Capítulo 22

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-¡Carajo Luisi!, tu corazón hace pum, pum, pum, pum, pum- exclamó la niña.

Luisita se puso colorada, miró a Amelia y no pudo evitar morderse el labio inferior.

-¡Melissa!-la reprendió Amelia.

-Ups... lo siento... se me volvió a escapar un ¡carajo!-se cubrió la boca con la mano-. Pero es que es cierto Amelia, el corazón de Luisi late tan rápido como Flash- sonrió traviesa.

Las dos chicas soltaron una sonora carcajada por  la gracia que les causaba las palabras de Melissa.

-Vale, será mejor que me vaya, ya es tarde y aún tengo que ir a casa a recoger mi maleta- Luisita se puso en pie dejando un beso en la frente de la niña.

-¡¿Maleta?!- Melissa y Amelia preguntaron al mismo tiempo sorprendidas por la noticia.

-Sí, estaré todas las vacaciones en casa de mis padres.

-Pensé que pasarías las vacaciones con tus amigos, después de lo que platicamos en el campamento imaginé que...- dejó la frase inconclusa.

-Bueno... Marina está disfrutando en este momento de la playa y yo... pues... no tenía nada planeado... sólo estudiar. Estaba completamente segura que me echarían del campamento el primer día- le dedicó una sonrisa a Amelia-. Pero al final eso no pasó y ahora tengo bastante tiempo libre, así que decidí visitar a mis padres, hace mucho tiempo que no los veo.

-Ya, me parece un buen plan, debes extrañarlos.

-Sí, muchísimo.

-¿Luisi en cuántos días te volveremos a ver?-intervino Melissa.

-No lo sé con certeza peque. Creo que me iré bastantes días.

-¿Así?- mostró los cinco deditos de su mano.

-No lo creo peque.

-¿Y así?- esta vez mostró los deditos de ambas manos.

Luisita sonrió tiernamente y dejó una delicada caricia en la mejilla rosada de la niña.

-Estará con sus padres muchos más días Mel- explicó Amelia resignada.

-¡Es mucho tiempo Luisi!- se quejó la niña.

-Lo es peque, pero en cuanto regrese vendré a verte- cargó a la niña para abrazarla-. Los días se pasarán volando.

-Amelia y yo te vamos a extrañar- Melissa escondió el rostro en el pecho de la rubia.

-¿Eso es cierto Amelia, vas a extrañarme?- Luisita se mordió el labio.

-¡Pues claro que va extrañarte Luisi, si Amelia no hace otra cosa que pensar en ti!- comentó la niña aún recostada en el pecho de la rubia-. En la mañana le dijo a la hermana Nieves que no podía dejar de pensar en ti.

-Pero yo que voy a hacer contigo Meli ¿recuerdas que te pedí ser discreta?- se sonrojó al sentirse descubierta.

-Ups... se me olvidó lo de la discreción Amelia- cubrió su rostro con sus dos manitas.

Contigo siempreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora