Latidos

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Capitulo 5


"sábado 12:00 p.m."

Suspiró.

No imaginaba que el proceso sucedería en tan solo 2 días, era cierto que quería deshacerse del error lo mas pronto posible, solo que, como había pensado, no se lo imaginaba TAN pronto. En fin, eran las ultimas 48 horas que pasaría con ese ser en su vientre... y no sabía que pensar.

No tenia idea de cómo se sentía en esos momentos... ¿Feliz?, ¿Nerviosa?... ¿Asustada? Sin dudas, eso era un hecho, pero ¿Cómo no estarlo? Nunca se imaginó que tendría que pasar por ello alguna vez, y menos en esas circunstancias...

Abortar por una violación...

De solo recordarlo la ira la consumía, muchas veces estuvo tentada a solo llamar a la policía y que ellos se encargaran de encerrar por el resto de su vida al malnacido que le hizo eso...

Pero no lo hacía, pues no solo la familia de él saldría afectada, sino que también la propia y la noticia seria hablada por no solo a quienes conocían, sino que también andarían en boca de todo el mundo... y seria algo que no los dejarían olvidar.

En fin, había consecuencias que no quería recordar, contando las que ya había pensado con anterioridad, así que lo mejor, era evitarse todo eso, acabar con el problema... y hacer como si nada de aquello hubiese ocurrido alguna vez.

Si, era lo mejor...

Todo acabaría pronto...

Era lo mejor...

¿Por qué sonaba como si tratara de convencerse a sí misma?

...

De nuevo un día nublado, el cielo gris, el aire frio, con una ligera brizna mojando su rostro, ¿acaso era una especie de conspiración en su contra? No lo sabía, pero ese clima últimamente lo único que hacia era llenarla de un sentimiento extraño, como una pequeña opresión en el pecho, y un malestar en el estómago... ¿Qué era?

Lo mejor era no pensar en ello.

Cerro la ventana y volvió hacia su cama, recostándose de nuevo y volviendo a la calidez de sus mantas, cerro los ojos, su cabeza dolía y su garganta molestaba. Había resfriado.

Con suerte se encontraría mejor para el sábado, solo tenía que guardar reposo y consumir algunas vitaminas, no podía arriesgarse a tomar algún medicamento, había leído suficientes cosas a cerca la medicación durante un embarazo y ninguna había sido de su agrado, así que prefería dejarlo así, y, para ser sincera, ella nunca duraba mucho tiempo enferma, agradecía el tener unos leucocitos* muy fuertes.

Obviamente no asistiría a la escuela, sus padres ya habían notificado sobre su estado y que muy seguramente volvería a clase hasta el lunes, nada mal, inconscientemente, era algo que necesitaba, había estado bajo mucho estrés últimamente y, realmente necesitaba relajarse, no pensar en nada; no preocuparse por la tarea que debía entregar al día siguiente, no escuchar a sus molestos compañeros hablar de ella a sus espaldas, no preocuparse por lo que ocurriría el sábado...

No pensar en la cosa.

En realidad, eso parecía ser difícil, pues por mas que lo quisiera, no dejaba de preguntarse: ¿Realmente no sentiría nada?, ¿sufriría?... en esos momentos ¿podría oírla? Según la información que había leído, solo captaba los sonidos a partir de la decimosexta semana, y ella tenia casi nada de haber cumplido las 14 semanas... no es como que ya pudiese escucharla, solo percibía el sonido, como un tipo de estímulo, pero... aun así, no podía evitar querer hablarle... aun si no la entendiera

Kill MeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora