CAPITULO 19.

1.1K 128 41
                                    

Los dos sabemos que soy muy ardiente


Exael Scott.

Solo han pasado 15 minutos.

Shaun no ha dejado de nombrar personas eliminadas. Esa mierda desconcentra y mientras tanto, yo no tengo ninguna maldita llave a parte de la mía. Solo somos 45 jugadores y el hotel, aunque no es precisamente mi estilo. Es grande, por lo cual, mi búsqueda al éxito ha sido una mierda.

Según el viejo hay alrededor de 100 habitaciones, claro que el hotel es de ¿4?¿5 pisos? Quien sabe, nunca pensé que un pueblo cutre contara con algo cercano a lo que nos ofrece la ciudad. Cómo sea, ninguna chica me ha intentado seducir hasta este momento, de hecho, ni siquiera he visto a una chica.

Solo espero el idiota de Matt y West la estén pasando tan mal como yo.
Que su trayecto sea infeliz y no sé topen con nadie sexy, solo así puedo asegurarme de que después de este día, ellos sean la burla en casa.

— Quiero ganar, ganar, ganar.—canturrea la voz de alguien en el pasillo.

Pretendo esconderme, pero inmediatamente al reconocer su voz, me doy cuenta de quién se trata y decido bajar la guardia. Quien corre peligro es él, no yo.

— Gana, gana, gana.—vuelve a decir. El chico pelirrojo mira sus manos mientras avanza saltarin, no parece entender el juego, o no parece importarle en lo absoluto.

Lo miro con fastidio cuando se da cuenta de mi presencia frente a él. Y cuando me mira, su expresión cambia completamente. Cómo si frente a él, estuviera postrado el mismo diablo.

Que no lo culpo, pero hace tiempo que soy todo un angelito.

— No, no, no ¿Que haces aquí? Tú eres malo. ¡Fuego! ¡Fuego! ¡Paren el fuego!

El chico grita y salta dando vueltas en su propio eje. Definitivamente no parece muy cuerdo, lo miré un par de veces antes, Eider lo dijo una vez;
El chico tiene la edad mental de un niño pequeño, uno muy fastidioso que sufre ataques de pánico cada 5 segundos.

— ¡Papá! ¡Mamá! ¡Mamá!

Intento tranquilizarlo acercándome a él, pero no funciona. Por lo que decido retroceder.
Supongo que es mejor explicar de lejos.

— Oye tranquilo.—le digo en un tono neutro. Ocultando el deseo que tengo de patear su cabeza.— No soy nadie malo, me llamo Exael ¿Okay? Solo quiero jugar y...

— ¡No! ¡Yo te vi, a tí y al fuego! ¡Son malos!—interrumpe apuntandome con el dedo índice.— Son muy malos.

¿A mí y al fuego?

Pero que estupidez.

— Dame tu llave o te quemo.— digo en broma.

Pero tal parece que el chico no está bromeando para nada, ya que grita tan fuerte que me invaden unas ganas inmensas de darle un golpe y dejarlo inconsciente.

Muy bien Exael, creo que son demasiados pensamientos agresivos por hoy.

El chico se deja caer al piso, y comienza a jalonear de su cabello con desesperación. Grita cientos de cosas que no consigue articular bien y que no entiendo. Solo consigo darle sentido a unas cuantas. Entre ellas "Fuego" "peligro" "miedo" y Eider.

LOS CHICOS DE LA ÉLITE ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora