Vidas cruzadas: El ciclo. #1 TERMINADA +18. BORRADOR

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Olivia estaba sentada en el salón donde podía coser y tener todo cerca de ella sin necesidad de moverse demasiado, estaba la cuna con sus dos bebés, la estufa encendida para protegerlos del frío, Marie, Hardy y Emma jugando sobre la alfombra y Amelia y Laurissa ayudándola con la costura.

Miraba cada tanto hacia afuera para ver sí Jonathan ya había regresado de la mina. Kyle había ido a buscar a Sheridan para que ambos se reunieran y pudieran discutir los negocios con el nuevo descubrimiento, imaginaba que Sheridan reclamaría su quince por ciento de todo lo que ganaran y Jonathan aumentaría los sueldos y tal vez comenzaría a cobrar impuestos.

Sí su economía no despegaba hasta los cielos con esos negocios entonces Olivia no sabía que sucedería.

Pero estaba segura de que despegaría, recordaba algunas de las cosas que Elizabeth le había contado sobre Jonathan cuando la visitaba de niña y entre ellas, siempre le comentaba que era un hombre adinerado y muy trabajador.

Se inclinó hacia la camisa que Laurissa cosía a su lado y la ayudó a desarmar el nudo que se le había formado con el hilo y le explicó como evitar que eso le sucediera. Ambas niñas sabían coser, pero aún les quedaba mucho por aprender y considerando que a ella le había costado algunos años dominar la costura por completo, les tenía paciencia.

—He estado pensando que podemos hacer para celebrar esta noche el descubrimiento de papá —les comentó regresando a su costura—. Y como no vendrán los niños de la mina esta tarde y tenemos tiempo, pensé hacer un pequeño banquete ¿Qué dicen? Hace tiempo no cocinamos a lo grande.

—Me parece una muy buena idea, madre.

—A mí también.

De todos los niños, Oliver y Amelia eran los únicos que continuaban llamándola por su nombre. No le molestaba y tampoco los presionaba, ella los trataba con el mismo amor y dulzura que a todos sus hijos y esperaba al día en el que se sintieran cómodos para llamarla mamá y si ese día no llegaba, tampoco los culparía, entendía si ellos preferían reservar ese título para su madre biológica, aunque no la recordaran.

Dejó la costura a un lado y abandonó el sofá con cuidado para ir hacia sus libros.

—Tengo varios libros de cocina que podemos usar para inspirarnos —. Acarició los tomos y empezó a sostener en un brazo todos los que eran de cocina, había algunos de Jonathan y otros dedicados a la costura, la maternidad y otros tópicos—. Estos nos servirán.

Amelia dejó su costura al igual que ella y se acercó para tomar los libros de sus manos. Dividió la carga con Laurissa y los llevaron hacia la mesa de la cocina, luego se regresaron para ver si Olivia necesitaba algo de ayuda para caminar. La encontraron agachada para hablar con los más pequeños.

—¿Se portarán bien?

Hardy asintió, pero no por eso dejó de prestar atención a sus juegos, levantó un cubo de madera que Chester les había hecho hacía unas semanas y lo sostuvo frente a Marie.

—Mira, mira...brr, brr...

Marie tomó el cubo de las manos de Hardy y lo tiró por los aires a lo cual ambos empezaron a reír y Emma fue a recogerlo. Los dos hablaban entre balbuceos, soltando alguna que otra palabra con sentido y Emma les entendía y los corregía, ayudándolos también a mejorar su habla.

—Iré a buscar a Susan ¿sí?

Emma asintió y Marie comenzó a emocionarse cuando la vio ponerse de pie y miró hacia la puerta ansiosa. Los niños amaban a Susan. Pero poco después de que Olivia dejará la habitación, Hardy volvió a señalar un cubo y Marie desvió la atención otra vez a sus juegos.