Contigo siempre

Capítulo 19

-¡Luisi despierta!- Marina intentaba quitar la manta del rostro de su amiga.

-Mmmm... Marina... déjame dormir...

-Pero Luisita tenemos que despedir a los niños.

-No voy a ir- jaló la manta y se cubrió aún más con ella.

-Mujer ¡Estás loca!, si Benigna o Natalia no te ven ahí esto se acabó y nada habrá valido la pena.

-No me importa... déjame dormir.

-¡Luisita vamos, levántate!- esta vez logró quitar por completo la manta que cubría a su amiga.

-¡Que no, que no Marina!- cogió la almohada para cubrirse el rostro.

-Entonces todos estos días...

-Todos estos días nada Marina...-contestó sin ánimo.

-¡Luisita!, no me hagas esto- exclamó desilusionada.- Hiciste una promesa Luisa Gómez, me prometiste que nos graduaríamos juntas, si decides no ir a despedir a los niños Benigna no te dejará presentar el examen y Natalia no te dará los créditos extra.

-Lo siento Marina...

-¡¿Lo siento Marina?!- levantó la voz -. Esa no es una respuesta Luisa, ¿te das cuenta que con tus decisiones no sólo te afectas a ti sino también a los demás?

-Marina...- Luisita quitó la almohada que cubría su rostro, se recargó en el pequeño respaldo de la cama, acercó las rodillas a su pecho y rodeó con ambos brazos sus piernas.

-Quita esa cara y dime qué está pasando.

-No pasa nada, simplemente no voy a ir.

-¡Luisita!- agitó las manos-. Haga lo que haga no te haré cambiar de opinión, ¿cierto?

-De verdad lo siento Marina- agachó el rostro.

-No puedo con esto Luisi.

Marina salió furiosa de la cabaña, definitivamente no iba a dejar a Luisita en esa situación, tenía que hacer algo, pero antes necesitaba tomar un respiro.

-¡AUCH!

-Ah, lo siento- Marina se disculpó, salió de la cabaña tan furiosa que no se dio cuenta que Amelia iba caminando en la misma dirección que ella.

-¿Estás bien?- preguntó la morena.

-Nooo... bueno sí... ashhh- respondió confundida.

-Definitivamente no estás bien, ¿qué sucede Marina?

-¡Es que no puedo con ella! ...

-¿Con quién?

-Pues con quien va a ser... con Luisita.

-Con Luisita, ¿qué pasa con ella?

-¡Eso mismo quisiera saber yo!- resopló agitando las manos-. No quiere salir de la cama y se niega a ir a despedir a los niños. Amelia ¿sabes lo que significa?, que todo lo que Luisita logró en el campamento se fue al carajo. Debí hacerle caso cuando me dijo que era mejor no venir, tanto esfuerzo para qué, para qué Amelia, si al final iba a terminar así.

Amelia entendió de inmediato lo que pasaba con  Luisita. El motivo de su comportamiento era la inevitable despedida con Melissa.

-Marina ve a ayudar a los chicos con el desayuno yo me encargo de Luisita- trató de calmar a la chica.

-Amelia ¿estás segura?, cuando a esa rubia se le mete una idea en la cabeza no hay quien la haga cambiar de opinión.

-Segura, anda ve al comedor, deben necesitar tu ayuda para preparar el desayuno.