Just a game [loki y tú]

[15. Creer o no]

Ambos continuaron discutiendo, entre golpes y gritos, hasta que en determinado momento la rubia se levantó de golpe, empujándolo lejos.

—¡Suficiente! —exclamó— Deja de molestar.

—Sólo quiero hablar. —insistió.

—No hay nada de qué hablar.

—Por supuesto que sí, volví para que estemos juntos.

Ella hizo un sonido con la boca, mientras negaba con la cabeza.

—No te creo. —afirmó.

Quería hacerlo, pero era demasiado arriesgado volver a confiar en él.

—¡Es la verdad!

El enojo llegó definitivamente a ella.

—¡Mentiroso! —gritó, atacándolo.

Una nueva lucha comenzó, pero el pelinegro la derribó facilmente.

—¿Por qué otra cosa volvería? —dijo extendiendo los brazos a la defensiva.

El trono, nuevo plan, nuevos trucos, muchísimas razones para volver, pero le era imposible de creer que fuera por ella.

—¡Deja de jugar conmigo!

Lo pateó lejos, mirándolo totalmente irritada con la situación y con sus palabras engañosas, este se levantó del suelo, apartándose el cabello de la cara.

—Te amo, ___, no es un juego. —aseguró.

Su mente y corazón estaban confundidos.

Quería caer, quería amarlo con locura, volver a besarlo y abrazarlo.

Pero ¿y sí volvía a jugar con ella?

No lo soportaría, simplemente no podría.

¿Podría creerle o no?

Rio tristemente, negando con la cabeza.

—No caeré dos veces en la misma mentira. —comenzó a alejarse a un paso rápido.

—Espera... —corrió hacia ella, intentando tomarla del brazo.

—¡Déjame en paz!

La rubia lo tomó del brazo, jaloneándolo, para intentar golpearlo, pero en seguida él la tomó del otro brazo, haciéndola girar, de forma que le hacía una llave.

—Deja de ser tan testaruda, te digo la verdad.

—¿¡Esperas que te crea después de todo lo que me hiciste!?

Se safó de su agarre, girándose y abalanzándose a él, provocando que rodaran por el sueño, cuando se detuvieron, ambos se levantaron con los puños en señal de amenaza, pero antes de que pudieran golpearse, una voz interrumpió.

—¡Ya basta! —exclamó Steve— Sepárense.

La ojiazul se safó bruscamente, totalmente molesta.

—¡Él empezó!

Loki la miró indignado, ella se limitó a mirarlo mal.

—No me interesa quién empezó, hermana. Cuando estén calmados, pueden volver a hablar. —arqueó una ceja— Ahora vayan a sus habitaciones, niñitos.

Ella rodó los ojos, levantándose del suelo y sacudiéndose las rodillas, que se le pelaron levemente debido a la pelea, luego se acomodó la chaqueta y caminó hacia el ascensor cruzada de brazos; el dios miró al capitán, que le hizo la señal de que fuera también, por lo cual bufó y se levantó, sacudiéndose la ropa también.

—Esto es ridículo, no soy un niño.

—Entonces no actúes como uno. —sonrió.

Chasqueó la lengua y tomó el mismo camino de la mujer, entrando al ascensor junto a ella, uno a cada lado.

Hoy habrá maratón de capítulos, entonces tendrán notificaciones mías todo el día, jiji.