Cyber Lover 〃ChanLix

02

Jisung lo recibió con felicidad, hace rato no se veían por los apretados horarios del australiano. Era fin de semana, por lo tanto tenía la decisión de no ir al trabajo.

— ¿Cómo estás, Lix?— Preguntó con una sonrisa. — Bueno, además de estresado por el trabajo.

— Bien, estuve utilizando la aplicación y eso. — Comentó tranquilo. — Es bastante simple, no me convence del todo.

Lo miró divertido, Felix no dejaba de usar el celular con una linda sonrisa, una que no vio en años. Era obvio que estaba la utilizando, los brillos rosas se reflejaban en la pálida piel del pecoso. Estaba bastante felíz de que por fin su amigo se disponga a distraerse del pasado, ese que solo lo ponía de mal humor a los dos.

Han, en silencio se dispuso a preparar café, una receta que le había pasado un amigo lejano. También utilizaba la aplicación, pero solo para pasar el rato, no buscaba algo realmente serio, solo algo de diversión de una noche. Admitía que también tenía la misma inseguridad de Lee, no quería terminar sufriendo por algo tan insignificante como sería amar.

Dió un pequeño suspiro, colocando las tazas y las galletas en una bandeja, recordando los viejos tiempos en que el australiano era realmente felíz. Extrañaba su sonrisa sincera, las risas descontroladas, absolutamente todo lo que era en un principio.

Ya guardando sus recuerdos en el baúl, se dirigió a la sala principal con la merienda hecha. Su mejor amigo seguía igual que cuando llegó, pegado al celular como mosquito a lámpara, con una hermosa sonrisa que lo tranquilizó. Quizás si podía volver a ser felíz como antes, volvería a salir más seguido a las pequeñas reuniones entre compañeros.

— ¿Con quién hablas, picaron? — Rio Han con la alegría llenando su corazón.

— Ayer me habló un chico ¡¿Puedes creer que viene de Australia también?! — Comentó con mucha emoción, sus ojos brillaban como en los viejos tiempos.

— Me pone felíz que puedas socializar un poco más.— Sonrió Jisung sincero. — ¿Por qué no lo invitas a salir?

Felix cambió su expresión a una sumamente seria, no quería salir lastimado de nuevo. El chico era tierno y todo, pero no caería en sus encantos, menos de un desconocido. Apenas habían hablado una vez, y no le parecía correcto invitarlo a salir tan fácil.

— Estoy con mucho trabajo, no puedo. — Intentó una escusa rápido.

Más que una escusa era la verdad, no podía saltarse horas de trabajo solo en una pequeña reunión, no cuando tenía un desfile importante tan cerca.

— Ay, Lix.— Suspiró desganado el castaño. — Debes dejar de pensar solo en el trabajo. Sé que es el que siempre soñaste, pero no dejes de lado las cosas que también podrían hacerte felíz.

— Trabajar me hace muy felíz, con eso tengo suficiente.

Mentira, estaba contento pero no lo llenaba por completo, sabía que algo le faltaba, pero siempre lo ignoraba. Prefería seguir su rutina a arriesgarse por lo desconocido, estaba bien así, no quería desperdiciar horas en otras cosas.

Dió un sorbo al café mientras dejaba el celular a su lado, no entendía porqué el tema de lo desconocido le ponía tan incómodo. Antes no era así, adoraba descubrir cosas nuevas, explorar nuevos mundos, pero eso se esfumó apareciendo en su lugar la melancolía.

— No te conformes con tan poco.— Habló Jisung luego de un silencio algo incómodo. — De viejo te arrepentirás por no disfrutar la vida como se debe.

Lee giró los ojos con desinterés, ya le había dicho eso muchas veces. Estaba bien que su amigo quisiera que sea felíz, pero no era su problema, no debía meter sus narices en dónde no lo llamaban.

El castaño bajó la mirada rendido ¿Por qué nunca tomaba en cuenta sus recomendaciones? Quería lo mejor para él, lo quería como antes, curioso por todo.

— Además, salir a pasear con alguien no te quitaría tiempo de vida ¿sabes? — Le dió una mordida a una de las galletas. — El desfile está cerca lo sé, pero no por eso te niegues a salir.

— Ya me lo haz dicho muchas veces, entiende que estoy bien así. — Contradijo el pecoso. — Te tengo acá, tengo un trabajo estable, no me falta nada. Cuando me siento solo estoy contigo y estoy bien.

— No siempre estaré aquí para apoyarte. — Susurró Han, un susurro audible y desesperado. — Yo también tengo una vida, no estaré siempre a tus manos para cuando te sientas así.

Y lo entendió, podrían malinterpretarse sus palabras, pero Felix lo entendió a la perfección. Eran adultos, ambos tenían responsabilidades más allá de su amistad. La verdad dolía, pero había que aceptar que no siempre tendría a sus únicos amigos a disposición.

— L-lo siento, lo que quise decir es que-

— Tranquilo, entendí todo.— Tranquilizó Lee. — Tienes razón.

Jisung quedó estático, quizás tomaría en cuenta tener una nueva amistad, capaz algunas aventuras de por medio. Estaba a tiempo de disfrutar más allá del trabajo, de disfrutar la vida como un loco. Una sonrisa se instaló en su rostro, había dado en el clavo.

— No digo que dejes tu trabajo, solo que te tomes un tiempo para tí. — Siguió Han.

Sería una larga tarde de charla reflexiva, Felix lo sabía perfectamente. Ésta sería la definitiva, la que lo haría intentar nuevas cosas, la que le traería nuevas oportunidades.

...

Luego de estar en la casa de su mejor amigo, llegó a casa sano y salvo. Definitivamente lo había convencido, esperaba no arrepentirse.

Observó su celular, había olvidado que se encontraba hablando con Chris, así que decidió contestarle.

Hola lindo!!

¿Cómo fué el día?

Disculpa por contestar tan tarde

Estuve trabajando y en casa
de un amigo

Exelente

yo también estuve trabajando

Ni siquiera tuve tiempo
de cambiarme!!

Inesperadamente una foto de su rostro apareció, el muchacho era sumamente hermoso.

No te parezco bonito?

Lo eres si soy sincero

Yo pienso que tu debes
ser mucho más bonito que
yo ;)

Felix soltó una risa al aire ¿Cómo este chico podía ser tan atrevido? Lo admitía, el muchacho era sumamente hermoso, con unos aires sumamente calientes. Por su cuerpo recorrió una extraña sensación, una que no lograba recordar.

Ignoró todo y siguió hablando con Bang, de todas formas era bastante divertido.

Las horas pasaron y no sabía que podía soltarse tan rápido con alguien ¡Hasta le había mandado una selfie suya! Quizás era solo el muchacho que lo hacía sentir muy cómodo. De todas formas, parecía alguien maravilloso, sumamente interesante, hermoso.

Por otro lado, se encontraba Christopher. Sus alarmas se prendieron al ver aquella foto, lo conocía. Habían ido a secundaria juntos, siempre le había atraído Lee, pero éste se veía de por lejos que traía algo con alguien más.

— Lee Felix, aula 3B. — Susurró. — ¿Quién te hizo tanto daño?