Henry abrió los ojos, el sonido de tu despertador lo irritaba. Lo apago rápidamente y te miro. Estabas encima de él, abrazándolo.
—Bueno días— Le susurraste sonriendo. Él te miro embobado, sus mano viajaron bajo las sábanas hasta llegar a tu trasero. De verdad que era un pervertido. A veces, solo verte cerca de él le causaba excitación. Si quiere tocarte lo hará donde quiera y cuando quiera, sin vergüenza alguna. Se repite en su mente constantemente que eres suya, que ya lo eres. No sois nada en realidad, ninguno nunca hablo de ser algo. Para ti, era lo que se supone que fuese, como tenía que ser.
Aunque te quisieses hacer de digna, no te molesto cuando te tocaba. Sientes escalofríos y cosquilleos, se siente bien. Su toque es delicado en este momento, pero suele ser más brusco y desesperado. No querías pensar que eras una perra que se deja tocar por cualquiera. Porque no era así, hasta la fecha solo te había tocado Henry de esa manera y no planeabas que lo hiciera otro.
Disfrutaste de sus palmas sobre tu cuerpo por míseros minutos. Te levantarte y fuiste al baño para asearte. Henry vio como te ibas, él ya estaba vestido.
•••
Henry calló al suelo de pie, se dirigió a su casa y entró por la ventana de su cuarto sigilosamente. Tomo su olvidada mochila y salió por donde había entrado, para dirigirse a clases.
Unos metro frente a él te vio junto ha Patrick, tu hermano, frunció un poco el cejo. Le daba rabia que él pudiera ir a tu lado y sobretodo que le agarraras del brazo. Pensó que eso no lo perturbaba tanto, pues... Eran hermanos. Pensó. Hasta que recordó que ese mismo chico que iba junto a ti, era un maldito enfermo mental, psicópata y un imbécil sobre todas las cosas malas y peores que era. Porque había tenido la mala suerte de conocerlo en su estado más natural. Patrick torturaba animales y guardaba sus cadáveres en quien sabe donde y en qué. Y no olvidemos mencionar que se masturbaba viendo animales maltratados. Con todo eso en mente, Henry empezó ha mirarlo con extrema atención, buscando algún comportamiento inapropiado.
Desgraciadamente os perdió de vista, pero estaría pendiente.•••
Henry apretaba los puños furioso. Estaba viendo como uno de los chicos "populares" te "coqueteaba" por así decirlo. Sentía dolor en su pecho, como si oprimieran su corazón.
Eras la única persona que tenía el privilegio de verlo vulnerable. No paraba de pensar en lo fácil que sería decirle a todo Derry que eras suya. Oh, claro, la cuestión es que no lo eras. Y Henry no sabía cómo hacer que lo fueras. Ni cómo hacértelo saber a ti, ni a los demás. No quería que se rieran de él, eso claramente no pasaría.
—Henry— interrumpiste sus pensamientos.
— Uh, ¿que pasa?—te miro de reojo interesado.
Te acercaste a él y te apoyaste, al igual que el, en las taquillas. Tomaste uno de sus brazos y lo apegaste a tu cuerpo abrazándote del mismo.
—¿Qu-que mi-mierda haces?—Henry te miro nervioso con un leve sonrojo en su confundida cara.
No le contestaste, solo le sonreíste y apretaste mas tu cuerpo contra el suyo. Hiciste que se confundiera y avergonzase más. Henry no logró procesar lo que pasaba hasta que miro de frente. Los mismos que minutos atrás te habían tocado el culo y tirado piropos. Miraban mal ha Henry. Cuando se dieron cuenta de que él los había visto, bajaron la cabeza y se retiraron.
Henry volvió su vista a ti y te vio suspirar pesadamente. Lo soltaste, a lo que él se quejó con un gruñido.
—L-lo siento mucho, es que me estaban agobiando y pensé que si me acercaba a ti me dejarían en paz— Explicaste.
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HENRY BOWERS X READER: La hermana de Patrick
RandomDespués de unos años vuelves ha Derry junto a tu Hermano mayor y madre. Dispuesta ha seguir con una vida tranquila sin esperar que nada cambien. Pero no contabas que el mismísimo Henry Bowers se interpondría entre tú y tu perfecta rutina. Siendo pos...