Capítulo 19

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Llevo tres semanas sin hablar, aún me molesta pero que puedo decir, como que uno se va adaptando.

Oh vamos Lore, verás que te la pasas bien.

Escribo y mi mejor amiga solo niega y mete una gran cucharada de helado de chocolate en su boca. Hay que ver la capacidad infinita que tiene ese chica para el helado en su estómago, desde que ocurrió lo del embarazo de Jessica ella no ha parado de comer helado, a todas horas.

— no, creo que más tarde iré a la peluquería a retocar mis mechas azules, o bueno lo que queda de ellas, con todo esto he descuidado mi cabellito— le limpio los restos de lágrimas y hago un puchero antes de empezar a escribir.

Por favor Lore, al menos hazlo por mi.

Sabe a lo que me refiero. En este tiempo no he podido ir a la escuela y he estado ignorando a Leah, le dije que necesitaba estar sola y al parecer lo comprendió pero cuando le dije que quería terminar con ella porque antes tomé una decisión equivocada pues no lo entendió.

— eso se llama chantaje sabes— sonrío de medio lado. Se que va a aceptar. — pero sabes que no me gustan los lagos—

Con Lorena quiero ir a al lago que fui el primer día que Joshua me cuidó. Por cierto ese es irritante, me sigue todo el día pero ya aprendí a ignorarlo, es como si fuera famosa y tuviera un molesto pero necesario guardaespaldas, al menos así me lo mentalizo yo.

Verás que este si te gusta.

JOSHUA

El puto Ryder no acaba de llegar, yo tengo que ir a cuidar a la rubia que ahora se le ocurrió que era buena idea ir a un lago con su amiguita la dolida.

— pequeño Evans— me volteo y ahí están los calaveras.

— Ryder ¿por que la tardanza?— pregunto en un tono un poco brusco.

— chaval las cosas no están buenas, las fronteras están difíciles de cruzar, nos tienen más vigilados que nunca— ruedo los ojos, siempre es la misma excusa — ya se lo de tu chica— lo interrumpo.

— no es mi chica— sonríe de medio lado.

— ya claro. Bueno ya se lo de la que no es tu chica— bufo, este si sabe como tocarme las pelotas — ¿sabes quien es Erik Petrov?— como si hubiera alguna persona en el mundo sin conocerlo. Ese hijo de puta revolucionó el mundo de las armas, con sus hierbas y sus cosas de bruja loca.

— claro—

— el creó el invento con que le borraron los recuerdos a la chica. Absolutamente todas las personas que han pasado por él se les han ido sus recuerdos menos a...— me imagino a quien — Heather Galasso— otra hija de puta, no podía estar con el culo quieto, su sed de venganza era como una enfermedad.

— si—

— solo ella pasó por él y no le ocurrió nada. No pudimos contactar con nadie ni remotamente cerca de ella, sabes que es imposible— asiento.

— joder que tengo que irme. Llevamos 10 minutos hablando y no me has aportado nada hijo de puta ¡HABLA! Como hago a Antonella hablar de nuevo—

— cálmate ahora llegamos ahí. No habla porque es una mala reacción al invento, al parecer no lo colocaron en la zona que debían y eso alteró algo en su sistema— no me gusta nada su respuesta. Lo agarro de la camisa y lo alzo un poco.

— ¡¿NO VOLVERÁ A HABLAR?!— se suelta.

— ¡NO DIJE ESO! ¡TE QUIERES CALMAR! Joder menudo loco— se arregla un poco la camisa — podrá volver a hablar cuando vea un rostro conocido de ese día, de minutos antes que la durmieran por completo — frunzo el ceño, no entiendo. El suspira y procede a explicarme — joder pequeño Evans aveces eres tan tonto. Quiere decir que si por ejemplo tú hubieras estado allí aquel día, el momento después que pasó todo y procedieron a dormirla para dejarla tirada en la calle y ella te hubiera echado aunque sea una pequeña ojeada podrá volver a hablar— vaya mierda.

Vuélveme a querer Donde viven las historias. Descúbrelo ahora