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13 de Julio.

Hoy es mi cumpleaños, han pasado alrededor de dos meses desde aquella pelea en la habitación, y todo ha ido súper bien, Fred, George y yo mejoramos nuestra comunicación, despidieron a Rebeca, me pidieron disculpas, y conocieron a Leo.
Amaron a Ali, y comenzaron a llevarse mejor con Leo, incluso le ofrecieron nuestra casa para irse a vivir con su bebé, pero se negó.

Los gemelos se turnan para venir a comer conmigo en la parte del día, terminando las 10pm vienen a buscarme y me voy con ellos, dejando a cargo a Leo y a Zabini, quien llego a buscar trabajo de doble tiempo por qué Pansy esta embarazada otra vez.

Estaba dándole biberón a Ali, y sonreí, quisiera algún día poder tener un hijo de los gemelos y mío, seria algo lindo.

- ¿Amor?-dijo una voz detrás de mi, voltee y miré a George, quien estaba parado en la puerta mientras sonreía.- No te encontraba.

- Estaba alimentando a Ali.-sonreí dejándola en la cuna.- Vamos a comer, ya está tu comida en la otra oficina.-lo miré y le besé para después salir y entrar a la otra oficina.-

Nos sentamos, comi un poco mientras George devoraba la comida, terminando nos pusimos a platicar, miró su reloj y sonrió mirándome.

- Voy al baño antes de irme.-dijo levantándose.-

Asentí.
Entro al baño, segundos después escuché un

- Oye, ___, creo que deberías venir.-dijo George detrás de la puerta del baño.- Hay algo raro acá.

Fruncí el ceño y me levante de la silla tomando mi varita, abrí la puerta del baño, George me jalo y cerro la puerta.

- ¿Qué cosa? -dije confundida.-

George me miró y comenzó a reír mientras me cargaba en el lavabo.

- Mi niña, a veces eres muy ingenua.-dijo dándome un beso en los labios.-

Lo miré confundida y luego entendí.

- Mierda.-reí.-
- Quiero darte tu regalo aparte.-susurro en mi oído mientras comenzaba a besar mi cuello.-

Con mi varita puse Muffliato al baño y algo desesperados comenzamos a besarnos.
George alzó el vestido que traía y metió sus dedos dentro de mi feminidad ya mojada, gemí entre sus labios y cerré los ojos, estuvimos así un largo rato hasta que George se separó un poco de mi, desesperado bajo su cierre dejando salir su erección, metió sus dedos en mi boca para llenarlos de saliva y pasarlos por su miembro, me volvió a besar mientras se recargaba en el lavabo.
Gemí al tenerlo dentro de mí, sus movimientos son lentos pero fuertes, podía sentir que llegaba hasta mi pelvis, gemía en su cuello mientras me sostenía el con sus brazos y manos.
Hasta que ambos nos vinimos.
Me baje con cuidado del lavamanos mientras reía en bajito.

- Deja que fred se entere.-sonreí mirándolo mientras tomaba toallas húmedas y me limpiaba.-

- correré el riesgo.-me guiño el ojo.-

Salimos del baño, y lo lleve hasta la puerta del bar, se despidió con un beso y se fue mientras se acomodaba la corbata.

- Pícara.-rio Zabini.-
- Tú Cállate.-reí golpeando su brazos.-

25 minutos después apareció fred por la puerta, lo saludé, con un beso y fuimos a la bodega a comer.
Conversamos un rato sobre Sortilegios, y lo del bar, hasta que terminamos, me levante primero para caminar a la puerta pero fred me cargo.

- ¿Qué haces?-reí mientras entrábamos al baño.-

- Te estoy dando tu regalo.-susurro en mi oído.-

Piensan igual estos dos.
Cerró la puerta del baño y le puso Muffliato.
Se acercó rápido a mi y comenzó a besarme con pasión mientras me recargaba en el lavabo.
Segundos después me volteo y me subió el vestido, bajo mis bragas y metió su miembro dentro de mi.
Comenzó a moverse con rapidez mientras tomaba mi cabello y lo jalaba hacia atrás, gimoteé y gruñí.
Nuestros jadeos y gemidos se escuchaban por todo el baño.

- Maldita sea, ___.-susurro entre dientes fred para después sentir como me llenaba de su esencia, al igual que yo me venía.-

Nos recuperamos los dos y nos limpiamos, salimos y lo despedí en la puerta del bar.

- Wow.-dijo leo.- pícara.
- ¡Leo! -gruñi tirándole un peluche de Ali.-

Leo y Zabini rieron, negué con la cabeza y bufé.
En la noche nos encontrábamos en la casa de Molly, me hizo una comida especial y un pastel.
celebramos mi cumpleaños en familia.
Suspire y mire la hora, eran las 9:55pm.

Me aleje de ellos y salí de la madriguera, respirando el aire fresco, me senté apartada de la casa y miré el cielo, mientras mis ojos se humedecían, antes de las 10, Chris y yo siempre salíamos, a darnos las felicidades solos, como hermanos.

- Feliz cumpleaños, Chris.-miré las estrellas mientras comenzaba a sollozar.- Cumplí mi promesa.... el bar de nuestros sueños, va bien.... pero.... me es difícil avanzar sin ti, desde que te fuiste..... no he podido conjurar un patronus.-mis lágrimas comenzaban a escurrir en mis mejillas y suspire.- dudo que pueda volverlo a hacer... me es difícil poder seguir adelante, no quiero dejarte ir, no quiero.-comencé a llorar.- me resignó, quiero que estés conmigo.-apreté mis labios.- daría lo que fuera por volver a abrazarte, una vez más......

Comencé a llorar silenciosamente mientras miraba el cielo repleto de estrellas.
De pronto una mariposa azul con entornos dorados paseo frente mío, colocándose en mi dedo índice, estrujando mi corazón.

- Chris....-susurré mientras miraba aquella mariposa.-

Una brisa agradable inmundo mi cuerpo, dándome tranquilidad, amor.....
Chris estaba aquí...
Sonreí entre lágrimas.

- Se qué tengo que dejarte ir.... Sólo me es difícil.-sonreí triste.-  No creo que pueda hacerlo algún día....

La mariposa se movió un poco aún sin volar.

- Te amo con toda mi alma, Chris.-sonreí.- Siempre estarás conmigo.... te agradezco eso.-susurre.- Gracias.....

La mariposa voló a mi nariz y de ahí después de segundos emprendió vuelo, alejándose de mí.

Miré como se alejaba mientras sentía como los gemelos se sentaban al lado de mí, abrazándome.

 Los gemelos Warren.- Fred Weasley, George Weasley y tú Donde viven las historias. Descúbrelo ahora