Estaba mareada, tenía nauseas y lo peor es que no podía ver nada, ¿que demonios había pasado después de que esa mano me llevara hacia el portal?
Tenía las manos y los pies atados, los ojos vendados y una sed con la cual podía vaciar cualquier río que hubiera cerca. Podía notar que estaba en el suelo, me dolía el trasero, debía estar mucho tiempo ahí sentada; también escuchaba un forcejeo constante detrás de mi.
-Ah...- tragué saliva levemente mientras intentaba forzajear las manos.
-Mira, se a despertado- una voz ronca sonó cerca mía, mi piel se erizó-, ¿le quito las vendas?
-Si, quitaselas.
Acto seguido, noté la venda caer sobre mi cuello, la luz me cegó por un momento, entrecerré los ojos e intenté mirar hacia dicha voz ronca.
-Eh, que estoy aquí.- una mano, que al parecer tenía un guante muy grueso, agarró mi barbilla.
Parpadeé varias veces, hasta que por fin pude ver con claridad.
-S-Shigaraki Tomura...
-Ah, conque ya te informaron de quien soy eh...- comenzó a rascarse el cuello y suspiró con fuerza.
Miré aterrorizada a este, ¿que era lo que quería de mi?
-¿Que es lo que quieres de mi? No soy útil, mi don es poco útil, lo juro... - el temoz me hizo decir cosas que no llegaría a decir a cualquier persona- Yo--
-Cállate- miré a mi izquierda, el tipo de la voz ronca, cuyo aspecto era de un chico que tenía pelos oscuros, y unos ojos azul celeste preciosos me miró con desigualdad- no interrumpas a Shigaraki.
-Dabi, gracias pero no hacia falta, ve a la puerta.
"Dabi" era como se llamaba aquel chico.
-Si, si...- suspiró y se acercó a una puerta, supuse que era la entrada o la salida del lugar donde estaba.
-¿Donde estoy?- pregunté mientras miraba al techo y luego detrás mia- ¡Bakugo!
¿Bakugo había venido conmigo? Yo solo recordaba que me solté de él en el último momento. Por mi culpa estaba atado de pies y manos a un pequeño poste del lugar, con la boca y los ojos vendados.
-Ah, este tipo es un pesado, no es la primera vez que lo tenemos aquí. Gritaba demasiado, no paraba de insultar, es odioso- Shigaraki rascó su ojo mientras se ponía al lado de Bakugo.
-Porfavor, no le hagas daño...
-Tranquila, lo soltaré cuando nos prometa irse y no contar nada.- parecía haber sonreído, sus ojos se achinaron levemente.
-¿Que no debe contar?
-Una historia que nunca nadie te contó, ah~ Al fin a llegado el día de la verdad.- soltó una risa mientras se sentaba frente a mi.
-Podrias quitarle las vendas, por favor...
-Dabi, quítale las vendas de los ojos y de la boca a el crío, y de paso sueltas a (T/n), no puede salir de aquí.
Dabi hizo caso y me soltó, luego fue hacia Bakugo he hizo lo mismo.
-Agh, joder...- Bakugo escupió, miró a Dabi con los ojos llenos de rabia y luego a Shigaraki- ¡Esta vez yo seré quien te reviente!
-Bakugo...- me levanté torpemente y me acerqué hacia el- ¿Estás bien?
-¿Desde cuando tienes tanta puta confianza conmigo como para llamarme por mi nombre?
Algo avergonzada miré a Bakugo a los ojos, los cuales me miraban, no con rabia, cosa que me extrañaba levemente.
-Dejaos de romances inútiles, (T/n), voy a comenzar a contar la verdad.- Shigaraki miró al techo y suspiró leve- Hace 14 años que no te veo.
-¿Qué?- extrañada miré a este.
-Tu apellido no es Nanase, es "Shimura" pero como tus padres están muertos, te apellidas Shigaraki, como yo. Deja que me explique mejor- se acercó a mi un poco, poniéndose de cuclillas-, eres mi hermana pequeña.
Sentí nauseas al escucharlo decirme que soy su "hermana pequeña", puse mis manos sobre mi boca y lo miré. No sabía que decir o hacer.
-Déjate de bromas idiota.- Bakugo me miró y luego a Shigaraki- Tu historia de mierda no le importa a nadie, no intentes hacer que (T/n) sienta pena por ti, porque no es así.
-Cállate.- Shigaraki se levanto y le dió una parada en el estómago a Bakugo, el cual se retorció del dolor.
-¡No!- me puse delante de Bakugo, mirando a Shigaraki mientras las lágrimas salían de mis ojos- si eso... Es verdad, cuéntame todo.
-(T/n)... No seas tonta, no te creas lo que dice este idiota.
-Prefiero escuchar esto antes de que te maten- miré sería a Bakugo, en su cara había una gran expresión de compasión.
-Bien, como iba diciendo- Shigaraki me miró, poniéndose de cuclillas de nuevo-, nuestro padre no quería que se hablará de héroes en casa, nuestra abuela era una gran heroína, según lo que me había informado de pequeño. Cuando apenas tenías 2 años, desarrollé mi don, desintegrar.
Hizo una pausa.
-Papá me golpeaba siempre que decía que quería ser un héroe, y un día estaba en el patio de casa, con Mon, nuestro perro... Desarrollé mi don justamente en ese momento, mientras mencionaba todo el odio que le tenía a nuestro padre. Mon se murió por culpa mía, igual que nuestra hermana mayor, mamá y los abuelos.
Me miró y sonrío.
-Por suerte, te tenían que recoger de casa de una amiga de mamá, a ella no le gustaba que estuvieras en casa cuando papá podía pegarme, por si le llegabas a tener miedo, pero gracias a mi papá ya no está. Huí lejos de casa, al parecer la amiga de mamá fue a nuestra casa y llamó a la policía, para después ponerte en adopción. Yo fui bien acogido por gente como yo, y ahora que te he encontrado y veo que tu don es muy bueno, me interesa que te quedes conmigo.
-No puede ser verdad...- mis lágrimas caían rápido por mis mejillas, no podía creer toda esa historia.
-Agh... Te lo pondré más fácil, mira- Shigaraki sacó una fotografía de una familia, comenzó a señalar a la vez que miraba la foto-, ese es el abuelo, la abuela, mamá... Nuestro asqueroso padre, Mon, nuestra hermana mayor, tú y yo.
No podía ser verdad, era yo de verdad, tenía una fotografía mía con el mismo muñeco que la niña de la fotografía.
-¡Venga, no me jodas! ¡Esa no puede ser (T/n)!
-Soy yo... Bakugo, soy yo...- le dije asustada.
-Ven a mi, hermanita.
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Chico Explosivo. | Bakugo Katsuki.
FanfictionNanase (T/n) llega nueva a la ciudad de Tokio, ingresa a estudiar a la U.A, donde conocerá a muchas personas. Entre ellas, se encuentra Bakugo Katsuki, un chico un tanto "explosivo" con una forma de ser arrogante y molesta. El intento de (T/n) por...