Charlotte lo hizo con segundas, pidiendole ayuda para echarse crema, y Niall se dedicó varios minutos a hacerlo, regocijándose en el tacto de su piel, casi ruborizandose cuando se dio cuenta que estaba desnuda. Acarició sus pechos, los cuales apretó con algo fuerza que hizo que ella soltase un gemido, casi un gritito.
Acabó el masaje con un-te quiero-y un tierno abrazo, que ella respondió mordiéndole en el pectoral, para inmediatamente después darle un beso en el mismo sitio, mientras metía su mano entre su traje.
Hizo que Niall se sentase en la cama, y empezó a besarlo y meter su lengua en toda su boca, lo que provocó una inmediata erección en él.
Entonces, con la mayor parsimonia de la que era capaz, Charlotte tomó su mano, esperando quo reaccionase- ¿No tienes pensado tomarme ahora mismo?-
Lo tumbó a su lado, y volvieron a besarse apasionados, y en una de las pocas veces que apartamos los labios, Charlotte volvió a hablar, y sí que estaba con muchas ganas de hablar-
— ¿No decías que te gustaban mis tetas? ¿Por qué no te las comes?—
Con él se habia soltado de tal forma...
Niall conoció muchas etapas nuevas y deliciosas de su esposa que le encantaban y que nunca pensó conocer.
Así que sin decir nada, el castaño empezó a besar su cuello, bajó por su escote, y empezó a chupar su teta derecha, donde alternaba una gran succión donde metía lo que le entraba de sus enormes y magníficos pechos en la boca, con momentos en los que su lengua jugueteaba con su pezón, lo que hacia que su esposa suspirase de placer.
Tras recorrer la distancia de una teta a la otra, con la lengua, repetí el proceso en la otra, y cuando se cansó de esta, juntó ambas en el centro, para chupetear ambos pechos a la vez, lo que hizo que Charlotte, ya bastante excitada, pidiera a suplicas que entrara en ella.
Mientras le quitaba las bragas que era lo único que tenía puesto, lo pensó... en lugar de meterle el pene que estaba ansioso por entrar en su dulce y húmeda cueva, metió su cara, para empezar a comerle los pliegues, empezando muy despacio, y con unos cariñosos besos y lambetazos por los labios superiores, para después empezar a chupar, y lambérselo provocando grandes gemidos en ella.
Y cuando Charlotte ya no pudo contener mas las ganas de ser penetrada, agarró sus orejas y le hizo subir para que empezase la penetración, al mismo tiempo que la ventana se abría de golpe por el fuerte viento, dando paso a la brisa helada de invierno que entraba por el balcón, les acariciaba los cuerpos completamente desnudos. Pero no importó mucho.
Tras unos minutos bombeando en esa posición, quiso cambiar, y ser ella la que lo montase, disfrutando de cada centímetro de su pene erecto en su interior, mientras lo hacia disfrutar como un loco.
Pero su mente perversa no estaba aun conforme, y entonces se levantó, para apoyarse en su cara, lo que hizo que automáticamente, Niall empezase a chupar su muy mojada vagina, pero solo lo que ella le autorizaba, ya que enseguida se levantaba, para que no pudiese seguir con su placentera labor
Entonces volvió a montarse, lo cual no pudo soportar mucho mas, y se corrió en su interior entre grandes alaridos, y por fin la recibió en brazos, y ambos agitados y sudorosos se besaron.
-Te amo-y viéndola a los ojos, como dos enamorados, Niall empezó a acariciar su clítoris hasta que le hice correrse.
A los pocos minutos de acabar, Charlotte no quiso darle tregua.
Sintió que Niall tuvo suficiente tiempo para recuperarse, así que lo tomó del pene, y se apresurí a meterselo en la boca, chupando con tal maestría que lo dejó completamente indefenso ante ella.
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EL VUELO DE LAS GOLONDRINAS | FINALIZADA
De TodoHarry, Duque de Montarier, parecía alguien bastante interesante. El pensamiento aún más firme de mantenerse apartado de la especie más baja de ese mundo, le rondaba la cabeza; pero algo lo hacía querer seguir ese camino del cual se había alejado. A...