Durante el trayecto a casa, Xieyun percibió más fuerte el aroma de su madre, el olor a menta siempre había sido delicioso a su olfato pero lo que empezaba a incomodarle era ese tenue olor dulce que lo acompañaba. Sorbió su nariz y miró a la ventanilla.
-Sucede algo cariño?
Xieyun miró a Zhan.- Qué sucede contigo mamá?
-Conmigo?... No te entiendo...
Xieyun rodó los ojos.- Hueles diferente... siento que ya no eres tu...
Zhan sonrió.- No es nada malo mi niño... pronto te daré una gran sorpresa...
Xieyun frunció los labios.- No me gustan las sorpresas... mejor regrésalo...
El omega se sorprendió al notar que el aroma del cachorro se hacía más espeso, sin duda, el niño estaba demostrando su casta. Desde su nacimiento tenía el presentimiento de que sería un alfa igual que su padre, era fuerte... voluntarioso... y a veces celoso.
Zhan lo rodeó pasando su brazo encima de sus hombros.- No tienes por qué ponerte así amor... lo que vendrá en algunos meses será muy lindo para nuestra familia...
En ese momento el niño se molestó y se retorció hasta separarse.- No lo quiero... regrésalo...
Las últimas palabras del cachorro dejaron boquiabierto a Zhan, jamás imaginó que reaccionaría así ante la inminente llegada de un hermanito. Suspiró tratando de controlarse un poco pues las lágrimas amenazaron con correr por sus mejillas. Al llegar al estacionamiento, vieron la casa rodante que Yibo había alquilado y el pequeño sonrió un poco... casi sin ganas.
Jackson entregó las bolsas que habían metido a la cajuela para después llevar el auto al estacionamiento subterráneo para regresar al otro auto donde sus compañeros lo esperaban para iniciar su vigilancia nocturna. El omega y el cachorro subieron por el elevador... al salir el niño se adelantó hasta llegar a la puerta del departamento. Zhan tecleó la clave para entrar encontrando a su alfa preparando un plato de frutas con picante.
Al saludarse, Yibo sonrió con mucha alegría y abrazó a Zhan acariciando su vientre. Xieyun los observó un rato y dudó un poco al ver la bolsa con el regalo que había hecho para su papá. Sin decir nada, fue hasta su recámara para encerrarse. Se quitó los zapatitos y dejó la bolsa cerca de su escritorio para recostarse. Al poco rato, unos suaves golpes hicieron que se sentara sobre la cama. Yibo asomó la cabeza y le sonrió.
Se acercó con mucha cautela y se sentó junto a él en la cama.- Qué tiene mi cachorro hermoso?.- preguntó abrazándolo.- pensé que vendrías corriendo a decirme algo sobre la casa rodante... no la viste al llegar?
El niño lo miró con los ojos llenos de lágrimas.- Si la vi... está genial...
Yibo.- Entonces que sucede?... Te pasó algo en la escuela?
El cachorro negó con la cabeza mientras unas delgadas lágrimas rodaban por sus mejillas, con cierta timidez alcanzo la bolsita del regalo y lo acercó a sus manos.- Te hice esto... no sé si te guste...
Yibo tomó la bolsa y sintió una hermosa calidez en el pecho al ver la cajita de madera, sin poder evitarlo una gran sonrisa apareció en sus labios.- De verdad lo hiciste tú?
Xieyun sorbió de nuevo la nariz.- Si mi abuela me ayudó...
Yibo destapó con mucho cuidado la cajita para encontrarse con las estrellitas de papel, de pronto vio el verdadero regalo debajo de ellas. Una foto de su paseo en el parque de diversiones cerca de los jardines donde habían disfrutado el espectáculo de fuegos artificiales. Se acercó al pequeño para calmarlo.- Está hermoso mi amor... lo pondré en el escritorio de mi oficina...
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REGRESA A MI
FanfictionEl día que debía ser el más feliz de toda su vida, Wang Yibo es arrestado en medio del evento impidiendo la unión con su adorado omega Xiao Zhan. Zhan queda completamente impactado al escuchar a los oficiales cuando indican los cargos por los que e...