XIII

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El espadachín se marchó a ver a la doctora. Era mejor no llevarle la contraria a Robin, él sabía que su jefa no estaba contenta. La mujer se disponía a despedirse y cerrar el evento cuando el rey regente la interrumpió.

—Majestad, ¿es acaso válido nombrar a alguien en la Orden de la Rosa? Esa orden está inactiva desde hace tiempo —cuestionó Crocodile, llevándose la atención de la gente, y ella lo miró con condescendencia.

—Es completamente válido, su excelencia —respondió Mihawk por ella—. La Orden de La Rosa es la guardia personal de la reina, jamás se disolvió, aunque no sea utilizada, y está claro que de ahora en adelante si lo será. Y su majestad tiene potestad para nombrar la caballería de su orden.

— ¿Es válido también que le entregue un título nobiliario?

—Lo es. Roronoa adquirió el título de Barón cuando comenzó a trabajar para mí. Y todo caballero obtiene un ascenso en su nombramiento, por lo que es lo justo que sea promovido a Vizconde. Le sugiero que pare de cuestionar mis decisiones en público, su excelencia. Para este tipo de discusiones, tenemos las reuniones del consejo. Damas y caballeros, gracias por participar del Festival Medieval de este año. Esperamos su apoyo en el baile histórico de la victoria para cerrar esta temporada social, la arena queda cerrada. Vivat Regnum.

La pelinegra se marchó, enojada, dejando a todos atónitos. En el bar, Usopp y los demás se miraban unos a otros, sorprendidos, nadie jamás había visto a la reina tan furiosa. Los noticieros también hablaban de ello, todos especulaban de si tenía que ver con su rumoreado romance con el ahora caballero y su estado de salud, con el evento en sí, con el hecho de que la desobedecieran cuando pidió que se detuvieran o por el cuestionamiento del regente.

—Sólo espero que Zoro esté bien —se atrevió a decir Nami, y Luffy le dio una palmada en la espalda.

—Lo estará, confía en él.

—Claro que sí, el marimo no se dejará vencer tan fácil. Hierba mala nunca muere. Y menos ahora que el maldito es parte de la nobleza, con eso de que ahora es un caballero, cuando regrese no se callará.

—Dalo por hecho, Zoro-san te lo restregará en la cara cada vez que pueda, Sanji-san. ¡Yohoho!

—Qué genial es que Zoro sea un caballero, se lo ha ganado. ¡Yo también quiero ser uno! —dijo Luffy, y los demás lo miraron, sonrientes, mientras rodaban los ojos.

—Esta noche tenemos que llamarlo, y ver si está bien —habló Jinbe, y todos asintieron.


Una vez que estuvo dentro del castillo, se apresuró al consultorio, pero le indicaron que no era recomendable que pasara, ya que su guardaespaldas estaba siendo suturado. Makino le sugirió que se cambiara, pero ella no quería hacer nada hasta que Zoro no estuviera a su lado. Se sentó en el salón del té, y la secretaria le llevó una taza de té de jazmín que la ayudó a relajarse un poco. Pero no le duró mucho, ya que Crocodile entró al salón hecho un demonio.

— ¡¿Acaso estás demente, maldita mocosa?! ¡¿Quién te crees para hablarme de ese modo delante de todo el mundo?!

—Soy la maldita reina —respondió, aún hecha una fiera—. Esto te lo buscaste tú mismo, nadie te mandó a cuestionarme. Me tienes harta, Crocodile. Siempre buscas la manera de minimizarme, no te basta con hacer de mi vida un infierno, también quieres buscar la manera de ridiculizarme frente a todos, pero no te lo voy a permitir.

— ¡Tú no eres nada! ¡Tu propia madre te arrebató el poder político! Me estás sacando de mis casillas, Robin, parece que deshacernos de Saulo fue una mala decisión, es evidente que él era quien te mantenía mansa, porque ahora pareces una perra rabiosa.

Absoluta VirtuteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora