22 | HARRY Y LOUIS, LOUIS Y HARRY +18

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Auténtico Harry:

¿Cómo estás? Aquí las cosas marchan bien por el momento.

Ha pasado día y horas desde que nuestro estúpido padre me ha enviado esa carta. Y lo digo en todas sus letras porque sabemos que siempre lee nuestras cartas antes de llegar al otro.

Como imaginarás, no recibí la noticia de buena forma.

Casi muero tras vomitar durante lo que casi fue una hora, y por si fuera poco, fue justo cuando Diana estaba por hablar conmigo. Así que tuvo que verme vomitar, estaba aterrada, hasta que Legolas, el buen doctor padre de Liam, apareció y fue un alivio.

Por cierto, el compromiso de Liam y Lía fue suspendido hasta nuevo aviso, ocurrió algo fuera de lugar, aunque no estaba bien del todo, la decoración era muy azul... sabes como odio el color azul, fue tan sofocante. Bueno, omito los detalles ajenos al punto.

Por si se lo están preguntando y por lo mucho que me he demorado en escribir esta corta carta... sí, ya hablé con Diana.

Tuvimos una sentimental charla en donde aceptó convertirse en definitiva, en mi esposa. Ella se encargará de una fiesta de compromiso a lo que dé los preparativos en dos semanas, y a finales de mes, de ser posible, nos casaremos tal y como el asqueroso Simón quiere.

Discúlpame por todo esto, discúlpame por hacerte pasar por esto tan horrible y asqueroso, discúlpame por vivir tu vida mientras tú estás muriendo y no me permiten verte, discúlpame porque estaré aprovechándome de la pureza del corazón y el cuerpo de Diana, discúlpame por todo, Enrick.

Me he martirizado para escribir estas pocas líneas, a penas y podía agarrar la pluma porque las manos me temblaban.

Es algo repulsivo, asqueroso, enfermo, pero es lo correcto para alejar a todos del peligro ¿No es así?

Te adoro, Enrick. Eres la mitad de mi vida. 

Tú que eres fiel creyente, reza por nosotros.

Tu siempre fiel hermano Edward.

20 de diciembre.

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Para el otro auténtico Harry:

Estoy bien, supongo. Me he sentido mejor, pero no es como si estuviera peor. No tienes nada de qué preocuparte.

Confío en ti, Edward. Confío en ti y dejo a todos en tus manos, en especial a Diana. No te preocupes, lo comprendo.

Claro que deseo ahorcarte con sólo pensarlo, pero lo comprendo. Además, no puedo hacer nada.

Sólo asegúrate que todo ocurra tal y como nuestro padre quiere. 

Por cierto, no te olvides de alimentar a Morsi, ahora que siento que moriré pronto, me veo en la necesidad de recordártelo porque sé que aún no lo mataste, por algo no me lo haz mencionado en los últimos meses. Por favor cuídalo, Diana y Charlotte sufrirían mucho si lo pierden, revisa su jaula y revisa su comida siempre. 

Morsi es una parte de mí, así que es como si estuviera ahí con ustedes. Asegúrate de que esté bien.

Y como es el último intercambio de cartas que se me permitirá contigo este año, sólo me queda decir...

EL VUELO DE LAS GOLONDRINAS | FINALIZADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora