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LEER CON PRECAUCIÓN: CONTENIDO SENSIBLE. 

30 de abril 1861

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30 de abril 1861.
Propiedad de Jonathan, Minnesota.

Jonathan abrazó a Adrian y Eli y acarició sus mejillas enrojecidas por el calor antes de marcharse. Les dejó el cuidado de la casa en sus manos (aunque en realidad Chester se haría cargo) y entregó su revolver a Eli para que lo guardara, él usaría otro revolver en la guerra y una mosqueta en su mayoría.

—¿Lo cuidarán por mi hasta que vuelva?

Eli asintió sujetando el arma que Jonathan había vaciado por seguridad.

—¿Por qué tienes que irte? —lloró Adrian—. No quiero que te vayas.

—Es necesario porque es mí deber, Adrian y algún día será el tuyo —. Le limpió las lágrimas y desordenó su cabello—. Deja de llorar, Adrian. Ya es momento de que crezcas y seas un hombre, debes estar para tu madre mientras yo no este y si lloras no podrás hacerlo. ¿Dejaras de llorar?

Adrian se limpió la nariz con la manga de su camisa y luego las mejillas y asintió. El puchero se quedó en sus labios, pero ya no derramó ninguna lágrima.

—Bien, así me gusta. Cuiden de la casa y de su madre, ella está muy cansada para hacer todo sola. Ahora ustedes estarán a cargo. Principalmente tú, Eli.

—Lo sé —. Eli se guardó el arma en la cintura de su pantalón y asintió a sus propios pensamientos—. Haré lo que sea necesario para proteger a la familia, padre.

—Me alegra escucharlo.

Se enderezó, acomodándose el bolso a la espalda y pasó su atención a Olivia para verla llorar en silencio a unos pasos de distancia. Retiró el pañuelo del bolsillo de su chaqueta y lo sostuvo frente a ella para que se limpiara.

—Volveré, Olivia...Tienes mi palabra.

—No cuenta si vuelves en un ataúd —. La atrajo hacia sus brazos y peinó su cabello—. O en pedazos.

—Nena, no me das muchas esperanzas ¿sabes?

—Perdón, es que estoy aterrada, Jonathan...Esto es exactamente lo que quería evitar, todo esto —. Le acarició la mejilla y apretó los ojos—. Debes volver por tus hijos y por mí, debes volver.

—Lo haré —. Descolgó la escopeta de su hombro y se la entregó—. Las cosas se pondrán feas por aquí, así que prométeme que mataras a cualquiera que entre en el perímetro sin anunciarse.

—Lo prometo.

La besó, por más tiempo de lo que la había besado en su vida y ella se aferró a él sin permitirse soltarlo. Que la arrastrara hasta la ciudad, no tenía problema, pero no quería dejar que se fuera. Odiaba a todo el mundo en esos momentos por ponerlos en esa situación. Odiaba al sur, odiaba a Lincoln, odiaba a su abuela por darle aquel ridículo collar...Y se odiaba a sí misma por sentirse tan impotente y no saber actuar.

Vidas cruzadas: El ciclo. #1 TERMINADA +18. BORRADORDonde viven las historias. Descúbrelo ahora