-¿Meli te gustó el viaje en autobús?-preguntó Amelia.
-Mucho, pero fue muyyyy laaaargo.
Amelia caminaba con la niña en brazos y la hermana Nieves a un lado para reunirse con los demás.
-Vamos, ¿quieres que te presente a los chicos?
-Vale, pero no me sueltes Amelia- suplicó la pequeña.
-¡No lo haré cariño!- dijo con voz suave dejando un besito en la mejilla de Melissa y haciendo a un lado uno de sus rizos castaños.
Benigna, Natalia e Ignacio se acercaron a saludar a la hermana Nieves y a la niña.
Mientras la hermana Nieves platicaba con Benigna y los otros dos médicos acerca del viaje Amelia se alejó con la niña en brazos para presentarle a los universitarios y lograr que se sintiera segura entre ellos.
Un poco tímida la niña iba dando la manita a cada joven que Amelia le iba presentando.
-¿Qué tal te han parecido los chicos Meli?
-Todos son muy guay Amelia.
-Estoy segura que te vas a divertir muchísimo con ellos preciosa.
-¡Amelia, mira!- señaló con la mano-. Falta ella, la chica del cabello color oro.
-¿Quieres conocerla Meli?
-Sí, sí, sí me gusta su cabello.
-Estoy de acuerdo contigo Meli, su cabello es muy lindo- exclamó con una sonrisa.
-¿Es tu amiga Amelia?
-Mmmmm... sí, somos amigas.
-Entonces le puedes decir que me diga su secreto.
-¿Cuál secreto Meli?- dijo intrigada.
-Su secreto para tener el cabello color oro.
Amelia sonreía ante las ocurrencias de la pequeña.
-¿Qué te parece si le preguntas tú?
-No, no, no, porque ella no es mi amiga y no va a querer decirme su secreto.
-¿Y a mí, crees que me lo dirá?
-Claro Amelia, porque las amigas se cuentan los secretos y ustedes ya son amigas.
-Tienes razón Meli, pero qué te parece si mejor te presento a Luisita y así se hacen amigas.
-¿Y si no quiere ser mi amiga?
-Claro que sí cariño, Luisita es una chica muy maja, se van a llevar genial.
Luisita se encontraba con una lista de los nombres de los niños entre las manos, revisaba que todos llevarán ya su pulsera de identificación del campamento.
-¡Hola Luisita!
-¡Amelia, qué sorpresa!
-Luisi te he traído a alguien, parece que quiere conocerte- dirigió la mirada a la pequeña que se escondía entre sus rizos.
-¿A sí?, déjame adivinar- buscó el nombre de la niña en la lista, era la única que faltaba por tener su pulsera-. ¡Hola Melissa!- dijo la rubia con una enorme sonrisa.
-¡Amelia, sabe cómo me llamo!- la chiquita salió de su escondite sorprendida porque Luisita sabía su nombre.
-Lo vez Meli, Luisita no sólo tiene el cabello hermoso sino que también tiene superpoderes.
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Contigo siempre
FanfictionLuisita y Amelia se conocen de la manera menos esperada, lo demás sólo será un juego del destino.