🌻
HEATHER
¿Pero en qué mierda estaba pensando?
Vale, no tomaba las mejores decisiones y eso ya me había quedado más que claro miles de veces antes. No sabía qué hacer a la hora de decidir, cuestionaba si lo que estaba pensando era lo correcto o si debería hacer otra cosa.
Era tarde, era la una de la madrugada, para ser más exacta. Mamá me asesinaría si se enterara de que salí a hurtadillas de la casa para encontrarme en una cafetería abierta las veinticuatro horas con Victoria Luettgen, aunque podía ser que el castigo no fuera tan grave porque fue con ella con quien me encontré.
Cuando decía en forma de broma que mi madre quería más a la que era mi mejor amiga que a su propia hija, una gran parte de mí lo decia en serio. Había algo en esa chica que hacía que todo el mundo la adorara, incluso más que a mí, entre esas personas se encontraba mi madre. Siempre decía que yo debía ser más como ella: responsable, decidida, dedicada. Esas eran las tres más recurrentes, aunque habían más palabras que utilizaba para compararme con ella. Me costaba admitir que le tenía envidia por eso, aunque trataba de ocultarlo lo mejor posible.
Mi necesidad por ser y lucir perfecta ante los ojos de los demás, en su mayoría, se debía a que así quería que me percibiera mi madre. Pensaba que, después de toda la mierda por la que la hice pasar, lo mínimo que podía hacer era convertirme en la hija que ella siempre quiso. La hija ciegamente obediente, inteligente, decidida, segura de sí misma y que tenía su vida en completo orden. En resumidas palabras, yo no era el prototipo de su idea de la hija perfecta.
A sus ojos, no había algo que pudiera hacer bien. Siempre arruinaba algo de una manera u otra. Se enfadaba si hacía algo o si no lo hacía, por lo que muchas veces me limitaba a estar en donde fuera que ella no estuviera.
Derek era el novio perfecto para la hija perfecta; mi madre lo quería por ser un chico respetuoso y prudente. Lo aprobaba, lo que significaba que había hecho algo bien. Por eso nunca le había contado sobre cómo era mi relación con él, sino que prefería mentir diciendo que todo con Derek era maravilloso. Jamás le conté sobre las infidelidades por su parte o que besé a Archer, mucho menos le hablé sobre cómo Ploense también prefería a Victoria Luettgen sobre de mí.
Todavía no me reunía el coraje suficiente para contarle la verdad de mi relación con Derek. Imaginaba sus mirada decepcionada para cuando le confesara que llevábamos poco menos de dos meses separados.
Si contarle sobre Derek me daba miedo, el nivel de terror que le tenía a hablarle del motivo por el que la rubia y yo dejamos de ser amigas era similar al de lanzarme del puto edificio más alto de Nueva York.
Acaricié la boquilla de la taza de té que ordené en cuanto llegué, mi mano temblaba por los nervios que me daba el no saber lo que sucedía.
Me llamó en plena madrugada, con la voz quebrada y sollozando. Apenas pude entender su temblorosa voz preguntándome si podíamos vernos en ese momento. Me maldije a mí misma por no pensármelo demasiado antes de acceder y pedirle el nombre del lugar en el quería que nos viéramos. Y, ahora, ahí estaba. Sentada en silencio en una mesa de una vieja cafetería que a ella le gustaba.
Tampoco era como si tuviera algo mejor que hacer cuando ni siquiera tenía sueño porque la ansiedad me carcomía a cada segundo.
ESTÁS LEYENDO
El sol, las estrellas y tú
Fiksi Remaja"Éramos una perfecta combinación de nuestros miedos más hermosos y nuestras peores fantasías." BORRADOR ✺ FERNANDA ARCURI ✺ 2 0 2 0