La Hermana De Mi Novio (TRADUCIDA)

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Cuando me estoy despidiendo de mi oficina por el día, me encuentro con mi jefe en el pasillo. Literalmente, camino directo hacia él. Me río de vergüenza y retrocedo, "estoy tan- lo siento ". Me río y él me sonríe ampliamente." No hay problema, ¿te vas? ", me pregunta. "Mmhm." "Odio ser una molestia, pero ¿te importaría venir a mi oficina por un segundo? Tengo una sesión de fotos para nuestro nuevo anuncio y necesito ayuda para elegir un traje". El explica. "No, no me importa en absoluto. Vamos." Digo, sin odiar la idea de ser estilista por unos minutos.

Llegamos a su oficina y tiene cuatro trajes colgados. Negro, gris, azul marino y otro gris, pero un tono un poco más claro.

"Entonces, me gustan todos. Yo elegí un color rojo intenso, pero mis amigos me dijeron que no". Se ríe y se apoya en el escritorio.

Me acerco y toco el material. Señalo uno de los grises. "Este. Tus ojos se abrirán más y te hará lucir más intenso." Yo digo. "¿Zapatos?" Él pide. Muerdo mi mejilla y miro las opciones que tiene y me inclino para agarrar un par. Siento que algo me roza el trasero si elijo ignorarlo. Los accidentes ocurren. "Estos." Yo digo. Cuando me levanto, él está directamente detrás mío. "Eso es lo que estaba pensando." Dice en voz baja con una sonrisa suave.
Sonrío y paso a su alrededor, "¿eso es todo lo que necesitabas?" "Eso es todo..." asiente.

Sonrío amablemente y hago mi descanso, "está bien, saldré. ¡Que tengas una buena noche!" "Tú también, Jennifer." Dice, tomando un tono mucho más serio.

Estoy sentada en el sofá con mi hermana y ella empieza a hacer preguntas... muchas preguntas.

"¿tú y Leah son... como... una pareja?" "En realidad no. No la considero mi novia... es solo... es complicado, supongo." Me encojo de hombros, no muy clara sobre la naturaleza de la relación entre Leah y yo de todos modos.
Mi hermana suelta una risa sarcástica, "¿qué lo hace complicado? Claramente se caen bien". "Ella se va, Lynda. Se irá por dos semanas pronto y después de eso... podría mudarse a Londres. No voy a entablar una relación que será a larga distancia". Digo y mi hermana se sorprende al escuchar esto.

"No sabía que se iba". "Yo- ella me dijo el otro día. No es gran cosa, y no quiero que digas nada que la haga sentir culpable por lo que sea que elija". le suelto, sabiendo lo buena que es mi hermana para hacer sentir culpable a la gente.

"¡¡No lo haré !!" Ella promete.;"Bien, ahora cuéntame sobre este chico con el que te has acostado." Cambio de tema y se queda boquiabierta.;"¡¿Qué?!" Ella jadea, haciéndose estúpida. "La cabecera de tu cama, golpea la pared, amiga. No soy tonta. Es por eso que siempre la pones totalmente contra la pared o te aseguras de que haya algo entre la pared y la cabecera antes de empezar a deshuesar". Digo y pongo los ojos en blanco.

"Vaya, ¿mi hermana es una experta en sexo secreto?" Lynda sonríe. "Tu hermana es muchas cosas". Le guiño un ojo y camino hacia la cocina.

***

Es medianoche y estoy acostada en la cama con los ojos bien abiertos. Por alguna razón, no puedo sacar a Leah de mi mente esta noche. Solo la idea de que ella se vaya... es mucho. Finalmente me siento feliz y como si tuviera algo bueno desde que Danny y yo rompimos. No estoy lista para dejarlo pasar. ¡No estoy listo para dejarla ir!.

Mi alarma suena y nunca he odiado más ese sonido. Dormí unas tres horas... fue una noche horrible. Me levanto y me visto, todo me lleva alrededor de una hora. Mientras salgo por la puerta me sorprendo.

"Te ahorré el viaje." Escucho su voz y me doy la vuelta sonriendo. "Eres un angelito". Digo mientras tomo mi café de la mano de Leah y la abrazo. Me quedo allí abrazándola un poco más de lo que normalmente lo haría. "¿Estás bien?" Ella me pregunta y yo miro hacia ella y muerdo mi labio. "¿Hola! Qué tal?" Ella pregunta.

Siento que mis ojos se llenan de lágrimas y luego una lágrima se desliza por mi mejilla. "¡No! No llores. Vamos, ven y dime qué pasa." Ella dice y volvemos al apartamento y nos sentamos en el sofá. "¿Qué sucede cariño?" Pregunta y usa su mano para secar mis lágrimas.

"No pude dejar de pensar en ti anoche y no quiero que me dejes." Yo digo. "Bebé..." murmura y me abraza. "Leah, me siento tan egoísta por decir eso, pero no creo que pueda perderte ahora mismo. Después de salir de mi compromiso roto y caer directamente en ti... No sé cómo estar sola. " Le digo a ella.

Ella frunce el ceño y sigue secándome las lágrimas mientras caen. "Deja de llorar, por favor. Jennifer, si te afecta tanto, no iré. Lo rechazaré ahora mismo. Odio verte así". Leah bromea. "¡No rechaces el trabajo!" Digo y ella se ríe y me mira enarcando las cejas. "¿Entonces, qué debería hacer?" Pregunta y me acaricia el muslo. "Ámame... ámame ahora mientras estás aquí". Yo digo.

Ella solo me mira por un segundo y luego me abraza con fuerza. "Lo hago." Ella dice y besa mi cabeza.

En este momento, mi hermana entra en la habitación. No tengo ganas de explicarle nada, así que me aguanto las lágrimas y me pongo de pie, "camina conmigo". Yo digo.

Leah y yo salimos y ella termina dejándome en el trabajo. "¿Tienes planes para hoy?" Le pregunto, ahora de un humor totalmente diferente.

"No, en realidad. Solo tengo una conferencia telefónica con Rachel y su prometido sobre la boda. Nada serio... ¿qué tal si te llevo a almorzar? " "Me encantaría. Recógeme alrededor de las 11:30". Yo digo. Ella asiente y besa mis labios un par de veces, "que tengas un buen día". "Tú también, bebé. Gracias." Digo. Cierro la puerta del auto y me dirijo al edificio.