Capítulo 20

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Las chicas no se movieron hasta perder de vista el autobús.

-Luisita, ¿a dónde vas?-preguntó al observar que se alejaba.

-Amelia mira, mi peque olvidó su mochila-le mostró el objeto abandonado en el césped.

-Me parece que en cuanto regresemos  a la ciudad tendrás que ir a verla, Melissa lleva a todos lados esa mochila. Es muy valiosa para ella, dentro guarda todos sus tesoros.

-Toma Amelia-le acercó la mochila-.¿Puedes entregársela tú?

-No, no, no, tú la encontraste, tú debes llevársela.

-Amelia, pero yo no pued...

-¡Chicos reúnanse!-Benigna llamó a los universitarios.

-Apresúrate Luisi, Benigna tiene algo importante que comunicarles-Amelia agradeció en su interior la interrupción de Benigna.

Los chicos formaron un círculo alrededor de Benigna, Amelia, Natalia e Ignacio.

-Jóvenes, no me queda más que felicitarlos, el campamento fue un éxito gracias a su trabajo y al compromiso que mostraron-les dedicó una mirada de satisfacción-.Sin embargo, todo llega a su fin y ustedes están acá con un propósito.

-Así es chicos-Amelia intervino-.Ustedes vinieron aquí con la finalidad de obtener créditos extra para aprobar la asignatura de su profesora-miró a Benigna-.Y para poder presentar el examen final. Como recordarán los monitores somos los responsables de determinar si son merecedores o no de esos créditos extra... y pues bien, ya está decidido-los chicos se miraron emocionados-.Desde ya pueden pasar a revisar las listas que están pegadas en el comedor. Cualquier duda que tengan acérquense con alguno de nosotros.

-¡Vamos, qué esperan, a revisar las listas!- exclamó un Ignacio entusiasta.

-¡Alto, alto!-gritó Natalia-.Recuerden que por la tarde sale nuestro autobús así que después de revisar las listas les sugiero que terminen de empacar.

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-¡Lo logramos Luisi, tenemos los créditos extra y  también podremos presentar el examen!-decía Marina mientras improvisaba una almohada con su chamarra para dormir en el autobús el tiempo que faltaba para llegar a la ciudad.

-Sí, lo logramos- sonrió -.Oye, que te debo una disculpa por mi comportamiento de esta mañana. Casi arruino todo.

-Que va, ya sé que eres una cabezota-soltó una carcajada-.Menos mal que apareció Amelia.

-¡Tonta!-le lanzó a la cara el suéter que llevaba en las manos.

-¡Luisita!-se cubrió el rostro para evitar el golpe de la prenda.

-Y qué, tú feliz por que mañana ya estarás en la playa disfrutando de tus vacaciones.

-Pues sí, ya que al fin nos quitamos de encima el problema de aprobar la asignatura de Benigna ahora sólo queda disfrutar de estos días.

-No sabes la envidia que te tengo, estarás en la playa cinco semanas.

-Luisi, no me salgas con esto ahora, cuando te invité te negaste a hacer el viaje- recriminó a su amiga con la mirada.

-Ya, lo sé, pero cuando hiciste los planes para viajar yo aún no estaba muy segura de lo que pasaría en el campamento, juraba que el primer día me echarían.

-Yo también pensé que el primer día te echarían- sonrío burlonamente.

-¡Oyee!- sonrió.

-¿Entonces, qué harás estos días sin mi?

Contigo siempreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora