistas son personas poco comunes a mi criterio, los individuos se deben de complementar para tener un balance en sus sentimientos y demostrar los mismos o por lo menos el grado de percepción de estos.