Henry había vuelto a vivir con su padre. Afortunadamente nadie pregunto donde se había estado alojando. ¿Cómo es posible que a nadie le importe?, es algo triste ¿no?.Su padre apenas lo dejaba salir de casa, solo para estudiar y ayudarlo en el huerto. Estabas bastante triste, solo lo veías en clases. Henry trataba de aprovechar el tiempo juntos pero era casi imposible. De echo continuo sacando buenas notas, claro tampoco tenía mucho más que hacer... su padre no había cambiado, seguía golpeándolo, no tanto como antes, pero aun así lo maltrataba sin motivos.
Suspirabas por tercera vez, observando el techo en la oscuridad. Te costaba dormir sin el, su calor, "caricias", olor y presencia. Lo echabas de menos, mucho...
Bueno y ni hablar del mismísimo Henry, se cargaba unas ojeras vagamente notorias por la falta de sueño. Se estaba muriendo de rabia y llenando de odio hacia sus padre. Y ya no le importaba como lo trataba, porque aunque Oscar no lo sabía. Lo había separado de ti y del resto también. Pero sobretodo de ti.
•••
—Vale, ___, no vas a poder dormir, acéptalo— Te susurraste a tu misma tirándote de los pelos.
Te levantaste decidida, agarraste unos zapatos y una chaqueta azul y te lo pusiste todo sobre el pijama. Ibas a ver a Henry.
Saliste por la ventana y te dirigiste hacia casa de tu enamorado.
Poco más de cinco minutos después estabas ahí, su ventana era un poco más alta que la tuya. Te diste cuenta que no era difícil subir hacia sus ventana. Ni bajar tampoco.
—meh—Te alzaste de hombros y trepaste de forma sigilosa. No hay que olvidar que esta es la casa de un policía.
Al estar arriba, pudiste ver la ventana cerrada por fuera, ¿por fuera?, si, tenía un pestillo en la parte de afuera, tú podías abrirlo. Pero era extraño que estuviera fuera y no dentro como corresponde.
Antes de nada miraste dentro de la habitaron, Henry sentado en sus escritorio jugando con el lápiz en su mano y con el ceño fruncido se veía adorable. Querías darle una sorpresa.
Quitaste el pestillo sin hacer apenas ruido y abriste la ventana lo suficiente como para poder entrar. Ya dentó, el aun no se enteraba, estaba casi de espaldas a ti.
Te acercaste lentamente y pusiste ambas manos en sus hombros, las cuales deslizaste hacia sus pecho apoyando tu cabeza sobre la suya.
—¡¿Eh?!—Sentiste como se estremeció, pero también reconoció tu toque—¿____?—Pregunto como si de un sueño se tratase girándote al momento—¡____! ¿Qué haces aquí? ¿Cómo has entrado?—Se levanto de inmediato tomándote de los brazos como si fueras a escaparte.
—Por la ventana y te echo mucho de menos— confesaste tímida.
—Pe-pero es imposible, esa ventana no se puede abrir— junto su frente con la tuya abrazándote.
—Se abre por fuera, tiene un pestillo—Explicaste acercándote a sus labios.
No llegabas ni de puntillas, este solo río y se encorvó para uniros en un anhelado beso.
—Quiero vivir contigo— Espero separarse de ti.
Sonreíste enternecida.
—Henry, eso no es posible— Acariciaste su cabello.
—No soportó este lugar— Miró con despareció alrededor—Quiero está contigo, si te embarazo, no te quedará de otra que casarnos— Te levanto de las piernas para ponerte sobre su cama.
—¿¡Que?! claro que no, no vas a hacer eso— A veces olvidabas como solía decir estupideces frecuentemente.
—No lo entiendo, deberías estar embarazada— Dijo tocando tu vientre.
¿Cómo? Entonces el idiota intento embarazarte en algún momento. ¿No ve que eres muy joven o que le pasa?.
—N-no, claro q-que no, soy muy joven para eso—Dijiste insegura, sin saber en realidad si era verdad o no.
—¿Quieres comprobarlo?— Pregunto.
—¿que? ¿Cómo se supone que se comprueba eso?— preguntaste confundida.
—Ahora que mi ventana está abierta, puedo ir a la farmacia y robar un test de eso raros, es fácil entra por la puerta de atrás, ni tiene seguridad ni nada, ya entre muchas veces con mis amigos—dijo sin más— Aunque también creo que eres un poco joven, solo tienes 13...—Interrumpiste.
—14—Lo corregiste.
—¿14? ¿Desde cuando?-
—Hoy es mi cumpleaños-
—No me dijiste nada— Mierda se enfado.
—No me gustan los cumpleaños-
...
—En fin, ahora lo sé, venga vamos a salir— Te respondió poniéndose unos zapatos.
—¿enserio?-
—si-
•••
—¿Qué dice?— Preguntó impaciente a tu lado, estabais en su casa nuevamente. Esperando los resultados del test. Solo tuviste que hacer pipí en un palo y esperar, esperaba otras cosa.
—Ay, no se, todavía nada— viviste tu vista al palito pero ahora si con los resultados. Palideciste—Do-dos pa-pa-palitos—Tartamudeaste sabiendo bien lo que significa, Henry te miro sin entender.
Este solo fue a por la caja del producto y leyó las indicaciones.
—Estas... ¡embaraza!— Sonrió mientras te abrazaba.
—pero, si yo solo venia a dormir contigo— murmuraste incrédula. No y no, no quieres estar "embarazada" ¿que desgracia es esta?.
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HENRY BOWERS X READER: La hermana de Patrick
DiversosDespués de unos años vuelves ha Derry junto a tu Hermano mayor y madre. Dispuesta ha seguir con una vida tranquila sin esperar que nada cambien. Pero no contabas que el mismísimo Henry Bowers se interpondría entre tú y tu perfecta rutina. Siendo pos...