2 meses después.Extrañamente hiciste como si el tema no fuese contigo. Henry estaba realmente feliz, puto anormal. Te molestaba constantemente para que se lo dijeras a tus padre. Pero ni de coña.
Tu pancita no había crecido, pero no volvió a venirte el periodo en todo ese tiempo. En fin...
Ahora estabas jugando con el club de los perdedores, estabas sobre tu bicicleta en una carera contra todos tus compañeros.
—¡Voy a patearte el trasero!—Grito Richie adelantándote.
—¡De eso nada!— Reíste y aceleraste tus pedaleos.
Antes de llegar a la meta os metisteis a un prado, era parte del camino. Pero una piedra se topó con la rueda delantera de tu bici, haciendo que esta se volcara.
Caiste de culo, te caiste de forma un poco fuerte pero no te había dolido. Habías dado como una voltereta en el aire y caiste sobre la hierba.
—¡oh mierda!—Dijo Richie.
—¡____! ¿¡Estas bien!?—Pregunto sobresaltado Bill.
—Si, al parecer soy trapecista—Bromeaste levantándome, palmeando tu falda quitando las hojas y teatros del suelo.
—Menos mal...—Te sonrió Ben levantando tu bici para entregártela.
Te olvidaste y seguiste divirtiéndote con tus nuevos amigos, bueno ahora que Henry no podía salir tenías que hacer algo por la tarde.
•••
Llegaste a casa algo tarde con algo de barro l los zapatos y las manos sucias de tierra. Te lo habías pasado bien. Necesitabas sentirte como una más entre los niños y olvidarte de las cosas de adulto que te atormentaban.
—Hola cariño ¿como te fue?—Pregunto sonriente tu madre limpiándose las manos, pues estaba cortando pescado.
—Muy bien, gracia mamá— Te dio un beso en la mejilla.
—Uuh, hueles a tierra mojada, ve a darte un baño— Dijo tomándote de la oreja y volver a la cocina.
Rodaste los ojos y fuiste al baño. Mientras te quitabas la ropa viste una pequeña mancha carmesí en tu ropa interior. Que extraño, peor no le tomaste importancia.
Saliste de baño con una toalla en tu cuerpo hacia tu habitación.
—Llegue, ¡____!, por llegas, he comprado tu té favorito, quieres que te prepare una taza— Tu padre apareció por la puerta cargando con bolsas de la compra.
—Claro papá, ahora vengo—Le sonreíste y subiste a tu cuarto y te vestiste.
•••
Ya era algo tarde, te estabas tomando tu tercer té del día, era delicioso. Te lo terminaste de un solo trago para meterte a la cama y dormir.
Pero a los pocos minutos de estar tumbada sentiste un fuerte dolor, similar a los cólicos. Te levantaste al baño y efectivamente estabas sangrando. Como un periodo normal. Te colocaste una compresa, una pastilla y volviste a dormir.
•••
Resulta que tuviste un aborto natural, el té que tomaste tenía ingredientes abortivos y el golpe que te diste antes no ayudaba.
¿Como lo sabias? Pues leíste un libro sobre el tema. De eso hace ya 4 meses. Tiempo en que evitaste ver a Henry demasiado. No sabias porque, aunque esa noticia te alegraba muchísimo. A él no le haría ninguna gracia, parecía muy ilusionado con la idea. Además ahora estaba peor pues lo "ignorabas" y estaba furioso, desconfiado y temeroso de que ya no quisieras estar con el.
Saliste de tus pensamientos al escuchar unos golpecitos en tu ventana.
—No puede ser...—Te levantaste de la cama y abriste la ventana— ¿Qué haces aquí?—
—¿Que haces saliendo con los perdedores?— Pues había tardado meses en enterarse.
—¿vas a empezar?— Frunciste el ceño cruzándote de brazos—¿Y tu padre? Va ha tu cuarto todo el tiempo—Te preocupaste.
—No me importa, ¿porque cojones te alejas de mi?—Pregunto intentando tocar tu vientre.
Llevabas un buzo holgado, llevabas mucho tiempo usándolos, para que el no se diese cuenta de que efectivamente no estabas en estado.
Te alejaste para que ni te rozase.
—¿que pasa? No me hagas esto ____, voy ha matar a todos esos perdedores— Apretó los puños.
—Tengo que decirte una cosa...—Confiesas.
—¿eh?, ¿es sobre mi bebé...?—Se te estrujo el corazón al escucharlo.
—Emmm... si, el caso es que... no hay bebé— Ahora si te hacer arte a él.
—¿como...?— Toco tu vientre comprobando que en efecto, estaba igual que hace 6 meses.—¿Por qué no?— Empezó a hiperventilar desesperado.
—Me caí de mi bicicleta y resulta que hay un montón de cosas que no se puede comer estando embarazada— Explicaste tranquila, abrazándolo para tranquilizarlo.
—Pero yo...—Lo besaste una y otra vez.
—No pasa nada, era lo mejor—
•••
Acompañaste ha Henry a su casa y lo dejaste ahí después de hablar un buen rato sobre el porqué de tu distanciamiento. El cual ahora ya no existiría.
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HENRY BOWERS X READER: La hermana de Patrick
RandomDespués de unos años vuelves ha Derry junto a tu Hermano mayor y madre. Dispuesta ha seguir con una vida tranquila sin esperar que nada cambien. Pero no contabas que el mismísimo Henry Bowers se interpondría entre tú y tu perfecta rutina. Siendo pos...