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Estaban en el hospital nuevamente, ya había pasado una semana. Supuestamente ya tenían los resultados y Chan estaba más que nervioso por lo que dirían. Por suerte Felix estaba a su lado, dándole todo el apoyo que necesitaba y más.

Sus manos estaban unidas debajo de la mesa, esperando al doctor de la otra vez. Lee a través de ésta sentía los temblores que sufría, así que decidió dejar tiernas caricias.

— Señor Bang, lamento la tardanza— Dijo el doctor apenas pasó la puerta con rapidez.

— No pasa nada, doc — Respondió con una sonrisa.

— Vamos directo al tema ¿Le parece bien? — Chris asintió con la cabeza, y el hombre decidió seguir — Encontramos a su madre, ya le hemos comentado sobre tí. De hecho quiere verte lo antes posible.

El castaño estaba realmente feliz, no sabía como explicar los sentimientos que estaba traspasando en ese momento.

— ¿De verdad doctor?

— Si, al igual que tus hermanos.

— ¿Hermanos?

Su cabeza quedó en blanco ante la información. De un momento al otro no escuchaba nada a su alrededor, su sueño se estaba cumpliendo en un solo día.

— ¿Christopher? — Llamó el señor una vez más, ésta vez logrando su cometido — ¿Se encuentra bien?

— La verdad es que estoy de maravilla — Rio con la vista nublada, quería llorar de alegría.

El rubio solo miraba la escena con ternura, también estaba muy feliz de poder ayudarlo.

— Bueno, acá están los papeles— Comentó — Vé a la sala tres, tienes visitas.

Chan lo miró extrañado, pero al instante entendió lo que quiso decir. Se levantó de la silla con rapidez sin esperar más, salió casi corriendo por los pasillos.

Felix miró al señor con una sonrisa. Sabía quienes eran las visitas, no hacía falta pensarlo demasiado.

Con tranquilidad se despidió del doctor, y se dirigió a las afueras del hospital. Quería darle su tiempo a Chan, más ahora que estaba conociendo a su verdadera familia. Estaba muy feliz por ello.

Su celular vibró dentro de su bolsillo, pensó que sería su madre o alguna de sus hermanas, pero no fué así. Ni siquiera lo tenía agendado.

— ¿Hola?

— ¡Tú, maldito!

— ¡Jisung! ¿Cambiaste de número? — Preguntó entre pequeñas risas.

— Sí, había perdido el teléfono anterior y Minho me compró uno.

Básicamente ellos estaban más unidos que nunca. Según Han eran buenos amigos, pero Lee entendía que algo entre ellos estaba surgiendo. En toda la llamada habló maravillas de Minho, dejándole en claro que le estaba gustando.

— ¿Tuvieron una cita? — Preguntó Felix con un tono pícaro.

— Solo algunas salidas entre amigos — Respondió en un tono nervioso.

— ¿Se besaron?

— ¡Felix! ¿Cómo vas a preguntar esas cosas? — Gritó avergonzado, el rubio sabía que estaba rojo.

— Eso es un sí — Rio.

Ellos se gustaban, era obvio a pesar de que Jisung se negara. Desde el primer día mostró desinterés para parecer interesante, pero no sabía las consecuencias de sus actitudes. Ahora era él mismo, mostrándole su verdadera cara a Minho.

— ¿Y Chan?

— Está resolviendo algo, cuando pueda él te lo contará ¿Si?

— Aish, está bien — Dijo fingiendo molestia — Mañana hablamos, Lix. En un rato saldré con Min.

— Pásala lindo y usen protección — Bromeó antes de terminar la llamada.

La mujer tenía lágrimas en sus ojos, pero a la vez una sonrisa

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La mujer tenía lágrimas en sus ojos, pero a la vez una sonrisa. Por fin lo había encontrado luego de largos años, en un momento inesperado.

Como flashes recordaba aquél horrible día, el cabello demacrado de la señora quien se lo quitó de sus brazos.

— Christopher— Llamó con la voz rota — Soy yo, mamá.

El castaño se encontraba de igual manera, con la mirada totalmente sorprendida. Estaba allí con ella, su verdadera familia.

— Mamá... — Susurró casi roto — Mamá.

Ambos se abrazaron con fuerza, casi con miedo de que algo así volviera a suceder. Los sollozos era lo único que se escuchaba en la sala. Su madre dejaba pequeños besos en su mejilla, como siempre solía hacerlo cuando era solo un bebé.

— No volveré a quitarte el ojo, no quiero que te vayas de mi lado — Lloró la castaña — Te amo tanto, hijo. Tu padre está tan emocionado.

— Esperé casi toda la vida por ésto — Dijo Chan.

— Aquí estoy, no volveré a separarme de tí.

Cyber Lover 〃ChanLixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora