🏩.੭ु Cyber Lover
Felix al enterarse de que su novio le estaba siendo infiel, sufre por unos largos años. Pero un día, Jisung le recomienda una dudosa aplicación, obligando al chico a descargarla en su móvil.
Al principio no estaba muy convencido...
La sala estaba en silencio, Jisung no quería cancelar la cita, algo sumamente extraño para el rubio.
— Te dije que no vayas — Repitió Felix un poco frustrado — No lo digo de malo, solo que... le darás más iluciones ¿Entiendes?
La mirada penetrante de Han lo estaba matando, ni siquiera sabía que le pasaba por la cabeza al aceptar otra cita con el manager de Bang. Le había dicho que estaba obsesionado con él, entonces ¿Por qué la aceptaba si tanto le molestaba?
El muchacho volvió a negar con la cabeza, Lee se estaba hartando de la actitud inmadura.
— Tendrías que haber visto sus ojos — Murmuró despacio, quizás con más tranquilidad de la esperada — No es como los demás.
— Él busca una relación seria, no algo de una sola noche, Jisung— Recalcó.
Vió como su amigo bajaba la mirada algo apenado, supo no había utilizado las palabras correctas. No quiso tratarlo de cualquiera, pero ni sabía de que otra manera decírselo.
— ¿Y si yo también estoy buscando algo serio? Ya sabes, alguien que me quiera de verdad — Susurró el chico con la voz casi rota.
— ¿Estás seguro de ello? — Preguntó serio.
Han asintió con la cabeza lentamente, desde hace tiempo tenía aquella idea en su cabeza. Quería un amor de verdad, alguien con quien compartir lindos momentos, pero a la vez el miedo lo comía, no quería terminar como Felix.
— Creo que estas muy confundido — Comentó — Primero dices que no para de llamarte y que es molesto, luego dices que quieres algo serio. Jisung, de verdad no te entiendo.
Era la verdad, estaba en un poso profundo lleno de inseguridad. A la vez quería conocer a esa persona especial, pero ya nadie lo tomaba en serio, menos Minho. Quería intentarlo al menos una vez, sentir el amor profundo más allá de una amistad.
— ¿Cancelas?
— No — Respondió seguro.
El rubio giró los ojos ante lo terco que se estaba volviendo su amigo. Se quedaba sin opciones, cada vez se volvía más imposible ayudarlos.
— Entonces voy contigo.
— ¿Disculpa? — Preguntó ingenuo frunciendo el ceño.
— Como escuchaste, voy contigo— Repitió — Le diré a Chris que también vaya.
La cara del chico era un poema, uno difícil de descifrar. Estaba enojado, eso era un hecho, pero a la vez algo ¿tranquilo? Para Lee era la única alternativa para que todo vaya bien, mínimo para que Jisung se diera cuenta de sus propias intenciones.
— Voy solo — Soltó luego de un tenso silencio.
— Claro que no.
— ¿Para qué quieres ir?
— Para ayudarte más que nada — Suspiró derrotado — Ni siquiera sabes lo que quieres. Si buscas algo serio mínimo que sea con alguien que de verdad te guste.
Dió en el clavo, eso era notorio por el rostro afligido de Han. No era novedad de que en su momento estuvo sumamente enamorado de Hwang, siendo imposible intentar algo por la gran fidelidad ante su amigo. Felix lo sabía, mucho no le importó al conocer lo buena persona que llegaba a ser Jisung.
— Está bien — Murmuró— Pero quiero que estén a tres mesas de distancia— Recalcó. Por fin cerraron en trato, uno de los más complicados para el rubio.
Lo mismo pasaba del otro lado con Bang, por razones distintas obviamente. Minho estaba completamente seguro de lo que hacía, más de querer enamorar al profesor extracurricular de inglés —Jisung—.
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Como fue planeado, Chan y Felix estaban a tres mesas de distancia. Vestían algo raros, tapados con gafas de sol, unos gorros y sacos negros, algo muy... diferente para vestir de noche, aún más siendo calurosa.
— Felix — Susurró el castaño llamando su atención— Tengo calor.
— Yo también pero sabes que Minho no puede descubrirnos, Ji solo sabe que estamos aquí— Comentó de igual manera.
El mayor soltó un quejido agudo ante la respuesta desinteresada del rubio. Al igual que los otros dos, también quería tener una cita con quien se encontraba al frente.
Ambos divisaron la perfecta sonrisa de Lee, sus ojos llenos de emoción al volver a encontrarse con Han. Ahora el menor entendía a lo que se refería su mejor amigo.
Min tomó una de las manos contrarias depositando un pequeño beso en ellas, una actitud diferente a la primera vez que se vieron.
— Hola — Saludó coqueto, eso hizo que Jisung se ponga rojo — Estoy muy feliz de que aceptaras la cena.
— Ah... Es que no tenía nada para hacer el día de hoy — Mintió con la voz entrecortada, estaba nervioso.
El rubio dirigió su mirada confusa hacia Chan, quien también se la devolvió de manera inocente.
— ¿Tu planteaste ésto? — Preguntó Lee menor en voz baja.
— No sabía de que otra manera ayudarlo— Respondió haciendo ojos de cachorro. — No me mires así, deja que ellos descubran lo suyo por su propia cuenta.
— Ese es el problema— Comentó enojado — Jisung es muy indeciso con lo que quiere.
— ¿Y tu qué quieres? — Preguntó en modo de defensa.
El rostro del pequeño se estrujó del enojo ¿Acaso lo estaba poniendo a prueba? Si bien no sabía lo que realmente estaba buscando con Chris, ese no era momento para hacer ese tipo de encuestas incómodas. Volteó la vista nuevamente, prestándole atención a Han, gran error, ahora no era el único enojado en la mesa.
— Te hice una pregunta, Lix — Dijo en un tono algo alto, casi como un mando.
— No es momento para hablar de eso — Respondió de igual manera.
— ¿Tu me quieres?
— Chris, Basta.
— ¿Por qué no respondes? — Cada vez el tono de voz se hacía más alto, casi sonando como gritos.
— Christopher, para de una vez — Soltó con furia golpeando la mesa — Que lo hayamos hecho un par de veces no significa que tengamos algo ¿Ok?
No estaba pensando en ese momento, solo quería dar una respuesta rápida aunque no tenga sentido. Lamentablemente aquellas palabras fueron tomadas como verdaderas ante el mayor, quien se arrepentía de haberle entregado su corazón tan rápido.
— Está bien, me voy.
Bang se levantó ante la mirada del menor, quien ahora estaba recalculando lo que había dicho. Salió por la puerta con la mirada gacha, no le importaba que lo vieran como un loco vestido de invierno en pleno día de verano.
Felix corrió trás el, con la conciencia haciéndole daño.
— Hey, espera no es lo que quise decir — Gritó trás la espalda ancha.
El castaño se dió vuelta, su mirada sumamente indiferente caló los huesos del pequeño.