Carter.
No más joder, no más. La culpa me está matando, me consume día con día. El correo que recibí anoche con una dirección anónima me tiene como me tiene.
La tocaron, la violaron, la golpearon, prácticamente la envenenaron y la hicieron pasar por un aborto. No pude, nunca pude protegerla. Ni de esto ni de nada, soy una mierda, una escoria que no vale nada.
–¡MIERDAAA!– grito.
No puedo hacer nada más. No puedo ni levantarme del piso de mi habitación, las botellas de alcohol estás esparcidas por el suelo, vacías. No sé ni siquiera que tomé, pero perdí la cuenta hace mucho tiempo.
Sus gritos suenan en mis oídos una y otra vez. Sus súplicas, su llanto, todo. La sangre derramada en el suelo luego de perder a su bebé, a su niño.
–NOOOOOOO– soy una mierda
Mi sobrino, un niño pequeño que no tenía la culpa de que yo no pudiera proteger a su madre. Ella no merece esto, no merece nada de esto.
Caigo en el suelo de medio lado cerrando los ojos. No me importa nada, no importo nada. Puedo morir ya que poco me importa.
Los ojos se me vuelven pesados, los gritos comienzan a sonar a lo lejos. Los sonidos de la calle se apagan, todo se apaga y pierdo la conciencia
No sé cuánto tiempo pasa pero me despierto con los golpes que dan a la puerta de mi apartamento. Parece ser de día y el dolor de cabeza me mata en cuanto la luz me pega en los ojos.
–CARTER– gritan fuera de la puerta
–Un momento
–ABRE HERMANO– vuelven a gritar
–QUE UN MOMENTO JODER
Me levanto del piso, en lo que intento caminar me tambaleo pero llego a la puerta. Abro y luego me volteo y me tiro en el sofá de la sala.
–Carter hermano, ¿Qué mierda pasó aquí?
–Nada interesante– respondo con indiferencia
–¿Tuviste fiesta y no invitaste?– río sin ganas.
–Claro Erick, fiesta solo fue lo que tuve
–¿Te tomaste todo esto solo?– inquiere preocupado
–Sí
–¿Qué mierda te pasó joder?
–Soy una mierda Carter, no valgo nada, no voy nada
–Eso no es verdad
–NO LA PUDE PROTEGER, ES TODO LO QUE YO TENGO JODER ¡TODO!
–¿De qué hablas?– inquiere preocupado
–Sam, mi hermana, mi familia, mi mejor amiga, mi todo joder y yo dejé que le hicieran todo lo que le hicieron esos hijos de la gran perra. Fui en parte causante de la muerte de mi pequeño sobrinito.
–¿Cómo sabes eso?– pregunta acercándose.
–Tengo los videos
–¿Qué videos?
–Los de las torturas de Sam. Esos de los que tanto me intentó proteger Christopher. Esos que me arrancaron pedazo a pedazo el alma.
–¿Cómo mierdas tienes eso?
–Me los envió una cuenta anónima. Supongo que alguno de los que trabajaban para Walker, siempre manejaban todo anónimo.
–¿Cómo sabes que no fue Walker?
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Pasión por hoy
Teen FictionSamantha Williams una chica de 21 años cree que su vida es perfecta y que nada podría arruinarla, pero no tiene ni idea de lo que está por llegar. Christopher Adams entra a su vida sin previo aviso, de la forma más inesperada y de un momento al otro...