Tras aquel día en el que amanecí abrazada a Jungkook completamente desnuda me di cuenta de que realmente me gustaba él. Sabía que eso crearía unos pocos problemas a mi alrededor, pero debía dejarlo con Haesoul, sobretodo porque sabía que lo que acababa de hacer era ser infiel...
Ya habían pasado cuatro días, volvía a ser principios de semana . No había ido a clase durante una semana, sino era porque no quería ver a Haesoul era porque tras tener mi primera vez con Jungkook me daba vergüenza mirarle a la cara. Mi tío volvió dos días después de la visita de Jungkook y me regaló una sudadera que compró en la ciudad, que sigo sin saber cual era.
—Debo ir a clase—dije tras comerme el desayuno.
Parecía sorprendente pero iba con tiempo de sobra hasta para barrer la casa. No había podido dormir y por ello estaba bien despierta frente a mi plato vacío.
—Raro que no vayas tarde, ¿Todo bien?
—Sí, iré a cambiarme—dije levantándome de la silla.
Hasta mi tío sospechaba que me ocurría algo. Suspiré aliviada al ver que aún me quedaba una hora para ir a clase. Me cambié a unos pantalones negros anchos y una camisa de un color magenta claro de manga larga. Sonreí en el espejo, me gustaba como quedaba el conjunto con las botas negras. Agarré la mochila tras recogerme el cabello como pude. Bajé por las escaleras y me sorprendí al ver la figura de un motorista sonriente frente a mí.
—Buenos días, me sorprende verte tan temprano.
—¿Qué haces aquí a esta hora?
—Venía a llevarte a clase, pero veo que vas con tiempo de sobra. ¿Pasó algo?
Estaba roja como un tomate. En mi mente imágenes de aquella noche venían a mi memoria. Su cuerpo sudado, sus gemidos y gruñidos...joder...
—¿Subes o no?
Me acerqué a paso lento hacia él. Rió al ver como desviaba la mirada varias veces.
—No estés así, haz como si no pasó nada. Sube.
Agarré el casco y subí a la moto nerviosa, no podía estar tranquila si no paraba de recordar lo que había debajo de su sudadera roja.
—Sujétate.
Abracé su cintura rápidamente.
Evité todo lo posible a Haesoul y Jungkook. Literalmente me hacía la dormida cuando decían que alguien me buscaba en la puerta y evitaba salir de mi clase porque seguro estaban fuera esperando. Suspiré viendo el reloj, el recreo sería en breves.
—¿Estás bien?
Miré a Yaeyoon, parecía preocupada.
—Luego te cuento...son demasiadas cosas y te vas a poner a gritar.
—¡Qué narices hiciste para que me ponga a gritar!
—¿Pasó algo?—preguntó Renwoo curioso.
Me di un golpe en la frente con mi palma y miré al frente. El profesor estaba recogiendo.
—Luego, voy a ver a mi hermana.
—Yo voy a comer con Jungkook—dijo Haly dando palmaditas—Le pregunté si comería en la cafetería ahora conmigo y dijo que no había problema. Creo que ya le intereso un poquito.
—¿Sí? Por fin sientas cabeza—dijo Renwoo riendo.
Yo estaba seria, completamente seria.
—April, realmente estás rara.
—No es nada...
Se me cayeron todos los libros de la mochila en cuanto la levanté del suelo. Todos rieron como siempre, ni pensé en recogerlo. Pasé por encima con las manos en los bolsillos.
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The Mess - Jungkook
FanfictionLa torpeza nació con ella, lo llevaba en la sangre, y un día cualquiera despistada en historia acabo dejando su libro caer por la ventana. Claramente no tuvo suerte al golpear a un chico unos cursos menor...¿O al final se pudo considerar un desastr...